Extra

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Los años habían pasado tan rápido que siquiera lo vieron venir. Ahora, Wang Yibo se encontraba en una esquina tomando fotos a su hijo SiZhui, quién ya se estaba graduando de la secundaria. Xiao Zhan no dejaba de derramar lágrimas de felicidad al ver que su hijo había llegado a graduarse sin ayuda de sus padres. Y es que el muchacho no lo había pedido porque quiso hacer todo por su propia cuenta. Así que ambos estaban orgullosos del menor.

— Oh, bueno, es un honor poder estar aquí, y estoy agradecido con mis maestros, también con mis padres que, si no fuera por ellos no estuviera parado aquí en este lugar, así que todos mis esfuerzos se lo dedico a ellos y a mí pequeño hermano Yue —. Les hizo una reverencia a todos.

— Pero Zhan, ese niño tiene la voz de un adulto, ¿cuántos años tiene ya? —. Preguntaba Song Lan mientras se admiraba del menor.

— Dieciséis, Song Lan, pero por supuesto que tiene esa voz tan varonil, son mis hijos y mi pequeño Yue también tendrá una voz así como su hermano y su padre. No creas que lo hicimos sin amor —. Movió las cejas de arriba abajo.

— Por cierto, A-Qing le llevará un regalo a SiZhui, dijo que iba a llegar directamente a la casa...así que ya estará por salir de clases, ¿os quedarán a la fiesta?.

— Todo depende de SiZhui. No queremos obligarlo a irse a casa o a quedarse aquí en la fiesta —. Hizo un puchero, pero sonrió al ver a su esposo llegar hasta él con la cámara entre sus manos mientras la revisaba —. ¿Lograste tomar muchas fotos, Bo-di?.

— Mmn, ya las mandé a revelar y ponerlas en cuadros. Hay más fotos tuyas pero las suficientes de SiZhui como para colgarlas en casa —. Dijo haciendo caso omiso a la presencia de Song Lan que lo miraba sorprendido.

— Pero...pero se supone que eran las fotos de SiZhui, cariño.

— No podías faltar tú ni Yue, ¿dónde está Yue? —. Dejó de mirar las imágenes y comenzó a mirar a todos lados. Solía ser así con sus hijos cada que no los veía cerca y más con Zhan, y estuvo por buscarlo por todo el lugar si no fue porque lo vio abrazado a la cintura de su hermano y este lo cargaba entre sus brazos.

— Calma, aquí no puede pasarles nada. Mejor vayamos todos a casa. Jie nos está esperando, dijo que ya estaba listo el asado y la reunión por nuestro SiZhui, así que no hagamos esperar a los que ya están ahí —. Se levantó a la par de Song Lan, pues el esposo de éste le había enviado para que pudiera cuidar de sus amigos y de paso ayudaba a la hermana de Zhan con los preparativos.

— ¡Papás, ya estoy aquí! —. SiZhui había llegado hasta los presentes con su hermano colgando de él —. Yue y yo queremos ir a casa, realmente morimos de hambre.

— Sí, mi panza gruñe y escuché que la tía Yanli hizo sopa picante y carne asada. Vamos, vamos, estoy hambriento —. Comentó el menor.

— De tal palo tal astilla.

— Me queda decir lo mismo de Qing, creo que solo sacó la belleza de Chen-ge.

— ¡Cállate, Xiao! Mi hija es una diosa aún con el carácter que lleva.

— A-Qing es muy hermosa, tio Lan. ¿Hoy vendrá a la reunión? —. Preguntó SiZhui que tomaba la mano del menor que no se estaba quieto y saltaba de puntillas.

— Ya estará en camino, así que todos a la camioneta ahora —. Song Lan revisó si las llaves de la camioneta estaban en su bolsillo.

Una vez todos en la camioneta, fueron de camino a la casa que había comprado Yibo para su familia. Aunque era un poco grande para los cuatro, pero estaban cómodos ahí, y más con el gran jardín para que sus hijos pudiesen jugar fútbol o hacer cualquier deporte.

Destiny - YiZhan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora