OtherLife [Rubegetta]

Nivel 15

El domingo entero lo decidió invertir en nada más que solo ocupar su mente en limpiar su casa de arriba abajo, comprar lo suficiente para volver a llenar su alacena y ejercitarse por el par de días que no lo hizo. Compro un te que llamo su atención en la tienda naturista, prometía que con solo una taza iba a dormir tranquilamente sus preciadas horas de sueño. No dudo de hechar mano a esa carta una vez, ya entrada la noche, el pensamiento de entrar a OtherLife atacó su mente.

Pero el te solo funcionaba cuando iba a dormir, estando despierto no podía liberarse de los cuestionarios pesados que su subconsciente le enviaba cada tanto. Estaba tan cansado de esa situación, tener tanto en mente algo de lo cual no podría encontrar solución alguna. Se molestó al verse a si mismo adentrándose en la universidad por el área más alejada de la facultad de artes, teniendo que caminar casi el doble de lo de habitual.

¿A qué le tenía tanto miedo? No, no era miedo lo que sentía ¿O si? ¿Pero a qué? ¿Por qué? Bufo exasperado, mordiendo el final de su lápiz con irritación a la par que intentaba poner atención a su clase ¿Y si el acosador ese decidía publicar algo ese día solo por qué Rubén le había llevado a su casa? No tener el control de lo que sea que pasaba le estaba carcomiendo la cabeza.

Observo de reojo a Fargan, sentado justo a su lado con la mirada perdida en algún punto lejos de la clase. Willy, su mejor amigo, frente a el escribiendo todo lo que el profesor de Cálculo procuraba por sus labios. Luzu, un par de puestos más atras por haber llegado tarde, texteando en su móvil a escondidas del profesor ¿Cómo reaccionarian si se enteraran lo que pasó en el juego?

Miro hacia su libreta donde solo había anotado un par de cosas ¿Enterarse de que? El no había hecho nada malo... Más que cosas vergonzosas. Se burlarían de como fue un hipócrita por hablar tan mal de los videojuegos y terminar enganchado a uno, le harían bromas sobre ello por muchísimo tiempo; años quizás. Sería algo de lo que se podría terminar acostumbrando ¿Y sobre la noche en el VIP? Bueno... Fargan no era un santo, ninguno de ellos lo era así que dudaba que vieran eso como algo imperdonable, se burlarían pero nada más.

Su gusto por Rubius... ¡El no sabía que era un hombre! Es que nisiquiera puede decir que fue lo que le hizo atraer pero de haber sabido que era un tío habría dado media vuelta.

No, no había hecho nada malo... ¿Por qué estaba tan empeñado en ocultarlo con tanta fiereza?

— Sam ¿Nos vamos?

Asintió hacia Willy y guardo su libreta en el bolso, después se encargaría de pedirle las notas a su mejor amigo pues apenas y había prestado atención al título de la clase. El ser tan callado toda su vida le brindo un buen camuflaje ante sus amigos, manteniéndose sumergido en sus pensamientos mientras los tres mantenían una alegre conversación.

— ¿Me acompañan a la galería? Ninguno tiene clases hasta más tarde, tengo que buscar la planilla de horas cumplidas para que me den mis créditos extras.

Samuel miro hacia Fargan con algo de malestar por su propuesta, manteniendo para si su negativa cuando Willy tomo su brazos.

— Claro, vamos. De venida podemos comprar algo para merendar en el cafetín — Propuso el ojos rasgados, idea con la que estuvo muy de acuerdo Luzu.

Bueno, estaban en hora de clases generales. La probabilidad de encontrarse con rubio era muy pequeña, solo esperaba que realmente Fargan solo fuera a retirar las notas y no a coquetear con las supervisoras de la exposición.

— ¿Cómo llevas eso de ser compañero de grupo de Raúl?

Luzu observo hacia Fargan un poco descolocado por la pregunta tan repentina, encogiéndose de hombros con desdén.