ADDICTED TO YOU (LUMITY)(THE OWL HOUSE)

Cap 16: Arruinada

Amity

Tan cálido. – Ahora... ¡Quítate la venda! – Hice lo que me pidió y aunque la luz me afecto un poco me asombre. - ¿Te gusta la vista? – Me pregunto con una sonrisa.

Estábamos en un mirador a las afueras de la ciudad, tanto que podía ver el atardecer en su máximo esplendor; el cielo con sus tonalidades rosas y naranjadas, con tantos azules mezclándose y yéndose con las nubes blancas y grises... Era tan hermoso de ver. - ¡Si! – Lo abrase. - ¿Cómo supiste de este lugar? – Estábamos rodeados de solo una carretera y el resto era parte del bosque. – Es tan bonito.

Se veía triste. - Una... Una vieja amiga me lo mostro antes y la vez pasada que vine a divagar, terminé pensando en ti... – Lo mire confundida. – Tus hermanos y padres dijeron que antes te gustaban demasiado los colores, cada uno de ellos. – Trague saliva, era un tema complicado. – Aparte, me he comportado como un completo imbécil estos últimos días... – El miro para abajo con sus ojos carmesí. – Lo siento si a veces soy tan inestable, Amity.

Negué. – Es por lo cual que ambos encajamos tan bien. – No era mentira. – Te amo... – Y todo se oscureció. – En serio lo hago.

Él era todo para mí. – Y yo a ti. – Y sus sonrisas eran lo que me hacía feliz.

Grite. - ¡¿Qué sucede, Mittens?! – Entraron alterados Edric y Emira a mi habitación en menos de 5 minutos, agarre mis mantas con fuerza y apenas sabia como respirar. - ¡¿Estas bien?! – Emira se subió a la cama conmigo y me abrazo, mientras Edric fue a llamar a mamá y papá.

Ella me acaricio el cabello. – Estas bien, estas bien... – Trate de convencerme sobre eso. – Estoy aquí, Amity, estoy aquí para ti, todo estará bien ¿De acuerdo? – Asentí varias veces mientras notaba que cuando me abrazaba más temblaba... Las pesadillas con él volvieron junto con su presencia. - ¿Segura que estarás bien hoy? ¿No puedes solo enviar tus trabajos con Boscha o Luz? – Me pregunto ella mientras me bajaba del auto y Edric asentía desde el copiloto. - ¿Estas bien?

Luz... - Si, estoy bien. – Mentía. – Solo hare cosas importantes y enseguida le llamare a Peter para que venga por mí, lo prometo. – Ellos asintieron aun con duda y sentí sus miradas hasta que pasé la entrada del campus.

Saqué mi móvil y vi de nuevo aquellos mensajes:

- "Si necesitas un lugar donde nadie te moleste y seas feliz con más dulces, puedes contar conmigo, linda"

- "Por los viejos tiempo" – Número desconocido.

Caminé rápidamente a los baños más cercanos y me metí a un cubículo ignorando los saludos o peticiones de cualquiera. – Solo... Con unas dos estaré bien... - Saque el frasco de píldoras de mi bolso una vez que me había sentado en la taza del inodoro sin antes no bajarle la tapa. – Solo con... - Me detuve.

Luz... – Porque... - Su mirada siempre fue tan cariñosa y cálida. – La verdad es que... - Como la de él, en un principio él fue así conmigo, me trataba como si fuera lo más preciado del mundo. - ¿Quién podría querer a una cualquiera como tú? – Y su mirada me horrorizo más con las palabras que salían de su boca. - Oh, vamos ¿En serio creíste que me gustabas? – Si le estaba respondiendo algo, no escuchaba ni mis propias palabras. - Mentira, tras otra mentira y así... - Se encogió de hombros mientras yo quería vomitar. – Yo... Solo... - Está mintiendo ¿Verdad? – Te utilice. – Esta bromeando ¿Verdad? – Solo quería acostarme contigo, ya sabes, la fantasía de acostarse con la chica popular y rica de la escuela. – Y fue en ese momento en el que su rostro, su bello rostro que me regalaba sonrisas lindas y de ahí me decía las cosas más hermosas que jamás había escuchado, el que me miraba como si fuera lo mejor, su bello rostro que me hacía querer comérmela a besos... Se desvaneció.