|Regálame esta vida| Christopher Vélez

Capítulo 29

Mi sonrisa era especial para él, al fin había sido honesta con él y conmigo misma, y si bien sentía un gran cariño y aprecio por Ian, la realidad es que lo que Christopher estaba despertando en mí es completamente diferente a lo que alguna vez llegué a imaginar que sentiría por alguien, algo que Ian no pudo despertar en mí a pesar de que llegué a sentir algo más por él.

- Ya se fueron mis dudas Chris, aunque la verdad me gustaría mucho que no nos precipitemos, tenemos mucho tiempo juntos aún - Dije.
- Tranquila mi muñeca barbie, iremos tan lento como tú quieras - Aseguró.

Reí ligeramente y me animé a besar nuevamente sus labios.

- No dejes que Greta se acerque a ti, y cualquier cosa que ocurra me lo dices, ¿De acuerdo? -.
- ¿La vas a correr? - Pregunté.
- No te preocupes, solo debe entender que en los sentimientos de las personas no puede mandar -.

Yo solo asentí, tampoco quería que esa chica tuviera más problemas porque Christopher enojado en verdad da miedo.

- De acuerdo Chris - Acepte.

(...)

El tiempo pasaba y con ello la primer función, los animales habían regresado para comer y descansar un poco antes de que la siguiente función fuera dada, eso iba a ocurrir en aproximadamente una hora, los trapecistas y domadores también habían ido a descansar, así que por lo menos ahora no corría el riesgo de encontrarme con Greta.

- Angelito, ¿Estás bien? - Preguntó Ian.

Se acercó corriendo hacia mí mientras me miraba preocupado.

- Ian, estoy bien, ¿Por qué lo preguntas? - Lo miré extrañada.
- Greta nos contó lo que pasó, ¿En verdad te golpeó? - Inquirió.

Ay no, ¿Ahora qué cosas había ido a decir esa chica?

- ¿Puedo saber qué les dijo exactamente? - Inquirí.

Él asintió.

- Dijo que te pidió amablemente que te alejaras de Christopher porque ellos se aman pero que tú te negaste y le dijiste que no ibas a descansar hasta quitárselo porque él era para ti, según sus palabras no pudo contener el enojo y te dió una cachetada por la que al final se disculpó, pero que llegó Christopher y te defendió y la amenazó con correrla si se vuelve a acercar a ti - Me hizo saber.

Mi cabeza estaba a punto de explotar, ¿De dónde sacaba tantas mentiras esa chica? En verdad tenía todo un mundo inventado.

- Supongo que creyeron lo que dijo - Mencioné.
- Bueno todos los demás sí, pero a mí me quedó claro que tú no eres así y por eso vine a verte - Explicó.
- Mira Ian, es verdad que me pidió alejarme de Christopher pero no amablemente, me culpó de muchas cosas y solo le dije que yo no era culpable de nada, fue entonces que enloqueció y me golpeó, pero no se disculpó, Christopher me defendió porque sabe que si mi papá se entera puede armar un lío, Greta no quería alejarse y por eso mencionó lo del despido, pero no creo que Christopher haga algo como eso - Le conté.
- Vaya, que bien finge esa chica, no esperé que su versión fuera tan retorcida - Confesó.
- Tal vez no la conocen lo suficiente como para saber que miente, pero la verdad prefiero no tener nada que ver con ella, no quiero más problemas - Dije sincera.
- Al menos tienes la certeza de que Christopher no va a creerle porque vió todo, no podrá ser un ogro contigo -.

Yo asentí.

- Solo me mantendré alejada de ella, es lo mejor -.
- Tienes razón, y cuídate mucho, si necesitas algo no dudes en que puedes confiar en mí - Aseguró.
- Muchas gracias Ian, es un lindo gesto de tu parte -.
- Solo quiero que estés bien angelito - Dijo mientras acariciaba mi mejilla.
- ¿No vas a descansar Ian? - Preguntó Christopher a nuestras espaldas después de carraspear la garganta.

Ian quitó la mano de mi mejilla y ambos volteamos a verlo.

- Sí claro, pero antes necesitaba hablar con ___ - Respondió - Te veo más tarde - Mencionó en mi dirección para finalmente regalarme una sonrisa e irse.
- ¿Solo quiero que estés bien angelito? - Preguntó imitando de mala manera la voz de Ian - ¿En qué momento se apareció aquí? -.

Christopher celoso se miraba bastante guapo, los gestos que su rostro hacían, la forma en la que sus cejas se arquean sin duda te hacen querer mirarlo por mucho tiempo, aunque puedo entender que el sentimiento no es nada bonito.

- Solo vino a saber si necesitaba ayuda con algo - Expliqué.
- ¿Y qué ayuda podría darte si no sabe nada de los animales? - Cuestionó obvio.
- Supongo que solo quería ser amable, relájate Chris - Dije.
- Es que la manera en la que te mira, la forma en la que estaba acariciando tu rostro, no puedo verlo y no sentir nada - Mencionó.

Me acerque un poco más a él de manera que pude colocar mi mano en su barbilla para poder acariciarla.

- Chris, está bien, Ian es mi amigo y supongo que debo dejarle claro ese punto, no tienes que ponerte así cada que está conmigo, casi lo corres con la mirada -.
- Es que no puedo evitarlo, puedo entender bien qué siente cada que te ve o te tiene cerca -.

Yo sonreí y me puse de puntitas para poder besar sus labios cortamente.

- Pero no sabes lo que yo siento cada que te veo o te tengo cerca, es muy distinto a lo que siento incluso si Ian imita tus acciones, así que eso debería bastarte para saber que nerviosa me pones solo tú - Dije sincera.

En verdad agradecía no tener que sentir lo mismo que Chris, tal vez no podría soportar los celos si supiera que sigue queriendo a Greta.

- ¿Cómo le haces para ser tan linda y convencerme de todo? Es en serio cuando te digo que Bill y yo sentimos la misma tranquilidad cuando nos hablas o estás cerca - Dijo.
- ¿Me has oído hablar con Bill? - Pregunté avergonzada.
- La verdad es que solo un par de veces, pero entendí que ese es tu momento con Bill, y aunque también me pongo celoso, sé respetarlo y aceptarlo -.