Lobezno's POV
Vaya unos hijos de puta los del bar: echar a alguien cuando ha sido otro el que ha ido a buscar pelea... hay que ser gilipollas. Pero esa chica, la pelirroja con el mechón blanco... creo que era la misma que estaba entre el público durante el combate.
Era... rara, pero no sabría decir porqué. Tal vez por su pelo, tal vez por su capucha... Quién sabe. Creo que me ha visto las garras cuando estaba en el bar pero aún así no se ha asustado. Eso es bueno, supongo. Está bien que haya gente que no sale corriendo cuando me ve tal y como soy.
Pero hay algo que me sigue comiendo la cabeza: ¿qué le ha pasado al calvo? Ese inútil de Alan siempre se ha estado inmiscuyendo en asuntos ajenos y ya llevaba algunas semanas tocándome los cojones. He de decir que me he quedado muy a gusto dándole de hostias en la jaula, pero no entiendo qué le ha pasado en el bar. Estaba borracho y ha venido a buscar pelea... ¿pero porqué ha perdido el conocimiento de repente? No iba tan bebido como para caer de esa manera. Lo he visto otras veces mucho más borracho y era capaz de incluso acosar a camareras en los pubs, pero hoy no estaba ni la mitad de borracho que esas veces y justo cuando ha intentado atacarme, se ha desmayado.
He visto a esa chica, la de la capucha, hacer algo mientras Alan intentaba atacarme, justo antes de caer. Creo recordar que se ha quitado un guante y le ha tocado el cuello. ¿Pero acaso eso tiene sentido? No creo, supongo que debía ser casualidad, o tal vez le intentase provocar la llave del sueño; he oído que si se toca de la manera correcta a alguien el seno carotídeo, se puede llegar a desmayar a dicha persona. Bueno, no sé ni porqué le estoy dando tantas vueltas a esto: ni siquiera me importa.
Siempre me han resbalado bastante los problemas y gilipolleces de los demás; prefiero ir a lo mío y ignorar en todo lo posible a lo que me rodea. Así se vive mejor...
Pongo la radio y oigo las primeras notas de Enter Sandman de Metallica, una canción algo oscura, pienso, pero de algún modo siempre me he visto reflejado en ella. Subo el volumen.
De repente oigo algo que me hace apagar la radio, creo que ha salido un ruido del remolque. Una persona normal no lo habría oído, pero alguien con sangre de lobo en sus venas tiene un oído mucho más agudizado.
Supongo que se habrá soltado alguna caja y estará golpeando las paredes del remolque, así que paro la furgoneta en la entrada de un bosque para que no obstruya el tráfico, aunque aún no haya visto ningún coche por aquí.
Salgo del vehículo y me dirijo al remolque, esperando encontrar todos mis trastos revueltos. Aquí es donde guardo algunas prendas de ropa, algunos electrodomésticos que no sé ni si funcionan, algo de madera para hacer hogueras... Trastos, vaya; todo lo que no me cabe en la furgoneta.
Cuando levanto la lona que cubre el remolque veo un bulto verde. No se mueve, pero solo me basta con olisquear un segundo para saber que se trata de una persona. Parece que cree que no me voy a dar cuenta de que está allí, así que digo con firmeza:
- ¿Qué coño haces? Sal. Ya.
De repente veo ese bulto estremecerse y unos segundos más tarde veo asomar unos ojos marrones y brillantes envueltos por una capa verde esmeralda y un pelo rojo como el fuego. Hay un pequeño mechón blanco detrás de su oreja.
La chica del bar.
- Sal. -repito otra vez con más agresividad.
Sus labios intentan articular algo pero no le sale la voz. Me mira a los ojos un momento y después se decide a salir. Aparta todas las cajas que tenía encima y da un salto hacia la superficie de la carretera. Se sacude la ropa y se ajusta la capa.
- Lo siento... Necesitaba ir a... -susurra con una voz dulce y cara de disculpa.
- Vete. -digo mientras me dirijo de nuevo al camión.
- ¿Y ahora a donde voy?
- No lo sé.
- ¿No lo sabes o te da igual?
- Las dos cosas.
Subo al camión y arranco el motor.
- ¡Espera! Por favor... ¡Te he salvado! -la oigo gritar.
- ¿Qué?
- Antes... En el bar.
Rio de nuevo por el comentario. Si ella supiera... a mí ya nadie me puede salvar.
Entro en el coche y arranco. Cuando estoy a treinta metros de ella, miro por el retrovisor y la veo mirando a la carretera con la cabeza gacha. Mi puro va prendiendo poco a poco y doy otra calada, llenando de humo toda la furgoneta. Tal vez no debería haberle hablado de esa manera; se la veía muy joven... Joder, tampoco puedo dejarla allí tirada. No llevaba nada encima y estamos ya a kilómetros de cualquier pueblo... mierda.
Paro el coche y abro la puerta del copiloto.
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X-Men: Mi inmortal
FanfictionFanfic romántico y de aventuras entre Lobezno (Logan) y Pícara (Marie). Basado en la saga X-Men de Marvel. · La joven Marie, harta de herir a la gente al entrar en contacto con su piel por culpa de su reciente mutación, huye hasta Loghlein City: u...