OtherLife [Rubegetta]

Nivel 1

— Guillermo, para por favor. Estás arrugando mi camisa —.

— Estuve esperándote en la entrada más de una hora. Llevo esperando este momento por más de 2 semanas, así que lo que menos me importa es tu camisa — Tiro del brazo ajeno a lo largo del pasillo, llamando la atención de todos los universitarios que estuviesen fuera sus dormitorios.

— Baja la voz, tío. No tienen que enterarse todos — Gruño hacia el otro, esperando que le soltará ante su reclamo. Solo consiguió una mala mirada en respuesta.

Ambos se detuvieron frente a una de las puertas, el nombre del dueño junto al de su compañero de cuarto podía leerse en una plaquita pegada junto a ella. Guillermo saco la llave de su bolsillo trasero con la mano que no sujetaba el brazo de su acompañante, abriendo la puerta.

— Entra a la habitación, Samuel. No me hagas empujarte —.

— Estás tan ansioso hoy, Guille — Como ordenó, entro a la habitación esperando a que le siguiera detrás. Tomo asiento en una de las camas, sabiendo cuál le pertenecía a Guillermo. Apoyando una mano hacia atrás, dejo caer un poco su cuerpo para mirarle desde allí. — Espero sea tan bueno como presumes. No me gusta perder el tiempo.

Guillermo le dedicó una petulante sonrisa haciendo que sus rasgados ojos se cerrarán casi por completo. Se deshizo del abrigo que llevaba, lanzandolo a una de las sillas de la habitación. Abrió el closet del cual saco una caja de un tamaño considerable, envuelta en papel de regalo. Samuel se reincorporo al ver el tamaño del obsequio que el otro depósito frente a él en el suelo.

— Perder el tiempo es justo lo que harás. Es mi objetivo. Feliz cumpleaños, Sam —.

Su sonrisa se ensanchó hacia su mejor amigo. Con muy poca pasiencia quitó el envoltorio mal colocado de la caja. Por su mente pasaban una infinidad de posibilidades de lo que podría ser, alguna de las cosas que quizás mencionó al peli negro en cualquiera de sus charlas randoms. Jamás habría acertado con el contenido de la caja.

Gafas de realidad virtual.

— ¿Que es esto? —.

— Gafas de VR. Lo dice en la caja, mira — Señaló el título impreso en la tapa.

— Se que son, Willy. ¿Pero para que las necesito? No juego a nada de lo que juegan ustedes. Que pésimo regalo — El disgusto en el rostro de Samuel solo iba creciendo con forme más detallaba el regalo.

— Justamente para eso las necesitas, para jugar con nosotros — Guillermo, o Willy como solían llamarle, se sentó en el suelo frente a la gran caja — Solo estudias y estudias, apenas tienes tiempo para compartir con nosotros. Sabes que no te pediría ir a fiestas que terminarás odiando, pero quizás con esto logres salir de esa asquerosa y fastidiosa rutina que tienes.

— Se le dice estudiar, Willy. Y estoy muy concentrado en mis exámenes finales como para perder mi tiempo en esto —

— Vamos, Sam — Comenzó a parpadear exageradamente hacia su mejor amigo, moviendo un "tierno puchero" hacia el — Solo pruébalas. Si no te gustan, las devolveré y compraré otra cosa para ti ¿Vale?

Las devolvería, de eso no tenía ninguna duda Samuel. Nunca le había llamado la atención ninguna de las aficiones de sus amigos; Ni las fiestas, ni los videojuegos. Todo eso era tiempo desperdiciado que podía invertir en deportes, ejercicio o estudiando. Pero sabía que dichas gafas no eran del todo baratas, Guillermo seguro había estado reuniendo un buen tiempo para obsequiarselas. Y aunque su batalla estaba perdida, sus intenciones eran buenas. Término aceptando su regalo, nunca podía decirle que no a Willy.

— Tienen un mes de garantía, así que hasta entonces puedes tenerlas y si no resulta. Las devolvemos — Llevo una mano hacia su corazón, en señal de promesa.