—Te toca en media hora— Escuché, despertandome de golpe, viendo que estaba en el auto de mi manager. — ¿Tengo que entrar y hacer todo en media hora? — Pregunté aún somnoliento, asintiendo con tranquilidad, corriendo en contraparte yo.Llegué al camerino, pero era el único allí, además de con un buen dolor en la pierna, obligándome a sentarme.
— ¿Dónde están todos? — Pregunté, viendo la ausencia de las maquilladoras. —Deberían estar llegando… — Miró la puerta, entrando un montón de gente de golpe, pareciendo ser que era tradición desde que llegué a JYP que todo fuera a último momento.
Inmediatamente empezaron a maquillarme.
—Oh, tengo meses que no te veía— Pasó una interesada Jeongyeon. —He estado muy ocupado… — Sonreí nerviosamente. —Creo que ustedes lo saben, todos en JYP— Aclaré, mostrándome realmente tímido por primera vez.
—He oído mucho, has estado trabajando demasiado— Se sentó a mi lado. — ¿Está mejor tú pierna? — Preguntó, siendo de las pocas personas probablemente en saber la razón del desgarre y casi muerte por aquello.
—Puedo correr como un viejo medio sano— Aclaré, riéndose ella un poco. —Deberías habernos enviado una copia de tu álbum, es un poco exasperante esperar tanto— Sacó.
—Lo olvidé… — Volteé, incluso interrumpiendo lo de la maquilladora. —Sana solo logró mostrarnos tu segundo promocional— Reveló, dejándome con la curiosidad de quién se la había enviado.
—El lado bueno es que será sorpresa para ustedes— Señalé. Vi por el espejo como asintió.
— ¿No te has quitado ese anillo? — Tomó mi mano al darse cuenta de ello. —Es de oro, el único material de metal que nunca me hace dar sarpullidos— Dije como si nada.
—Además, es muy lindo— Señalé, siendo la realidad. —Es como mi nuevo amuleto de la suerte, todo me ha estado saliendo bien desde que lo tengo— Sin contar el hecho de casi morir a manos, o mejor dicho, piernas de Jihyo, lo era.
—Le tienes mucho aprecio… — Deshizo suave y lentamente su agarre.
— ¿Y las demás? — Pregunté. —Están en el otro camerino, pasaba por aquí buscando comida— Señaló. —Si la encuentras me lo dices, me estoy muriendo del hambre— Indiqué, asintiendo ella.
Más pronto que tarde terminó mi presentación, sintiéndome liberado, además de haciendo una coreografía tan sencilla como la de las canciones de niños.
Bajé las escaleras, con un poco de ayuda de mi manager, sentándome en el primer sitio que vi, descansando un poco. —Jeongyeon te envío esto— Me tiró una bolsa, atajandola en el aire.
Siendo bocadillos bajos en calorías. Tiempo no me sobró para empezar a comer como animal.
En medio de uno de los tantos mordiscos, las nueve llegaron donde estaba, tapando mi boca ante la comida que tenía.
—No pensé que las vería a todas— Dije con más nervios que cualquier cosa.
ESTÁS LEYENDO
Aureum - Jihyo & Tú.
FanfictionNo todo lo que brilla siempre es oro... aveces suele ser incluso mejor.