𝐒𝐞𝐫𝐞𝐧𝐝𝐢𝐩𝐢𝐚- 𝐅𝐫𝐞𝐝 𝐖𝐞𝐚𝐬𝐥𝐞𝐲 [+18]

81. tú mientes, Fred.

Me había costado demasiado el despertarme solo para prepararme para la boda. No tenía ánimos de absolutamente nada y no sabía cuánto había pasado, se sintieron como unas pocas horas cuando habían sido dos días completitos.

Mi padre me había dado muchos ánimos estos días, sobre todo con comidas y cariño. Eso logro animarme un poco, solo un poco.

Me maquille yo misma y sólo me hice unas ondas y dos pequeñas trenzas uniendolas atrás de mi cabeza luciendo aún más las ondas. Me puse unos aros de perla y un gloss.

—te ves muy linda, ¿Segura no quieres irte antes? Así llegas con Fred.

—segura. Fred...— disimule comiendo algo.— él se va a ir con George.

—esta bien.— se fue para seguir arreglándose y yo seguí comiendo pastel que estaba delicioso. Mire la hora y me di los últimos retoques para tomar mi bolso y abrigo.

Mi estómago estaba lleno de nervios, también de comida, pero más de nervios. Todo el camino se hizo increíblemente rápido, tan rápido que en un parpadeó me estaba bajando del auto. Me vi en la situación de mirar sigilosamente hacia todos lados asegurándome de no toparme con cierto pelirrojo. Note el auto ya estacionado de él y supe que estaba ya adentro.

—¡Entren rápido, Hannah ya está por bajar!— vi a una rubia mayor apurando a todos, incluyéndome a mí y pude deducir que era la mamá de las Abbott. Yo y mi padre caminamos rápido por llegar tarde y gracias a esto quedamos en uno de los últimos asientos, podría decir que no me gustó pero la verdad es que agradecí por esto. Busque con la mirada a quien estaba evitando y el estaba en la fila derecha por la cuarta fila y... Tenía un asiento vacío al lado que al parecer estaba reservando.

Esto me dolía, me dolía mucho, pero... ¿Cómo era capaz de engañarme después de todo?

Note como buscaba alrededor y cuando su vista paso cerca mío me agache fingiendo que se me había caído algo. Me levanté y note que le susurraba algo en el oído de George pero el parecía hipnotizado mirando a las damas de honor, en especial a una.

Pero me concentre en la boda notando las miradas de amor que le dedicaba Neville a Hannah quien lloraba, lo más tierno fue que Neville tomo su rostro con delicadeza y seco sus lágrimas como si ella fuera una obra de arte cara y él tuviera miedo de romperla. En los votos escuché esas palabras de amor y miré a Fred, y es que eso era exactamente lo que él me hacía sentir y lo que más me dolía es que yo no le hacía sentir lo mismo, por algo estaba buscando más por otros lados de-

¡Mierda, me está mirando!

Me hizo un gesto de confusión y aparte la vista rápidamente de él notando como ya era la hora de tirar el arroz. Me levanté y por más que el intento llegar cerca quedó en el mismo lugar y yo salí hacia afuera, les lanzamos arroz y comencé a andar jalando a mi papá conmigo a nuestra mesa correspondiente. Si, estaba literalmente corriendo de Fred Weasley y no me importaba, no iba a hablar con él. Lupin llegó con Tonks y en el quinto puesto pusieron al bebé Ted, era tan hermoso. Agradecí al cielo que las mesas fueras de cinco personas así no quedaba con Fred.

—hija, no has saludado a Fred.— papá me miró con intriga.— ¿No estarán peleados?

—¿Peleados? ¿Con Fred? Claro que no papá, solo nos saludamos con la mano y sabemos que después vamos a bailar e ir a casa... Juntos.— suspire tomando mi copa y bebiendo de esta. Levanté mi mirada y Fred me estaba mirando fijamente, al conectar miradas me hizo nuevamente un gesto notorio de confusión levantando sus manos, y al parecer me iba a invitar pero Harry, Ron y Hermione llegaron a sentarse a su lado donde estaba con George. No podía parar de mirarlo porque me dolía tanto y él solo me dio una sonrisa nostálgica lanzándome un beso pero yo seguía sería y aparte la mirada.