A la mañana siguiente Calle me despertó con un beso, y luego otro hasta que abrí los ojos y me vi obligada a volver a la realidad. Golpearon la puerta tres veces y Calle se levantó a regaña dientes recogiendo su ropa, cambiándose con rapidez. La miré mientras se despedía de mí para irse a su rutina con mi madre, pero esta vez me sorprendió la paz y tranquilidad en la que me encontraba. Como si saber que Calle me amaba y me elegía hubiera puesto cada inseguridad fuera de mi mente, cada cosa desordenada que estaba desordenada dentro de mi mente ahora estaba su lugar. Al salir por la puerta me dio una mirada divertida.
Pero no podía postergar más tiempo el hecho de que teníamos o al menos yo tenía que idear un plan, por lo que después de dormir un poco más, me levanté y me vestí para empezar a observar por la ventana posibles salidas. A lo lejos podía divisar una montaña llena de nieve y árboles, así que tendría que haber un bosque en alguna parte cerca de aquí. Intentaba recordar todas las veces que mi madre me llevaba a una habitación para hacerle uno de sus favores. Recordaba que me iba hacia abajo, muy abajo del pequeño edificio donde ella me tenía encadenada. Seguramente ahí es donde Calle va todos los días.
Si pudiera conseguir un mapa de las tuberías del pueblo...
La puerta sonó varias veces y luego se abrió. Entró Jarkov.
—Hola. —Me saludó. Tenía una venda que le cubría la mayor parte de la frente y el oído. Sonreí burlonamente.
—Hola, imbécil. —Le dije. Sus postura cambió a una amenazante.
—Mira, pequeña imbécil. —Me señaló. —Ya tuve suficiente del desprecio de mi gente, una maldita cautiva no va a hacerme sentir inferior. —Lo miré con asco.
—¿Qué quieres? —
—Tu madre me mandó-
—Mi madre siempre te manda. —Lo interrumpí burlonamente. Él ignoró mi comentario.
—Quiere que le hagas otro favor. —Me comentó.
«Esta es tu oportunidad para salir», pensé.
—¿Qué cosa? —
—Quiere que obtengas información de dos cazarecompensas. —Miro hacia abajo.
«De igual forma, me harán hacerlo»
—Bien. —Murmuro. Él parece contento de que accedí fácilmente, como si fuera su mérito. Salimos de la habitación y en la planta baja tomé un abrigo cubriéndome casi todo el cuerpo. Jarkov me guió caminando 4 cuadras más a la derecha de donde nos encontrábamos nosotras. Los soldados que no pertenecían a mi madre lo saludaban y él regresaba el saludo con la vergüenza de tener un vendaje en la cara. Si las cosas funcionaban como en el campamento, seguramente todos, absolutamente todos ya sabrían la causa de esta herida. El pueblo me parecía que estaba en esa transición que tenían algunos, cuando no tiene lo necesario para llamarse ciudad, pero no es lo suficientemente de antaño como para llamarse pueblo. Entonces la nieve comenzó a incrementar, caía con más fuerza y me coloqué la capucha de lana de la chaqueta sobre la cabeza, metí mis manos en los bolsillos y comencé a observar por dónde se ubicaban los guardias. Estaban a cada dos cuadras, había un bote de metal lleno de fogatas, se colocaban al rededor de los botes para poder soportar el frío pero eso los dejaría debilitados porque con esta nieve tan fuerte es difícil distinguir incluso a metros. Si decido ir del otro lado seguro no me podrían ver. —Aquí a la derecha. —Me toca la espalda para guiarme pero me separo con brusquedad. Él me mira con odio y continúa delante de mí, al frente ya podía divisar el edificio que se difuminaba hasta perderse hacia arriba por culpa de la nieve. Antes era un edificio de un periódico y revistas, por lo que entiendo. Tenía unos ocho niveles y no tengo idea de por qué teníamos que ir hacia abajo.

ESTÁS LEYENDO
Don't Lie [Caché]
Fanfiction"'¿No quieres sobrevivir?" "Haré de todo para que nuestras vidas sean más que sólo sobrevivir."