Fin del camino

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Me levanto vomitando. Empieza a pasar factura lo de dormir tres días bajo la lluvia. Mi cabeza arde e intento separarme de los demás todo lo que puedo para no ensuciarles. Sigo vomitando diez minutos hasta que no me queda nada más para echar. Me siento fatal. Mierda, y ahora tengo que limpiar esto, pero no puedo ni levantarme.

Deben ser pasadas la medianoche y creo que he despertado a todo el mundo pero nadie dice nada. Decido no moverme. Mañana ya lo limpiaré... O pasado... Cuando me levante. Me duele todo, no veo con claridad. Tiemblo. Mis dientes castañetean y siento un frío inmenso por todo mi cuerpo. Me acurruco aún más lentamente, abulto las mantas que tengo cerca para taparme más pero nada me hace entrar en calor.

¿Dónde estaba hace unos días? Me parece que siempre he vivido aquí, en este suelo. Antes no dormía así. Tenía... ¿Una cama? Antes... Recuerdo una voz áspera que me hablaba, unos ojos oscuros, unas palabras dulces... Logan.

La Escuela X. Parece que hayan pasado siglos desde que me fui. Me he distanciado tanto de todo aquello que se me antoja ahora como un sueño lejano. Parece mentira que pudiese ser tan feliz allí... Y ahora tan miserable.

Debo tener algo de fiebre... Me siento tan mareada...
Los ojos se me cierran sin darme cuenta y caigo por fin en un profundo sueño sin soñar.

Frío. Algo gotea por mi cara. Me hace cerrar los ojos con fuerza. Agua. Intento abrirlos pero solo consigo hacerlo en parte y la luz me ciega. ¿Ya es de día? ¿Por qué me siento tan cansada?

En cuestión de minutos me acostumbro a la luz y veo la figura de una mujer delante de mí. Ahora recuerdo que estoy en el refugio.

La mujer me está bañando la frente con una toalla húmeda. ¿Por qué hace eso? Cuando abro los ojos, se pone en pie y sale de la habitación. Quiero levantarme pero no puedo. Siento mi cuerpo pegado al suelo. Me da vueltas la cabeza. Desde mi posición consigo ver un cuaderno en el suelo... No, es una agenda. Fuerzo la vista. ¿Sábado? Salí de la Mansión X un viernes... ¿Llevo seis días durmiendo?

Miro al suelo. Ya no hay rastro del vómito que dejé antes de dormirme. De repente oigo entrar a la mujer otra vez. Se agacha a mi lado y veo que lleva un plato con sopa. Me tiende una cuchara y la para delante de mis labios. Abro todo lo que puedo la boca y ella vierte el líquido. Sabe a agua en mal estado, pero me ruge el estómago. Aún así me da asco el hecho de comer. Simplemente no puedo. Sigo abriendo la boca cada vez que me acerca la cuchara porque no tengo fuerzas para decirle que no lo haga. A la cuarta cucharada siento nauseas de nuevo y termino vomitando lo poco que tenía en el estómago. La mujer no dice nada, solo se levanta y va a buscar algo para limpiarlo. La miro mientras limpia. Parece extranjera, dudo que hable mi idioma. Siento pena por ella.

Sin saber cómo, me duermo otra vez.

Me despierto cuando ya es de noche, pero desconozco si se trata de la noche de ese día o si han pasado varios días (¿o semanas?) desde que me dormí. De todas maneras el suelo vuelve a estar limpio y esta vez veo que la mujer ha dejado el plato de sopa fría a mi lado por si me entraba hambre. No, claro que no tengo hambre y ahora mismo me da demasiado asco pensar en comida. Intento girarme para no ver el plato pero no puedo moverme. Siento náuseas. Cierro los ojos.

Todo mi cuerpo está entumecido. Me duele la cabeza, el estómago, los pulmones al respirar... Cierro los ojos sin poder hacer nada más y vuelvo a caer rendida al sueño, que es lo único que me queda ahora mismo.

Creo que pasan días y días en los que se repite lo mismo. Me duermo y despierto en otro día con el mismo plato de sopa fría a mi lado. Unos días llueve, otros hace tormenta, otros hace viento. Otras veces me despierto en medio de la noche y no puedo adivinar el tiempo que hace.

X-Men: Mi inmortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora