𝐒𝐞𝐫𝐞𝐧𝐝𝐢𝐩𝐢𝐚- 𝐅𝐫𝐞𝐝 𝐖𝐞𝐚𝐬𝐥𝐞𝐲 [+18]

53. arreglando el local.

—no me hablen de el.— pidió Lea en la cena, la chica seguía con algunas lágrimas involuntarias, jamás pensó que esto pasaría... Mucho menos llegó a imaginar el dolor que iba a sentir al verlo besar a otra chica.— Fred es un idiota total.

—hija, sabemos que tienes rabia-

—¿Rabia? Pensé que estaba sufriendo como yo, me sentía tan mal por el.— gruño apartando su plato, ni siquiera había logrado comer por el dolor de estómago a pesar de venir muerta de hambre.

—es que el quedó mal.— susurró Sirius y ella se levantó molesta, estaba harta de que sus papás lo justificaran, suficiente tenía ya con su dolor.

—en serio ahora no necesito que lo defiendan.— se levantó de la mesa y Sirius se arrepintió de haberlo justificado.

—Lea-

—¡Yo fui la que estuvo engañada todo este tiempo! Merlín, aunque lo justifiquen no harán que lo entienda más porque este dolor.— puso su puño en su pecho.— no se me va con nada...— sin más dio media vuelta para irse de ese lugar a su habitación.

Sirius y Lupín suspiraron, ella se notaba afectada, de una forma madura pero muy afectada.

Lea camino hacia su habitación pensando, ella jamás debió haber soltado ese golpe, por más molesta que estuviera era horrible, no la justificaba nada y obviamente era un aprovechamiento extremo porque a la hora que Fred le hubiera soltado una cachetada de vuelta por ella igual romper promesas sus padres lo castran.

¿Por que ella lo hizo?.

De idiota.

Lo que no era justificativo. Por un momento sintió que no podía hacer nada bien, es que todo se le vino abajo al saber que Fred... Fred estaba con alguien más.

No pudo hacer nada más que acostarse en su cama y comenzar a llorar totalmente despechada, ¿Como se permitió amarlo tanto y entregarlo todo?, Siempre había leído que jamás había que entregar todo tu corazón porque si lo destruyen iban a terminar justo como ella estaba ahora, sola.

De solo recordar ese beso su pecho dolía, si hubiera sabido esto jamás hubiera viajado, jamás de los jamases. Solo pensaba en que si se hubiera quedado y le hubiera dicho sobre arreglar las cosas juntos ella no estaría sola sino con Fred a su lado consolandola o dándole un abrazo.

—Lea...— llamo George en la puerta, ella se sentó en la cama y el noto las lágrimas en su rostro.— ¿Estas bien?.

—excelente me describiría mejor.— murmuró en una broma, George sonrió con nostalgia llendo a sentarse a su lado y Lea no demoro en abrazarlo para llorar despechada de nuevo.— me duele tanto George... Me siento tan... ¡Estúpida! Fui una estúpida.

—¿Te sientes estúpida por amar?... No Lea, no te sientas así... Siéntete feliz de que al menos tú puedes cumplir con lealtad y sabes amar de una forma muy linda.

—el está con ella, no quiero que esté con ella... La tengo que ver todos los días y ahora solo la veo y llega a mi mente el recuerdo de ella y Fred. Quiero olvidar todo.

—no digas eso... Se que no quieres escuchar nada de Fred pero el no está enamorado de ella ¿Sabes?.

—claro, por eso ella llega así nada más preguntándole por su ropa interior y besándolo. No quiero hablar de Fred, no quiero ni saber de el... le había traído tantas cosas y dejé las flores en su oficina-

—si quieres te las traigo o las llevo mañana a tu oficina, como quieras.

—si puedes sería genial, me costaron caras y prefiero cuidarlas yo.— admitió Lea bostezando, siempre después de llorar le venía el sueño.— voy a dormir George, muchas gracias por todo.