26. ⬛️ Celebridades ⬛️

24.5K 2.4K 3.6K
                                    

➖◽️◼️◽️◼️◽️◼️◽️➖

Oliver

La primavera se empezaba a notar, hoy el cielo estaba muy nublado, como si esas nubes grises fueran unas nubes de agua. Me encanta la lluvia y me encantaría quedarme en mi cama escuchando alguna canción mientras caen esas gotas de lluvia. Pero no puedo por la escuela.

-Buenos días, celebridad.—

Miré a mi derecha a Diego que ya estaba presente en mí día, le tendí el café que le había comprado. Ya se estaba haciendo costumbre esto de tomar café los dos mientras entrábamos al instituto.

-Hoy no son tan buenos días.—

-Lo puedo ver en tu cara, ¿no dormiste bien?.—

-No, ayer trabajé hasta tarde, nos atrasamos un poco con algunas fotos.—— bostecé.

-¿Es esa la razón del por qué tienes dos café  extras?.—

Notó el café extra que llevaba en la bandeja pequeña.

-Es para... Hades, ayer fui muy duro con él.—

-Hay veces en donde es mejor que te digan la verdad en la cara, aunque no le guste, las cosas son así y ya está.—

-Ya pero... tal vez sólo debí ser un poco más considerado...—

-Yo creo que está bien, tiene que reaccionar de una vez por todas.—

-Igualmente quiero disculparme.—

Diego y yo estábamos bien, sé que esto no se le olvida de la noche a la mañana, pero al menos no es nada incómodo, los dos tratamos la manera que no sea incómodo, y vamos bien.

-Hazlo ahora.— me señaló con la mirada hacia donde estaba Hades.

Salía del auto del entrenador, los dos riendo y conversando. Entonces si siguió mi consejo... me alegro mucho que ahora esté bien con su papá. Sonreí para mí mismo. Luego me miró y miré rápido hacia otro lado, tal vez sólo deba esperar y hablar con él en otro momento.

-¿No ibas a ir?.—

-Está con su padre, no quiero molestar.—

-Tú no molestas.— escuché la voz de Hades detrás de mí.

¿Cómo fue que llegó tan rápido?

Diego rió como si algo supiera que yo no, tomó un poco de su café llevando su otra mano a su bolsillo sin despegar la vista de Hades. Me giré para ver al antes mencionado.

-Hola.— dije un poco tímido, no sé por qué estoy tan nervioso, es Hades, siempre he hablado con él, pero hoy es diferente.

-Hola.— me sonrió y sentí mis mejillas arder.

-Te espero en el salón.— dijo Diego antes de irse.

Asentí sin despegar mi vista de Hades.

-Te compré un café.— le dije tendiéndoselo en la mano

-Oh, gracias.— lo agarró y tomó un sorbo .— Delicioso.—

Sonreí.

-Te vi con tu papá... ¿Está todo...?.—

-Está todo bien, todo gracias a ti.— me interrumpió

-Bueno... yo sólo te...—

-Lo siento mucho Oliver, debí escucharte antes y hacerte caso.—

La fama, el fútbol y tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora