Aureum - Jihyo & Tú.

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— ¡¿Cómo es posible que se te filtrara un EP entero?! — Regañó la jefa de publicación de JYP.

—No se filtró— Corregí, quitandole toda importancia. Ganándome una mirada de película.

— ¡Hay cinco canciones tuyas rondando por allí! — Me señaló, queriendo hacer énfasis en la supuesta gravedad. —No se filtraron porque las publiqué yo desde una cuenta anónima— Finalmente corregí.

Del estrés, terminó sentándose. —Ya no soy el mismo niño al que puedas criticarle cada decisión— Me levanté. —Desde hace mucho era tu superior por algo, lo sigo siendo y lo seguiré hasta que te jubiles o vayas de esta empresa— Finalmente tomé la botella de agua y mi celular, yéndome de allí.

El día había estado movido últimamente, sobretodo la noche pasada cuando por andar haciendo mis cosas de respaldos publiqué las canciones por error y olvidé ponerles contraseña.

De todos modos había sido un tiro por la culata, mi indiferencia hacia algo que claramente era mio solo elevaba más el misticismo, esas canciones no tendrían videoclips, probablemente alguna que otra presentación siendo muy generoso.

Al fin y al cabo eran canciones para dos, en algunos casos, para alguien únicamente.

Ya que me habían citado mucho antes de mi bloque de productor con Jihyo, era un alma en pena por la empresa.

Empecé a ir por los departamentos creativos de la empresa, viendo un par de pequeños estudios, por suerte, un poco abandonado por ser un fin de semana y además, muy temprano.

Quizá una medio hora después, había logrado mover un piano por todo ese departamento, finalmente colocandolo en un empapelado blanco, tomando una de las cámaras, al igual que una laptop de la empresa, configurando un par de cosas, dejando aquello grabando indefinidamente.

Finalmente, tomé asiento en el banquillo, suspirando y empezando a tocar las primeras dos notas, empezando a cantar inmediatamente.

—Hemos estado conduciendo por tanto... ya no recuerdo ni como llegamos a este punto— Aquella canción seguía grabada en mi como cualquiera de mis promocionales.

—No se como estamos vivos siquiera... — Pese a la cámara, estaba haciendo de todo menos actuar.

—Estoy huyendo de nuestros orgullos, hasta que incendiaste incluso mi atmósfera— Pese al ángulo de la cámara, solo podía verse todo blanco, el piano y yo, pero tenía una vista hacia el mismisimo río Han, evadiendo mucho de quedarme con los ojos cerrados o ver a la nada.

—Ya no hay manera de perseguir ese atardecer... — Pese a todo, aún la canción no me llegaba al punto crítico.

—Estoy tan al este llegué al oeste— Respiraba cada que podía, no era la composición más agradable con los silencios como solía hacerlo.

—Me siento en el borde de este mundo... — Seguía recordando un poco el mal momento de cuando se escribió.

—Todo se va a sentir mejor cuando despiertes... lo juro por dios— Iba haciendo pasadas entre las teclas del piano, cerrar los ojos para recordar mejor la melodía y ver hacia adelante.

—Lo arreglaré, esto es más que una fase, todas las estrellas fugaces se destruyen— Finalmente la canción subía un poco, acostándome hasta lo último de mis pulmones.

—Quizá deba irme, todo está mejor sin mi— Me estaba sorprendiendo por manejar tan bien mi aire y temple.

—Cuando miro hacia atrás, casi te escucho decir... — Finalmente el final del dulce principio había terminado.

—Quédate, no me dejes por favor... — Mi voz tenía que cambiar, pero el simple hecho de recordar aquello ya hacía que se quebrase un poco.

—Este es el lugar donde tienes que estar— Ahora era más una batalla para no llorar y rehacer todo.

— ¿Por qué tus palabras tenian que significar tanto para mi? — Quizá no estaba controlando demasiado bien todo.

— ¿Por qué ya no significan nada? — Quizá así tenia que ir todo.

—Quédate, no es como lo estas escuchando... — Llorar ya no debería de estar prohibido.

—Te he estado viendo cambiar... — Ya había perdido el índice sobre qué debía sentir en ese punto.

— ¿Quién dijo que eras una en un millón? — Pregunté, siendo el mástil del mensaje, siendo muy obvio el quiebre en mi voz, quizá disimulando las lagrimas en cámara.

—De todos modos... — En mi mente solo era una danza de colores referenciados por emociones, manchando el blanco y luego uno encima del otro.

—Tú visión de túnel solo te está controlando, solo ves lo que quieres ver— La canción amainó un poco, disimulando mejor que no podía llegar a notas tan altas.

—No puedes ver lo que realmente está mal aquí... — Un color se alzaba más ante los demás.

—Tal ves quieras hablar de tu salida de esto, pero no hay plan b en tu sistema, solo dime lo que piensas... — Ahora más que colores, empezaba a recordar los momentos que yo mismo cree por la necesidad de pensar en ella.

—Tengo miedo de que caigas... — Fallé un tanto en alzar a esas notas, pero no es como que necesitara hacerlo a la perfección.

—Pero no lo harás... estarás mejor que yo... — Por primera vez en la canción, podía respirar.

—Te sentirás mejor cuando despiertes, quitándote el maquillaje— El aire volvía a acobijar mi cuerpo.

—El sol siempre pareció quitarnos nuestros miedos, siempre brillaba en algún lado— Por desgracia, no había escrito, o descrito más que la montaña rusa que había sido mi vida en ese último año.

—Solo tengo que llegar a allí, contigo... — Nuevamente empezaba a subir, volviendo a invadirme de aquellos colores con tanta importancia.

—No importa si estás a medio mundo de aquí... — Solo tenía que mantener un poco más el ritmo.

Tenía que repetir una pequeña parte más.

— ¿Quién dijo que eras una en un millón? — Pregunté finalmente.

—Eres mucho mejor que eso... — Respondí.

Lo demás de la canción fué un pedazo mínimo, yéndome al cambiar de formato la canción.

Desahogandome en la propia canción y fuera de esta un par de minutos también.

Definitivamente este es el principio del fin.

No quería cambiar demasiadas cosas de la canción por ser una muy importante para mi, pero algunas cosas si las tuve que cambiar.

La canción es, Wake Up de EDEN. Cualquiera que lo conozca un poco sabrá que todas las canciones próximas son de el.