Primeras pruebas

636 39 12
                                    

El joven me sonríe y agradezco el hecho de que no me dé la mano para saludarme. Siempre me parece grosero tener que decir que no a eso para no poner en peligro su integridad.
Es un chico atractivo, con ojos preciosos y pelo castaño claro. Debe tener uno veinticinco años, pero la barba le hace parecer mayor, como si quisiera parecer más maduro.

Entra a mi habitación con aire de disculpa por interrumpir así, pero no me molesto.

- El Profesor me ha pedido que te haga unas pruebas antes de que vayas al laboratorio, si no te importa... -dice con su voz joven y dulce.

- ¿Y porqué no me las hace allí? - respondo mirando a ambos.

- No te preocupes, son solo unos análisis, pero tenías que estar en ayunas para hacértelos y Xavier quería que fueras a verlo ya desayunada -contesta Tormenta haviendo un amago de giñarme el ojo -Parece ser que te va a retener allí bastante tiempo...

Ambos sonríen, pero Bobby de manera tímida y mirando el suelo.

- Os dejaré solos; de todas maneras solo había venido para acompañar a Bobby; él es el "enfermero" temporal -suelta con su habitual sonrisa giñándome fugazmente un ojo y se retira de la habitación deseándome suerte.

Me quedo sola con Bobby. Ambos nos miramos como conejos en medio de la carretera hasta que parece darse cuenta de que es él quien tiene que reaccionar. Parece salir de su trance y va torpemente hasta la entrada, donde según parece había dejado un maletín. Se acerca con él a mí y reculo inconscientemente hasta que el borde de la cama me frena.

- Tranquila, estoy al corriente de tu mutación. No te voy a tocar.

- Perdona es que...

- Tranquila -dice con aire sincero y una sonrisa sutil. Veo que mira hacia mis brazos y tartamudea:

- Po... Podrías... ¿Quitarte la sudadera, por... favor?

Dudo un instante y entonces me doy cuenta de que llevo una chaqueta de chandal de manga larga que le impide hacerme el análisis.

- Claro, perdona...

Noto cierto rubor en sus mejillas cuando me quito la chaqueta y me quedo un tirantes.

Bobby saca con manos temblorosas una aguja esterilizada del maletín y empieza a unir tubos y demás cosas que no me molesto ni en entender. Al cabo de unos minutos, se coloca unos guantes de plástico y pregunta finalmente:

- Según el Profesor, no debería haber ningún problema si te toco con los guantes, ¿verdad?

- No... No, no debería haberlo.

- De acuerdo... Perdona, ¿te han hecho alguna vez un análisis?

Joder... Pues no, al menos que yo recuerde; aunque sé qué es y que la gente lo explica siempre como algo doloroso, según he oído.

- No -digo finalmente con vergüenza, como sintiéndome una niña.

- No pasa nada, es solo un pinchazo. Tengo que sacarte algo de sangre para que el Profesor haga unas pruebas -Bobby habla mientras me friega un cotón con alcohol desinfectante por mi antebrazo. Aunque parece nervioso, sus manos son ahora firmes y seguras.

- No tiene porqué dolerte, pero sí que es verdad que es una sensación desagradable, no te voy a mentir. De acuerdo, tu no mires y cuando te diga, respira hondo y relájate: te dolerá menos.

- ¿No habíamos quedado con que no dolía? -le rebato entre bromeando y acusándolo.

- Touché.

Sonrío y aparto la mirada del brazo.

- De acuerdo: respira.

Cojo aire y siento un pinchazo que me atraviesa la vena. Me recorre un temblor por todo el cuerpo pero no me muevo.

X-Men: Mi inmortalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora