Narrador Omnisciente.
📍Culiacán Sinaloa.
En el rancho escondido en la sierra de Culiacán, estaba el mayo Zambada. Sin creer que el amor de su vida, esa niña que perdió hace tantos años estaba de regreso, todo parecía tan irreal, nadie podía creerlo.
Ismael salió hacia el patio llamando la atención de su mujer que se encargaba de la bienvenida a su pequeña, y así con ella llamando la atención de sus trabajadores. Ismael se puso en medio del Rancho, saco el San Judas que cargaba en su pecho y lo junto con la medalla de la virgen de Guadalupe. Y sin más se dejó caer de rodillas. Siendo la primera vez para los presentes que vieran al Mayo Zambada adorrillado.
Mariel sin más que decir se acercó a él y lo abrazó.
-Ya estara con nosotros Isma, nuestra bebé ya estará con nosotros-
-No sabes cuánto sueño con volver a mirar su carita- dijo mientras sollozaba
Iván.
📍 Durango.
Miraba su cara una y otra vez mientras ella reía con los cuates contando historias de cuando era una niña, Don Gerardo asaba la carne junto con Vicente mientras platicaban animadamente y Ovidio, bueno el no paraba de sonreír y de tomarle fotografías.
-Cali ¿Has tenido novios?- serafín pregunto llamando la atención de todos.
Ella aclaro su garganta y rasco su nuca notablemente nerviosa.
-No- dijo mientras tomaba una botella de agua.
¿Que nos estás ocultando, niña?
El ambiente estaba tenso, se sentía, hasta que el menor de los Barraza hablo.
-¿Cuando dicen que se llevan a esta cabrona?- decía mientras la abrazaba.
-Mañana nos iremos- dijo Ovdio mientras se sentaba junto a ella empezaba a grabar sus rostros. Realmente se hicieron falta uno al otro todo este tiempo.
-Ivan- dijo Fabricio llamando mi atención- ¿Nosotros también podemos ir?-
-Nuestra casa es su casa compa- dije dándole una palmada en la espalda, y el me agradecía con la mirada.
(•••)
Caliope.
Estába muy nerviosa, demasiado, era la 4 vez que nos paramos en la carretera debido a mi vómito
-Cali, ¿Estás bien?- decía Ovidio mientras corría hacia mí, ya que el venía con sus hermanos y los Zambada y nosotros veníamos aparte.
-Si Ovi, tranquilo- dije mientras otra arcada se venía, y mientras el amarraba mi cabello en una coleta.
-¿Estás bien, chaparra?- dijo Serafín, yo solamente pude asentir, Ovidio dió un beso en mi frente y se fue a la camioneta.
-El me hace sentir celoso Caliope- dijo Fernando mientras avanzaba detrás de la troca de los chicos.-Te cuida tanto-
-Es mi alma gemela Fer, obvio que me cuida- dije ya para cerrar mis ojos.
••••
Aquí estaba, en ella camioneta junto con mis hermanos y mi papá Gerardo, entrando a un rancho, que en cuanto lo mire Miles de recuerdos invadieron mi mente. La troca entró al portón y mis nervios entraron en mí.

ESTÁS LEYENDO
𝐋𝐚 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐝𝐢𝐝𝐚
FanficUn accidente que cambió la vida de toda una dinastía, de más de una familia, y con ello la vida de ella misma. Dónde la princesa perdida aparece, y con ella un nuevo amor.