— ¿Solo tengo que estar dos semanas con la agenda apretada? — Pregunté, abrochandome el cinturón. Escuché una confirmación. —No me importa lo que digan los inversores ni la compañía, haré una pausa de seis meses enteros, luego volveré con un álbum y todo eso— Aclaré, mirándome raro ella antes de arrancar.— ¿Te cuesta mucho aún? — Cuestionó, mirando mi cuerpo. —No, solo no quiero estar cerca de Jihyo— Volteé a ver la ventana, sin quererla ver a ella.
—Deberías de estar más agradecido con ella, ya te salvó la vida dos veces— Encendió el motor. —No dije que no lo esté, me enamoré dos veces, ese es el problema— Especifiqué.
— ¿Tan enamoradizo eres? — Escuché en tono de broma. —Me conoces desde hace casi un año— Volteé a verla. — ¿Cuantas veces me he enamorado? — Le pregunté más serio, pensadolo ella. —Me corrijo, ¿Tan fácil te enamoras de Jihyo? — Se corrigió. Asentí.
—Me parece hasta gracioso que Lily me aconsejó salir con Haewon, y en una publicidad de una estación de autobuses estaba ella y le dije algo sobre de qué me enamoraría de ella en vez— Suspiré. —A veces me da miedo el cómo va esta historia— Volví a mirar la ventana.
—Si tanto te gusta— Giró el volante hacia mi, además de ser el camino. — ¿Por qué no lo intentas? — Preguntó luego, enderezando.
—Porque tengo miedo de arruinarlo— Respondí algo triste. — ¿Arruinarlo? — Escuché de ella. —Pero si te cuida como a una de las miembros, que lo haga con hombres es prácticamente imposible— Aclaró, sin saber lo que pasó aquel día de mi casi desangre.
—Te diría cobarde, pero eres muy tonto, desvergonzado y hasta impulsivo, así que no se que te detiene— No sabía si aquello era un insulto o una incitación.
— ¿Tú no deberías de recomendarme no salir? — La miré, intentado que evitara el tema. —Desde que me di cuenta que aunque tengas veinte, sigues teniendo las hormonas de un adolescente, ni lo he intentado, por suerte eres inteligente— Cambió su opinión.
—Eres mi jefe, ya lo dejaste claro recién nos conocimos, y por encima de ti, te tengo otra vez de jefe porque compraste la compañía— Parecía despreocupada en sus palabras.
— ¿Soy inteligente o soy estúpido? — Cuestioné ante aquellos cambios. —Ambas, eres un prodigio aprendiendo, eres un genio en los negocios, y eres el más tonto y peor en el amor— Enlistó, sintiendo tanto alagado como insultado.
—No te despido porque además de que puedes darme datos de Twice, aunque me insultes me haces sentir bien— Saqué. —Espero que sigamos trabajando unos cuantos años más— Respondió.
—Si digamos que, en un hipotético caso— Propuse. —Llego a intentar algo con Jihyo, ¿Algún consejo? — Pregunté, queriendo actuar de poco interesado.
Me miró con una cara de risa, pero sin llegar a reírse. —Puedes ser más directo, se que lo quieres hacer, siendo sinceros podemos progresar más rápido— Volvió a volante, pero con un tono muy burlesco.
— ¿Tú vienes de una ciudad costera no? — Preguntó, recordando algo de mi presentación ante ella. Asentí. —Le gusta mucho la playa, surfear también— Explicó. —Pero yo no sé surfear— La miré algo triste. —Lily tampoco sabía, aunque estábamos cerca de una playa en Australia nunca aprendí— Suspiré.
—Eso es incluso mejor, algo que ella ama es enseñar más que el que le enseñen— Aclaró, dándome más esperanzas. —Con el dinero que tienes, puedes rentar una playa en algún sitio por este lado del mundo, así no los siguen y pueden tener seguridad también— Dió una idea.
—Aunque si no quieres viajar ni salir, como el asocial que eres, también le gustan los dramas, podrías invitarla a ver el próximo en el que actúes— Siguió, recordándome el porqué le pagaba tanto.
—En general— Sostuvo el volante con una mano, haciendo un gesto raro pero indicativo sobre mi. —Solo se tu mismo, por alguna razón, le gusta eso— Una vez más, me sentía ofendido pero con algo bueno detrás.
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Aureum - Jihyo & Tú.
FanfictionNo todo lo que brilla siempre es oro... aveces suele ser incluso mejor.