Episode 23

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La boda de mi prima fue hermosa, estuvo llena de sentimientos y me hizo soñar despierta con el día en el que mi amado me tome de la mano y se luzca conmigo y todos mis defectos. Que me ame de pies a cabeza sin importar nada y me lleve cada noche si es posible al cielo, aunque otros días me guie por el infierno. No busco perfección en la vida, pero sí amor sincero y del más bueno.

En la boda de Amelia recibí el ramo viniendo de sus propias manos, ahora que, estoy en medio de la turba de mujeres de mi familia, por más que digo que ojalá no me caiga a mí, el ramo parece tener un destino fijo en mis manos. Pareciera que yo fuera la mitad de un imán y el ramo la otra parte, y este está en busca de hacer conexión conmigo a como dé lugar.

El ramo de flores blancas y amarillas dio en mi cabeza y, seguidamente, golpeó el pastizal. Aunque todas me miraron, pensando que lo tomaría en mis manos, al ver que no me moví ni un solo centímetro de mi lugar, se abalanzaron sobre mí diciendo un sinfín de cosas sobre el "gringo" y nuestra futura boda. Si ellas supieran lo ridícula que me veo haciéndome ilusiones en la cabeza, tendrían un poco de consideración conmigo. Pero como nadie sabe lo que he cargado desde hace un tiempo, me uno a las bromas para pasar menos vergüenza. 

—¿Quieres bailar? — me susurró Colin al oído, interrumpiendo mi conversación con mi madre. 

—Claro, estaba esperando que mi caballero se dignara a llevarme a la pista. 

—No voy a hacerte esperar más tiempo, mi bella doncella — me tomó de la mano y me guio hacia el medio de la pista.

Me rodeó con sus brazos la cintura y yo rodeé su cuello, acercándonos y sintiéndonos un poco más, como si con solo el roce de nuestros cuerpos no fuera lo suficientemente cerca. Descansé la mejilla sobre su pecho, escuchando los latidos fuertes y acelerados de su corazón. ¿Estará tan agitado por mí? Porque si él llegara a poner su oído en mi pecho, se daría cuenta lo mucho que me afecta tenerlo así de cerca; sintiéndolo un poco más en mí. 

Me dio una vuelta entre sus brazos y me volvió a asegurar entre ellos, sonriendo e intercalando la mirada entre mis ojos y mis labios. Los suyos se están convirtiendo en una tormenta donde una parte de mí quiere salir herida. Quiero volver a probar sus labios, degustar ese sabor a deseo y ansiedad que desprenden cada que hacen contacto con los míos. Quiero comérmelo por completo, sin importar que el resultado sea desastroso al final; quiero creer que vale la pena bajar las defensas, pues sé que colin no es hombre de estar entre los brazos de cualquier mujer, pero el temor a salir perdedora me sostiene fuerte y no me deja avanzar.   

—Muero por besarte — confesó sin dejar de ver mis ojos. 

—¿Qué te detiene?

—Tu familia, no quiero que se hagan una idea equivocada de mí.

—Ah, si es por ellos, no te preocupes. Creen que entre los dos hay algo. 

—¿Y no lo hay? — atacó, borrando poco a poco su sonrisa—. Creo que esto va más allá de una amistad, ¿no?

—¿Por un par de besos? No lo creo, bizcocho — le resté importancia—. A los amigos se les da besos constantemente. 

—¿Besas a Amelia en la boca?

Solté una fuerte carcajada, escondiendo el rostro en su pecho y siguiendo el ritmo de la canción que sea que esté sonando de fondo. 

—No, pero si ella me dejara, lo haría sin pensarlo dos veces. Tiene labios bonitos. 

—¿Cómo? — se oyó sorprendido. 

Reí de nuevo, acercando su boca a la mía de un solo halón que le di. Su expresión pasó de ser confusa a diversión en un solo segundo. Esos ojos tan grises y brillantes me siguen cautivando. No sé por qué me tiene tan enamorada este hombre. 

Colin (Bilogía King II)(En Físico)[✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora