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Y han pasado poco más de dos meses y nos veíamos cada 1 ó 2 días y casi todos los  fines de semana la pasabamos juntos disfrutando de nuestro trato, cada día me acostumbraba más a él y eso no creo que sea bueno para mi porque creo que mi corazón lo extrañara, más que mi cuerpo

De repente pasó semana y media en que no me contactó y se me hizo raro pero no podía decir nada pues estaba solo para hacerlo felíz ese fue el trato que yo misma impuse y si no me contactó fue por que no me necesitaba, lo veía en el estudio nos saludabamos como siempre y al no tener contacto con él por dos semanas fui preparándome para la posible despedida que ya era más que evidente, en fin me concentré más en el trabajo y coincidía seguido con Cha Eun Woo en la cafetería nos hicimos más cercanos lo que me hacía más llevadera la ausencia de Tae en mis dias, aunque también lo pasaba con mis queridos Sol y Frank que por lo que noté ellos también se habían hecho más cercanos sospechosamente salían más ellos solos pero por mi esta bien a los dos los quiero mucho y solo quiero su felicidad espero la encuentren el uno en el otro; y así pasó casi un mes cuando por fin me llegó el tan esperado mensaje de Tae

Tae - hola muñeca nos podemos ver hoy tengo algo que decirte

Yo - claro que si

Tae - esperame en tu casa si?

Yo - si esta bien, te espero.

Esto no suena bien para mi, pero ya me había hecho a la idea de que él ya no necesita de mi compañía pues algo escuché que los chicos hablaban acerca de Tae y me parece que se trataba de la ex novia que lo abandonó cuando se me ocurrió lo del trato que le ofrecí a Tae, pero esperaré en la noche a ver que es lo que me tiene que decir.

Ya estaba en mi casa llegué a bañarme para relajarme un poco pero no lo logré estaba nerviosa por lo que me tenía que decir Tae, tocaron a la puerta y si era él, que por fin llegó.

Yo - Hola Tae pasa por favor - le deje pasar cerrando la puerta detrás de él - Toma asiento por favor, gustas tomar algo? - dije con una sonrisa para suavizar el ambiente pero creo que no resultó mucho.

Tae - Si tienes un poco de vino tinto estaría bien gracias- dijo con una sonrisa un poco tensa pero yo le serví lo más alegre posible para que no notara mi preocupación

Yo - Toma - le di su copa y este se lo tomó de un solo trago - Bien que querías decirme? - pregunte relajada para que él se sintiera en confianza.

Tae - Zuset... - dijo e hizo una pausa, wow ya tenia mucho que no me llamaba por mi nombre y eso dolió - este.. yo...

Yo - Tranquilo Tae dime lo que tengas que decir sin pena - le dije acariciándole la mano - Dime que es lo que pasa?.

Tae - Zuset he regresado con mi ex novia - por fin lo dijo - Perdón pero...

Yo - Perdón por que? porque no me necesitas más? - dije esto con una sonrisa aligerando su carga - Tranquilo Tae ya había escuchado algo y no tienes porque pedir perdón el trato era "ESTAR PARA TI CUANDO ME NECESITARAS PARA HACERTE FELÍZ" y eso era por el dolor que te causó el abandono de tu novia, así que si ya estás felíz el trato expira porque ya no me necesitas - dije esto alzando mis hombros poniendo una sonrisa y guiñandole un ojo -  Y eso esta bien para mi, si tú estás bien por mi no hay problema - le acaricie la mano nuevamente y este se acercó y me abrazó y pude sentir ese aroma tan suyo y que un tiempo fue tan mío aaaah!! como extrañaba ese aroma y ahora lo extrañaré más, se separó  y este por fin sonrió un poco.

Tae - En verdad lo siento Zuset es que no creí que ella regresaría por mi - dijo con culpa en su voz.

Yo - Ya te dije que estés tranquilo, tú estás bien y yo también así que nada de culpas y sigamos viéndonos con normalidad en el estudio o en donde sea que nos veamos si, y por favor no me evites ok? veamonos con el gusto de ser amigos - dije esto mientras le hice un guiño inclinando mi cabeza y este asintió.

Yo - Tae solo una cosa más.

Tae - Si dime.

Yo - Me dejarías romper la única regla de nuestro trato antes de terminarlo por completo? - dije esperando ansiosa su respuesta.

Tae - Claro  - dijo mientras se me quedaba viendo atento.

