No te vayas » Juan Pablo Isaza (Morat)

29. Dividido

Alex: ¿Guns and roses o Poison?

En el minuto en el que le envío el mensaje, me quiero morir.

¿Qué es ese tanteo de adolescente tan ridículo?

Soy una mujer adulta, por Dios.

Además, él está en un avión en este momento y no me va a responder.

Tienen sus últimos conciertos en Panamá y Ecuador antes de terminar la gira por Latinoamérica, y este último tramo siempre es muy emocionante para ellos.

A una parte de mí le encantaría estar ahí.

Pero estoy tratando de hacer las cosas bien, aunque obviamente estoy fracasando porque nada parece más claro que hace 5 días, cuando le solté la mano en el aeropuerto de Nueva York.

Lo único que sé es que lo extraño.

Vuelvo al trabajo sin esperar su respuesta, porque si yo fuera él, me bloquearía por inmadura.

Isa: Guns and Roses, toda la vida

Alex: No me respondas. Estás poniendo en peligro la seguridad del vuelo

Isa: ¿Está pendiente de mi agenda, Candela?

Alex: Ese es mi trabajo

Isa: Ya no 😉

Isa: El vuelo está retrasado por niebla en la pista. Estoy sentado viendo a Simón armar un cubo de rubik

Alex: Aburrido

Isa: Lo sé. Tengo un montón de trabajo pendiente, pero no quiero hacer nada

Alex: ¿Estás bien?

Isa: Si, solo cansado. Ya me pondré al día en el hotel

Isa: ¿Cómo está usted?

Alex: Mejor. De vuelta al trabajo. Desayunando una tostada con mermelada

Isa: Deprimente

Alex: Si, preferiría unos huevos benedictinos

Se desconecta.

Me quiero morir.

¿Le estoy coqueteando?

No, ¿verdad?

Solo es un halago a sus huevos.

Los benedictinos, quiero decir. ¿Todos sabemos que estoy hablando de eso, cierto?

Voy a huir del país y cambiar de número.

A la mierda.

-----------O----------

Isa: Llamaron nuestro vuelo y salimos corriendo. Acabo de tocar tierra en Quito. ¿Qué tal su desayuno deprimente?

Veo el mensaje horas más tarde, cuando acabo de salir de una junta.

Acabo de cerrar una serie de apariciones televisivas interesantes para Lola Índigo, y tengo que reunirme con Mónica en algún momento para discutir varios asuntos sobre Morat, así que debería estar algo más apurada de lo que estoy.

No sé cómo demonios los fans de 3 Summers dieron con mi correo, y las estúpidas amenazas siguen llegando, así que el área de informática tuvo que reforzar la seguridad de toda la maldita cosa.

Como si ser culpada por la muerte de Jack me ayudara en algo a salir del agujero emocional en el que estoy.

Sin embargo, cuando veo su mensaje, de alguna manera todo el malestar se diluye momentáneamente y me descubro a mí misma sonriendo.