Remember Me/ Recuérdame +18

<CAPITULO CINCUENTA Y TRES>

El auto se detiene frente a la casa de los Mancini y a mi alrededor veo dos autos, va encerio lo de presentar a alguien? Me bajo de el auto con la ayuda de el chófer debido a los zapatos.

La puerta de la mancion se abre dejándome ver a un mayordomo.

- Buenas Noches- me saluda -Usted es?-

- Emma, Emma Russo- contesto.

- Claro, pase por aquí la están esperando en el living- asiento mientras lo sigo, risas llegan a mis oídos y solo pienso en que esto está demasiado raro y es muy formal la cosa.

Apenas mi presencia se da a notar en el living tdos los Mancini me sonríen y les devuelvo la sonrisa, al contrario de las visitas que tienen solo me miran con superioridad y enojo.

Entre ellos esta una chica la cual se mantiene cerca de Gala, una señora y un señor que parecen los padres y por último un chico.

- Buenas Noches- saludo a tdos

- Buenas noches- contestan los invitados, David se levanta de su lugar y se acerca a mi, deja un beso en mi mejilla y mira a los demás.

- Ella es Emma Russo, la novia de uno de mis hijos- señala a Matteo -Y amiga de los otros-

- Mucho gusto, Soy Alan Calderón- un chico rubio se levanta de su lugar y agarra mi mano mientras deja un beso en mis nudillos.

- Puedes sentarte Emma- dice David al ver que estoy incómoda con lo que hace el chico, miro para todos lados pero no hay asientos y tampoco le pienso quitar el lugar a David, al instante veo como Matteo me extiende su mano y me acerco a el bajo la atenta mirada de todos.

Este agarra mi mano y logra que me siente sobre sus piernas, coloco mi mano en la mejilla de el y dejo un suave beso en sus labios. Todos continúan en su tema de conversación mientras Matteo pasa su mano por mi pierna con cuidado.

Todavía sigo pensando en lo que me acabo de enterar, se que le tendría que contar a Matteo pero prefiero asegurarme bien antes de cometer algún error.

- Bonita?- habla en mi oído y lo volteo a ver ya que quede mirando a la nada.

- Dime?-

- Te están hablando- miro a mi alrededor y tdos me están mirando.

- Si?-

- Asique eres Emma Russo? Oí hablar mucho de ti- dice la chica que nombre anteriormente.

- Seguro que lo que dijeron es una exageración- digo mientras miro a los chicos.

- Es probable, bueno que chica ganó tres premios de el primer lugar en carreras de caballos-

- Cierto, gane cinco- pienso -No veinte, disculpa siempre olvido los que tengo en mi casa- sonrio con suficiencia al ver  que ella me mira enojada, volteo a ver a Matteo y este niega divertido.

- Y por lo visto tampoco es mentira que eres una creída- tanto yo como los Mancini incluida Gala miramos a la chica con una ceja elevada.

- Disculpe?- hablo.

- No has escuchado lo que dicen de ti? Bueno te cuento dicen que eres una creída por que conoces a los Mancini hace unos años y te llevaste tan bien con ellos que hasta te hicieron parte de su familia cosa que nadie logra. Como le haces? Digo algo tendrás que haber echo para que te tengan tanto cariño-

Me mira como si fuera una cualquiera y se a lo que se refiere asique no me quedo callada y contestó:

- Para ser una Mancini de verdad como lo soy yo te hacen falta ovarios, talento, experiencia- el enojo en ella aumenta cada vez más -No tienes nada de eso- susurro con superioridad pero todos me escuchan.

- No te metas con ella mocosa- habla la señora mientras se levanta de su lugar al igual que todos incluida yo.

- Me puedo defender sola mamá- habla la chica.

- Déjenla se está divirtiendo un rato- dice Matteo mientras rodea sus brazos en mi cintura y sonrie victorioso -Fue suficiente Bonita vamos- entrelaza su mano con la mía y salimos de el living.

- Esa es mi novia- vuelve a rodear sus brazos en mi cintura pero esta vez lo hace de frente y aprovecha eso para besarme. Le sigo el beso mientras toca mi trasero y me río entre medio de el beso -Te vez tan sexy con esa ropa-

- Tan romántico tu-

- Lo se cariño- vuelve a besarme pero esta vez apoya mi espalda contra la pared -Bonita, estuviste llorando?- deja su frente apoyada en la mía.

- Hable con mi abuelo- apenas lo nombro la sonrisa se borra de su rostro -Me dijo que se había enterado que no estuve durmiendo en casa de mis padres, me recordó que soy una señorita y una Russo, que no tendría porque estar durmiendo en casa ajena mucho menos si es en la de un hombre-

Veo como la mandíbula de Matteo se tensa pero me sigue escuchando.

- Le explique que ya sabía que era una señorita y una Russo y que solo estaba durmiendo en la casa de mis amigos, eso lo molesto mucho y me dijo que el problema no era si eran mis amigos o no el problema era que ustedes son mis amigos-

- Primero, yo no soy tu amigo y segundo estas a salvo con nosotros o acaso vio que te hicimos algo?- niego con la cabeza.

- Luego le dije que había escuchado eso durante cinco años salir de la boca de mi papá y eso lo molesto aun más ya que le explique que ustedes me hacían feliz pero aun así....-

- Aun así que?-

- Eso no evito que... me golpeara-

- Que hizo que?-

- Solo fue un golpe en la mejilla no fue mucho- agarro sus mejillas y hago que me mire pero se aparta de mi bruscamente -Matteo porfavor, solo fue- no termino de hablar ya que su puño golpea la pared pasando justo por al lado de mi cabeza, cierro los ojos y me agacho asustada.

- Lo...mierda- susurra antes de agacharse conmigo -Lo siento Bonita, no era mi intención asustarte- deja un beso en mi cabeza y me ayuda a levantarme.

- La próxima vez que esos tipos pongan una mano encima de ti juro que los mataré- me rodea con sus brazos y dejo muchos besos en sus labios.

- Mierda Bonito eres tan lindo- muerdo levemente su labio inferior y este suelta un gruñido.

- Hey! No puedes hacer eso-

- Pero tu si?- el asiente mientras me abraza y me río, mi cuerpo queda a su alcance asique aprovecha y lo ataca succionado una parte de mi cuello en en cual claramente acaba de dejar marca.

- Jóvenes la comida esta lista- el mayordomo aparece saliendo de la oscuridad y me asustó.

- Mierda- decimos con Matteo y al instante nos reímos. Avanzamos por los pasillos y me encuentro con Gala.

- Gala- la llamo y este me mira -Oye lamento lo de hace un rato pero-

- Tranquila no podías quedarte callada y mucho menos sabiendo que te estaban "insultando"- la sonrio al saber que no se enojo conmigo, continuamos nuestro camino hacia el comedor donde ya están todos.

Tomamos asiento en los lugares que quedan libres a mi mamá suerte quedo al lado de el chico.

Este me mira y trata de poner su mano en mi pierna pedo las voces de David, Scott y Matteo lo interrumpen.

- Tócala y te quedas sin mano- advierten los tres y su voz tan seria hacen que el chico se aleje de mi. Sonrio por eso.