Capítulo 55

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Hola!! Aquí un nuevo capítulo.

Jimin todavía estaba acurrucado en la cama, mirando su teléfono, esperando la llamada que aún no había llegado, la llamada en la que Jungkook le diría que estaba bien. Tiro de la manta, recostando su mejilla contra su rodilla. ¿Dónde podría haber ido Jungkook tan rápido? Yoongi, por otro lado, estaba supuestamente dormido, pero en realidad también estaba esperando noticias de Jungkook. Jimin le había contado todo lo que había pasado y se preguntó también, que había ocurrido después de la llamada.

El adolescente tomó su teléfono, pasando los dedos sobre los botones sin presionar ninguno, pero desesperado por llamar. Pero aún no había alguna llamada hecha, Jimin ahora estaba realmente muriendo, nunca en su vida había esperado desesperadamente tanto por una llamada...

—Hey, ven aquí... —Yoongi dijo con un susurro rompiendo el silencio en la habitación.

Jimin levanto la cabeza algo sorprendido. —Oh, hey, pensé que estabas dormido —Pero hizo lo que su amigo le pidió.

—Bastante difícil hacerlo contigo mordiéndote las uñas de esa manera —Yoongi bromeó en voz baja, sólo consiguiendo una media sonrisa de su mejor amigo—.Sólo relájate Jimin, estoy seguro de que pronto llamarán...

—Suga, han pasado ¡HORAS! ¿Hasta dónde pudo haber llegado Jungkook antes de que lo encontraran? ¿Y si hizo algo estúpido en su ira, o ... —Su voz se apagó. Simplemente dejó caer su cabeza en sus manos para seguir esperando—.Tiene hasta las tres.

—Jimin, no creo que funcione de esa manera —Yoongi dijo abrazándolo con fuerza.

—Entonces ¿De qué manera?

—Sólo porque digas que le das hasta tres no significa que vaya a hacerlo —Yoongi suspiró—.Pero, si no llaman pronto, podríamos ir a la casa de Tae. Podría usar el coche de mi madre. Tienes suerte de que no estén en la ciudad.

—Eso es lo que quiero decir... tiene hasta las tres, sino lo llamare o iremos a buscarlo —Su voz se convirtió en un susurro—.Tiene que llamar a las tres.

—Está bien, Jimin, estoy seguro que... él te llama... ¿ves? —Yoongi detuvo su discurso cuando el celular de Jimin comenzó a sonar—.Te lo dije.

Jimin cogió su celular con un aire de felicidad—.¡Jungkook ! —Frunció el ceño—. Oh, lo siento. No, está bien, en serio. ¿Qué pasa? —Miró a su amigo con ojos tristes. No era Jungkook . Era una llamada de la línea de ayuda.

Yoongi no pudo evitar darle una mirada de lo siento antes de dejarlo para que pudiera responder la llamada correctamente. Ahora recibían llamadas de vez en cuando, las cosas estaban mejorando de alguna manera y la profesora Kim estaba contenta con el trabajo de los chicos. Había un mejor ambiente en la escuela y de alguna manera los estudiantes se llevaban mejor y se preocupaban más por los demás.

La llamada parecía no tener fin y normalmente a Jimin no le importaba pero si esta noche. Cuando colgó, lágrimas comenzaron a caer, recordando cómo era Jungkook cuando intentaba salvarlo. Sin decirle una palabra a su amigo, se puso sus zapatos y un abrigo, dejando la casa.

Su maquillaje estaba corrido por su cara, algunas lágrimas cayendo sobre su camisa, algunas se pierdan en el viento. A pesar de que su visión era borrosa, hizo su camino a la casa de Taehyung. Toco la puerta.

Y toco.

Volvió a tocar, esta vez más fuerte.

Después de unos golpes más, Taehyung ya estaba en la puerta con una expresión de asombro.

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