Dime, si es Real... 《Jace Wayland》

MEMORIAS...

"No nos atrevemos a muchas cosas porque son difìciles, pero son difìciles porque no nos atrevemos a hacerlas..."
-Séneca

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Cassie

Nos encontrábamos sentados sobre la camioneta de Simón matando el tiempo hasta la hora del concierto y Clar no paraba de quejarse de lo mucho que mamá nos sobreprotegía.

—Nuestra madre es tan sobreprotectora últimamente. –dice frustrada.

Yo me encontraba escribiendo en mi libreta cuando siento una mirada en mi, era Clar que de seguro buscaba que le siguiera la charla con sus quejas, opte por ignorarla ya que en realidad mamá solo era haci con ella, a mi me dejaba algo mas a mis aires, seguí escribiendo partituras; letras y dibujos que pasaban por mi cabeza, no tomaba mucha atención a su charla, solo que debes en cuando soltaba un “si” o “aja” para no recibir un golpe departe de Clar por ignorar lo que hablaban, su tema era algo de sobreprotección, comparando a mamá con un personaje y de sacar información, pierdo interés y comienzo a garabatear en mi libreta, sin pensarlo mucho a decir verdad… fue entonces que mientras dibujaba uno de esos símbolos que parecia un ojo todo a mi alrededor cambio, como si de una visión se tratase.

“Me encontraba en un basto cementerio donde hablaba con una niña translucida… un… ¿fantasma? Jugábamos corriendo alrededor de las lapidas… y de un momento a otro estaba sola… y ya no estaba aquella niña si no que se encontraba hombres y mujeres con aspecto aterrador acercándose provocando que corriera, sin ver por donde iba termine tropezando, un quejido salió mis labios, apenas voltee a ver a mis perseguidores mientras se acercaban cada vez mas amenazantemente, asustada cerré los ojos apretándolos muertamente, como si evitando verlos pudiera protegerme.  Fui alzada del suelo y pegue un brinco pero no abrí los ojos me sacudí luchando para que me soltaran pero una suave voz me dijo que ya estaba a salvo, que no me dejaría sola, abro los ojos lentamente y veo un resplandor a lo lejos perderse, escondo mi rostro en su hombro de aquel hombre que me abraza y carga protectoramente me da palmaditas en mi espalda… olía a mente y ligeros rastros de un licor…”

Un dolor tan agudo me atraviesa la cabeza provocando que lleve mis manos a mi cabeza dejando salir un quejido de dolor poco audible, pero sin darme cuenta había dejado caer mi libreta provocando que la atención de los demás se centrara en mi.

—¿te encuentras bien? Que pasa… –dice Simon preocupado al ver que tengo las manos aun en mi cabeza y muy probable una expresión de dolor.

—Am… descuida no es nada, solo un dolor de cabeza que llego sin aviso. –digo burlona —no dormí bien es todo.

—Mentira –dice Clary en tono reprobatorio mirándome. —Volvió a tener pesadillas –dice mirando a Simon —no creas que no lo he notado.

—¿¡Es verdad¡? –dice alarmado y regalo una mirada reprobatoria a Clary.

—si es verdad… pero no tiene ya importancia, tengo despertares abruptos –digo tajantemente mirando a Clary seria para que no dijera nada más. —es hora de irnos. –digo saltando del techo de la camioneta e ignorandolos y adentrándome en la cafetería.

Me encontré un momento con el “joven dueño sexy” de la cafetería… bueno haci le decía yo, ya que era un joven de apenas 24 años se había hecho cargo de aquella cafetería por herencia, y dejaba tocar a varios grupos amateurs. Su nombre era Zack.

—Hola joven buen mozo –digo juguetona y tono coqueto al sentarme frente a la barra y verlo.

—Hola bella dama, ¿lista para regalarme una canción –dice coqueto y burlón.