Red Widow [Peter Parker]

Capítulo 2: Nuevos aires

Las miradas no tardaron en aparecer y los cuestionamientos no tardaron en desaparecer. Solamente habían estado dos días en la casa de Clint Barton y el equipo moría por sacarle cualquier información que pudieran, sobre todo Tony Stark y Steve Rogers, con quienes era la más cercana.

Mientras todos estaban sentados en la nave, Natasha se vendaba las manos para ya estar preparada al momento en que aterrizaran. Es resto la miraban nerviosos, sabían qué hacía falta un comentario fuera de lugar para la sacaran de sus casillas.

El suelo y las paredes estaban bastante limpias, y lo metálico de estos daban una sensación de frialdad. Todos los Vengadores estaban sentados en los asientos, 5 de ellos estaban sentados en l parte de atrás mientras que Steve manejaba y Natasha iba de copiloto. Natasha terminó de colocarse las vendas con rapidez para volver a ponerse sus guantes y volver a poner atención al cielo

—Entonces, Romanoff... —Steve carraspeó. —Tienes una hija.

—Sí.

—¿Y no piensas contarnos nada sobre ella?

—No.

—¿Por qué?

—No creo que sea necesario. — Natasha se estiró. —Si fuera por mí, ni siquiera Clint hubiera sabido.

—¡Auch! —se escuchó la voz de Clint. —Eso dolió, Nat.

—Sabes a que me refiero. —dijo Natasha con una risa.

A pesar de que Steve creía conocer a la mujer que estaba a su lado en esa nave, cada vez que la veía, parecía desconocerla más. Volteó a mirar a Natasha con ojos de preocupación. Sabía que aquello que le habían hecho alucinar la había dejado emocionalmente vulnerable. Era imposible que no se preocupara por ella después todo lo que habían vivido en los últimos años.

—Nat, respeto tu decisión de no contarnos, —Steve volvió a mirar al frente. —pero algo me dice que estás feliz de que al fin supiéramos sobre ella.

—Creeme, Rogers. —interrumpió Clint. —Aquello la estaba carcomiendo por dentro

Natasha suspiró y apretó las manos. Miró sobre su hombro para ver a Thor dormido el hombro de un muy dormido Bruce. Volteó al otro lado y miró a Spiderman dormido sobre el hombro de Tony, quien estaba mirando su celular, pero Natasha sabía que estaba escuchando toda la conversación.

—Solamente hay 3 personas que saben lo que me pasó en la habitación roja. —comenzó ella. —Esas personas son tú, Stark y Clint.

Steve asintió para luego presionar un botón para poner el piloto automático. Lo que parecía estar escuchando le hizo sentir que debía poner toda su atención en Natasha.

—Se por qué están sorprendidos Stark y tú. —carraspeó. —Yo no debería de poder tener hijos, ¿Verdad?

Tony Interrumpió mientras se cruzaba de brazos. —No soy doctor, pero una histerectomía significa no embarazos.

—Es porque yo no tuve a Elizabeth, ellos la crearon. —su voz comenzó a quebrarse. —No la sostuve hasta dos semanas después de que naciera, supongo, y fue porque me escabullí una noche para ver de qué mierda se trataba ese proyecto secreto. —Natasha inhaló aire para calmarse. Tenía 16 años, no podía ser mamá, pero al momento de verla súper que ella merecía algo mejor que lo que yo tenía. —Miró a Clint. —Años después mandaron a Clint a asesinarme, él me ofreció una salida, y la tomé sin tener que pensarlo.

Steve y Tony se miraron para luego mirar a Natasha.

—¿Para que querrían crear bebés? —preguntó Tony.