Y entonces me acerque y lo besé por fin pude sentir sus labios en los míos y eso fue la gloria, y él aunque un poco sorprendido correspondió mi beso moviendo sus labios al ritmo de los míos que sorprendentemente se acoplaron perfecto a un mismo compás y en ese momento no quería que se fuera y él tampoco me dejaba,  el beso fue subiendo de intensidad nuestras lenguas se encontraron e hicieron el beso más intenso y solo nos separamos para tomar aire unos segundos y nos volvimos a besar tan apasionadamente que este me cargó y me llevó a la habitación sentandome en la cama y él al lado mío jamás había sentido sus labios en los míos y son de lo más delicioso que haya probado, poco a poco fue desabotonando mi blusa acariciando mi pecho de una forma lenta me despojo de esta y después de mi brasier sin dejar de besarnos y yo hice lo mismo con su camisa me fue recostando luego recorrió con sus besos mi cuello se detuvo un poco en mis pechos que besó uno a uno con pasión y a la vez con ternura siguió bajando sus besos hasta mi abdomen mientras deslizaba hacia abajo mi pantalón junto con mi ropa interior hasta quitarlos totalmente al tiempo él también se quitó su pantalón y su bóxer dejándome admirar por última vez su hermosa desnudez mientras se ponía el condón, regresó a mis labios para fundirnos en un beso sin fin que pasó de ser suave y tierno a uno lleno de pasión y fuego, entrelazo sus manos a las mías las subió a la altura de mi cabeza y entonces él entró en mi intimidad de una manera suave como nunca antes lo había hecho y solo se escuchaban suaves gemidos de placer, el delicioso placer que no tenía nada que ver con la locura que anteriormente vivíamos, ahora sentí que me hacía el amor, nuestros cuerpos se fundieron en uno solo y a un solo compás hacíamos el amor y en ningún momento separó sus labios de los míos y esa noche fue que toque el cielo, el mismo cielo que hoy se despedía de mí, sin cambiar de posición así simple pero hermoso llegamos juntos y aún seguiamos con los besos unos besos cortos y tiernos y entre besos le dije gracias por todo y así entre besos tiernos nos quedamos dormidos.

A la mañana siguiente abrí los ojos por la luz que entraba de la ventana, es sábado así que no me apresure pues es día de descanso y aproveche para admirar el bello rostro del hombre que robó mi corazón y al que hoy tenía que decirle adiós, me quedé ahí observando su bello rostro pues quería tatuar esa imagen en mi memoria ya que verlo así en mi cama dormido tan cerquita mío ya no iba a suceder más, acaricie su rostro quitando de su cara un mechón de cabello que se atravesaba en sus ojos y solté un suspiro y este se despertó.

Tae - Buenos días hermosa - me dijo sin abrir los ojos me regaló una sonrisa - Ya es hora de levantarse?- me pregunto con su tierna sonrisa.

Yo - No, hoy no hay hora de levantarse - le dije con voz suave para que siguiera durmiendo y solo siguió durmiendo por poco más de una hora mismo tiempo que me quedé ahí admirando su presencia en mi cama, por fin se despertó y abrió sus ojos para poder verme.

Tae - Buenos días otra vez hermosa - me dedicó una bella sonrisa mientras se estiraba.

Yo - Buenos días bebé - no acostumbraba a decirle muchos apodos pues temía que sintiera que era un compromiso lo nuestro pero hoy es un día especial así que me di permiso de decirle así - Quieres desayunar?

Tae - Si - dijo con una tierna sonrisa.

Yo - Si quieres date un baño en lo que hago el desayuno - dije y me fui a la cocina, después de desayunar se despidió.

Tae - Gracias por todo hermosa - dijo y me abrazó

Yo - Gracias a ti por aceptar las locuras mías - y reí mientras nos separamos del abrazo

Tae - Me tengo que ir - dijo acercándose a la puerta.

Yo - Recuerda que seguimos siendo amigos ok, si me necesitas para lo que sea estaré a la vuelta de la esquina - dije guiñandole un ojo y lo despedí agitando mi mano desde la puerta. Y así se fue de mis noches, de mi cama, de mis brazos...duele mas de lo que había pensado, me metí al cerrar la puerta resbale por esta dejándome caer en el piso y lloré y lloré con todo el dolor que había en mi corazón y tenía que hacerlo pues algo presionaba mi pecho ...aaah! carajo dolía y dolía bastante. Pasaron un par de días en donde el llanto se presentaba cada vez que estaba sola pero cada vez me liberaba mas de este dolor y tenía que ser así pues no eramos nada más que un trato sexual y a nada mas debía aspirar, ya con el corazón menos congestionado y mi mente mas fría pude ser la misma de siempre, bueno casi, pero podía aparentar que estaba bien.

CONTIGO...SIN TIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora