Different Worlds. Sesshome (Finalizada)

Impotencia.

Si pudieras pedir un deseo, ¿Cuál sería? Seguramente ser feliz o tener riqueza o incluso alguna cosa cliché, pero para las personas enamoradas lo único que los haría feliz es encontrar una buena persona que los haga felices sin importar los problemas o los obstáculos o al menos eso es lo que Kagome había deseado cuando se enamoró de Sessshomaru.
La batalla seguía, sin embargó, en la barrera que Lady Kagome había hecho estaba consumiendo gran parte de su poder y sus fuerzas se agotaban, pero ella no se rendiría fácilmente ni por mucho que su cuerpo se lo pidiera porque aún que sue cuerpo estuviera recostado ella mantenía la barrera activada, pues habían personas que debía proteger para que no salieran lastimadas incluyendo a su familia, Kagome con una sonrisa débil miraba como aquel Sessshomaru y su yo peleaban en conjunto contra Haiden quien resultaba herido de vez en cuando recordándole las veces que ella y su amado Lord pelearon por proteger a sus hijos o quien sea de la aldea ella sabía que ambos también estaban enamorados aún, pero el orgullo y las malas decisiones fue lo que los separó hasta ahora, ella quería ayudarlos, quería que disfrutarán de la verdadera felicidad, pero tampoco quería arrebatarle a sus padre a las tres princesas que había conocido.

- Lo siento - susurró derramando lágrimas.

En la batalla Haiden se tenzo más de lo habitual, pues el sentía como la vida de la sacerdotisa que amaba estaba reduciéndose a nada y por mucho que tuviera a la otra Kagome no sé comparaba a la que el conoció.

- ¡Maldición, dejan de estorbar de una vez! - exclamó furioso.

Sin embargó, Haiden no era el único que sabía que la vida de la sacerdotisa estaba corriendo peligro, si no que también aquel Sesshomaru que combatía con fuerza para poder ayudarla y a lo lejos el Lord lo sentía.

- ¡¡Maldición!! - gritó - ¡¡Kagome!! -

Dolor, confusión, impotencia y más emociones corrían por todo el cuerpo de Lord, pues su compañera de vida estaba en riesgo y el no podía hacer nada para protegerla, se maldecia una y mil veces, pues solo había aceptado el título de Lord por ella, por Nao y por su luna y ahora la cosa más importante para el estaba por apagarse para siempre.
En la entrada de la aldea Inuyasha también lo sintió, sintió como su amiga y hermana estaba perdiendo su vida que los gritos desesperantes por apurarse y ayudarle no se hicieron esperar, todos los que lo miraban no sabían su comportamiento extraño solo Ryu y Miroku sabían lo que estaba pasando que también empezaron a eliminar a más y más Yōkais para poder ayudar a Kagome.

- No te atrevas a morir, Kagome -

Con Jian las cosas no eran tan diferentes, pues también lo podía sentir que una vez despierta Hanae quiso ir a ayudarla, sin embargó, la detuvo volviendo la a dormir porque sabía que ella no podía hacer nada en su estado actual y menos él, pero mantenía un poco de esperanzas al saber que ahora Nao iba a ayudar solo esperaba que no fuera tarde para la gran Sacerdotisa Kagome.
Fuera de la barrera Kirinmaru golpeaba constantemente la barrera para poder sacar a Kagome de ahí, pero tú con todo su poder podía agrietar la barrera.

- ¡Maldición! - exclamó cansado.

- Kirinmaru-sama, debemos romper la barrera Kagomesita puede morir - decía alterado.

- Lo sé, pero es imposible esta barrera está creada para que nadie entre ni salga de ella - dijo serio - Esto es como un arma suicida para ella estando embarazada -

Shippo no sabía si sentir terror al respecto o ponerse a llorar, pues toda esa situación lo estaba poniendo demasiado nervioso al punto de recordarle cuando el era un joven niño.

- Kagomesita - susurró.

Sin embargó, cuando nuevamente Kirinmaru quiso hacer otro ataque vio como Haiden descontrolado por la irá de estar siendo tenido tamaba una apariencia casi inusual para DaiYōkais cómo ellos, pues Haiden estaba transformándose en su verdadera forma lleno de irá.
Kirinmaru sorprendido reaccionó prototo y golpeando l barrera con sus puños gritaba y gritaba desesperado que salieran de ahí, sin embargó, era imposible.

- Maldición, maldición - decía tomándose los cabellos con desesperación.

- ¿Qué sucede Kirinmaru-sama? - pregunto Shippo sin entender lo que pasaba.

- Hace años cuando Haiden, Inū Nō Taishō y yo eramos cercanos todos prometimos jamás tomar nuestra verdadera forma sin tener un motivo importante del cual dependa la vida de alguien - respondía serio - Claro que el primero en a ver tomado su forma fue Inū Nō Taishō, pero fue para salvar a Izayoi e Inuyasha, pero Haiden no tiene a alguien en especial para hacerlo a manos que... -

- El está enamorado de miadre -

Ambos se sorprendieron y miraron hacia atrás llevándose la gran sorpresa de ver a Nao con las perlas arcoiris alrededor de el.

- Pero no pienso dejar que la toque -