Una pequeña mentira

26

Sentía mi rostro arder y la vergüenza carcomerme.

Tome aquel cilindro de plástico y lo tire en el primer cajón que encontré.

Esto no podía ser peor.

Me recargue de la pared.

Inhale y exhale para mantener la calma.

Estaba agradecido de que me dieran estás libertades y privacidad pero ¡por dios!

¡Con una charla era suficiente!

Sacudí mi rostro y suspiré.

Me concentre en mi y la situación que tenía en el momento.

Deje salir mis feromonas sin pudor me enrolle entre las sabanas cubriéndome con las almohadas y el edredón.

Me gustaba el calor, me hacía sentir cómodo y seguro..

Gimotee en mi lugar me abrace a mi mismo, ronronee en lo bajo.

Estuve así durante un largo tiempo hasta que pude cerrar mis ojos y dormir.

(...)

Di un gran bostezo removiéndome en mi lugar sintiéndome pesado y exhausto.

Sin moverme mucho trate de buscar mi teléfono, me sentía cómodo y realmente reconfortado..

Hey chicos
¿De que hablan?

Escribí por el chat grupal sin ánimos de leerme todos los mensajes.

Kamibro⚡: Bro!

Mina💖: Kiriiiii~

Jirou🎶: Hey ¿Cómo estás?

Serobro🤙🏻: Vamos a salir la próxima semana, Te apuntas?

Claro ¿Adónde vamos?

Di un bostezo con cierta pereza tenía sueño de nuevo.

Kamibro⚡: Iremos a la casa de Serobro a jugar el nuevo Smash Ultra

¡¿LO CONSIGUIERON?!

Serobro🤙🏻: Yep

Jirou🎶: Creí que tendríamos que ir a la correccional por culpa de Mina y Denks

¿Que?

Serobro🤙🏻: Estos dos @Mina💖 @Kamibro⚡comenzaron a bardear a una niña por que Mina quería el control amarillo pero se lo había arrebatado.

Mina💖: ¿Qué no viste como nos trato?

Jirou🎶: Había otro justo al lado 

Kamibro⚡: Y?

Kamibro⚡: Era tan irritante alguien debía ponerla en su lugar

*Pikachu enojado.jpg*

Ladee una sonrisa divertido por la situación, ya me imaginaba a Mina y Kamibro discutiendo con una niña actuando como Karens.

Sali del chat y me quede mirando mi instagram, promociones, videos, graciosos, noticias de ultimo momento y..

Un jadeo salio de mis labios me retorci en mi lugar y me enrolle mas en las sabanas, podia olfatear mis fermonas, algo que habia comprendido es que cualquier cosa que me emocionara de alguna forma u otra me volvia caprichoso y me hacia soltar bastantes feromonas para que quien sea que estuviera a mi rededor complaciera mi pedido.

Aquello realmente me avergonzaba.

Tan solo imaginar que me ponía así por un trozo de carne que podría simplemente pedir por teléfono.

Gruñí claramente fastidiado.

Según Recovery girl como mínimo esto sucederá hasta que se vuelva rutinario y pueda manejarlo después de todo aun seguía siendo un primerizo con esto de regular mis feromonas y emociones al igual que cualquiera de mis compañeros.

 Cerré mis ojos respire profundamente y trate de enfocarme en hacer aquellos ejercicios de regulación.

Hasta cierto punto me sentía estancado.

Era molesto mentirles a mis amigos y el hecho de que Bakugo sea mi pareja destinada me ponía ansioso.

¿Si acaso y esta interesado en los hombres?

No, eso es lo de menos.

¿Cómo se supone que me comporte a su rededor? 

Bueno, no es como que hayan habido muchos problemas pero..

Cerré mis parpados sintiéndome algo vil.

¿No se sentirá engañado por haberle mentido durante tanto tiempo?

No solo el ¿Qué pensaran los demás de mi?

La puerta principal se escucho.

Sin esperar mucho me levante de la cama y me dirigí a la puerta, la frazada me cubría de pies a cabeza y en cuanto divise a uno de mis padres me coloque en su pecho.

Confundido mi  padre coloco una de sus manos en mi cabeza.

- ¿Eiji que paso bebe? - Mama sobo mi espalda por lo que solo pude hacer un puchero.

- ¿Soy un mal amigo? - Les cuestione en busca de recibir un obvio no de su parte.

- No, no. Claro que no mi amor ¿Por que dices eso? - Cerré mis ojos sintiéndome bastante reconfortado.

- Les he ocultado esto a todos ¿Eso no me hace un mal amigo?

- Eijiro no tienes que contarle cada detalle de tu vida a tus amigos - Respondió mi padre con un tono algo mas duro que el tono dulce y mimoso de mi madre.

Hice puchero.

- Pero-

- Eiji, papa tiene razón, si son tus amigos respetaran tus decisiones

Suspire, tenían razón.. Como siempre.

- Gracias - Murmure tras sacudirme aquellos pensamientos innecesarios.

- Bien entonces vamos a comer - Rei un poco.

Siempre que había algún asunto similar su madre terminaba ofreciendo comida después de todo:

"Pancita llena corazón feliz"