Caliope.Eso fue suficiente para que yo sintiese una electricidad en mi cuerpo. No supe en qué momento estábamos dentro de mi habitación, aún besándonos, el se separó de mí y me miró fijamente a los ojos.
-Tus ojos son la luz de mi vida Cali- dijo poniendo un mechón de cabello detrás de mi oreja. ¿Cómo pudo pasar de personalidad tan rápido.
-Tus ojos también son los mi Luz Archi- dije viendolo mientras mi pulgar delineaba su rostro. Era perfecto.
Sin pensarlo más el se acercó a mí y me beso de nuevo, un beso profundo y necesitado, el beso se tornaba cada vez más intenso hasta que su mano fue entrando en mi vestido. Y fue ahí donde los recuerdos invadieron mi mente.
Flashback.
Un hombre que decía amarme, al que yo decía amarlo estaba encima de mi, golpeándome y yo sin poder moverme. Llorando, pero sin poder gritar.
-¡Dios! Esto está tan rico, y todo esto será mío, chulada- dijo mientras pasaba su lengua por mi cuello.
Mi cuerpo no reacciona, mis lágrimas inundaban mi rostro, mis manos temblaban mientras tratan de alejar al hombre encima mío, pero no lo lograba.
-Por favor, déjame- dije en un susurro con la poca fuerza que tenía. Me sentía débil, demasiado débil.
-No hables reina, te va a gustar, al principio todas se resisten, pero luego, todas gritan, todas gimen debajo mío, viejas, niñas, jóvenes, todas lo hacen, así que por qué no empezamos- dijo mientras se desabrochaba su cinturón y con ello bajaba mi licra junto con mis bragas.
Nunca desee tanto no ser mujer como en este momento.
-¡ERES UN CERDO!- dije llorando mientras el se introducía dentro de mí.
-¡Basta por favor!- pedía una y otra vez. Pero el no lo hacía. Me lastimaba cada que entraba en mí. Y a su vez que lo hacía, sentía asco por mí, sentía culpa por haber llevado un vestido a la fiesta de fin de año, a mi graduación de prepa. Me sentía culpable de ser mujer, me sentía culpable de que me estuvieran violando.Lloraba y gritaba, pero no había nadie, nadie me escuchaba.
-Vas a rogarle a Dios por morirte, por qué te voy a llevar al límite de la locura- Dijo el mientras me golpeaba, y a su paso lo hacía de manera más brusca. Teniendo razón, pues yo ya le rogaba a Dios por morirme.
El siguio haciéndolo, mientras me golpeaba, haciendo que yo perdiera la fuerza que me quedaba hasta para respirar.
-Te dije que serías mía por las buenas o por las malas amor, pero preferiste por las malas- dijo embistiendome más y más fuerte. Provocando un dolor y con ello más gritos silenciosos pidiendo que parará de mí parte. Mis ojos pesaban demasiado,
Yo siempre dije, pensé e incluso aseguré, que si algún día era yo la mujer a la que estaban violando, los morderia, los arruñaria, los golpearía en los genitales, pero no hice nada, no pude hacer nada.
Sin más el se fue, dejándome desnuda, tirada en una carretera de Tamazula.
Fin del Flashback.
Iván.
No sabía que verga había pasado, estabamos besándonos, cuando ella se quedó viendo a un punto fijo, llorando, y de esa manera comenzando a hiperventilar.
-¡Ey princesa mírame!- le decía una y otra vez. -Verga, Caliope reacciona- le dije mientras la sacudía un poco.
Ella había entrado a un estado de shok, y yo no sabía que hacer. Mi vista se fijó en sus labios, estaban morados, sus ojos rojos y ella estaba más pálida de lo normal. Ella no podía respirar.
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𝐋𝐚 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐝𝐢𝐝𝐚
Fiksi PenggemarUn accidente que cambió la vida de toda una dinastía, de más de una familia, y con ello la vida de ella misma. Dónde la princesa perdida aparece, y con ella un nuevo amor.