—Nunca te había visto tan quieto y silencioso en un estudio— Pasó de repente mi hermana, sentándose a mi lado.—Quería hacer algo, pero supongo que sigo sin odiar a Jihyo— Me abrí.
—Quizá yo te ayude, nos podremos llevar como nos llevamos, pero si alguien te hace daño, instintivamente la voy a odiar— Empezó a pensar, poniéndose cómoda.
—Recuerda bien cómo te hizo sentir aquel día… — Cerré los ojos para meterme más en su historia. —Probablemente haya odiado el verte con Eunbi— Empezó fuerte. —Aunque solo haya venido a trabajar, hazle creer que Eunbi es mucho mejor que ella, pensará que te hizo tanto daño que buscaste a una igual que ella— Era buena para generar odio, pese a ser hermanos.
— ¿Necesitas más? — Paró. —No, con eso más que suficiente— Dije, teniendo una idea muy clara. —Ella te pidió hacer una canción un poco más latina, ¿No? — Preguntó, asintiendo yo.
—Haz un ritmo sucio para bailar, así quizá le duela más— Opinó, siendo mucho más del ritmo latino que yo.
Asentí, siendo una muy buena idea.
—Muestrame los resultados, yo seré tu mentora en esto de herir personas, eres demasiado bueno como para tener maestría en esto— Salió del estudio, dándome miedo una vez más.
Cómo por suerte el ritmo que me propuso era el más fácil del mundo, en diez segundos ya tenía la percusión de la canción entera.
Tomé reciclado unos cuantos acordes de otros proyectos y ya solo tenía que escribir, o más bien, improvisar con algo de odio.
—No fué suficientemente bueno para mí— Empecé la canción.
—No te va a funcionar con nadie, nadie me puede igualar— Seguí.
—Debería saber cómo llevar esto, solo tengo que dejarme llevar por su ritmo—
—Ella solo tiene que empujarme en el sofá—
—Ya tuve suficientes discusiones—
—Si me amaste antes, lo siento—
—Eres inolvidable, un muy buen momento nunca hiere demasiado a nadie—
Luego de quizá media hora de más arreglos y relleno, terminé aquella canción, pero aún tenía ganas de más, aunque en coreano, en su lengua nativa.
Aunque seguía en aquella encrucijada, no podía odiarla y la vez tampoco olvidar ni lo bueno ni lo malo.
Quizá una canción directamente contraria a la anterior la podría confundir para hacerla pensar que es para alguien más.
Una vez que en vez de enfocarme en un odio que aún no sentía, la producción entera de una canción nueva se hizo mucho más fácil.
—Llena mi aliento caliente— Empecé con la siguiente canción, costandome un poco por el coreano.
—Despierta todos tus instintos para dormir, caliéntame— Era mucho más fácil solo sacar los buenos recuerdos aunque fueran pocos.
—Quiero enamorarme aún más de ti, por eso me acerco a ti— Ahora quizá me estaba apoyando más de sueños que una realidad. —Sé qué tipo de momento será este… — Soñar despierto ayudaba un poco.
—Tú y yo estamos tan cerca que podemos tocarnos… — Allí marcaría el estribillo, siguiendo ritmo con frases cortas.
—Tienes toda la noche para decírmelo, lo quieres— Hablaba por ambos aunque realmente aquellos eran mis deseos.
—Quiero conocerte a través de esta oscuridad tan profunda— Ahora pasaba las referencias de las canciones.
—Acercate más a mí, no me importa si me hiere— Seguí.
Repetí un poco por el bien de la canción.
—Nuestras miradas chocan— Finalmente había llegado a otra parte de la estructura.
—Abre más la brecha— Una casi muerte nunca había sonado tan bien en una canción.
— ¿Por qué simplemente no puedes divertirte conmigo? — Finalmente solté una de mis preguntas más grandes hacia ella.
Añadí unas pequeñas frases más hasta llegar a otra sección. —Estoy intoxicado por la atmósfera ahora cada vez más espesa— Finalmente aquello era de lo último por nuevo en la canción, lo demás se resumiría en pequeñas frases que rimen y una última potente.
La primera canción es Unforgettable de French Montana y Swae Lee, la segunda es Who U Are de Kang Daniel, y si, ya paro con las canciones de Kang Daniel, es que me cuadraban muy bien algunas.
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Aureum - Jihyo & Tú.
FanfictionNo todo lo que brilla siempre es oro... aveces suele ser incluso mejor.