Aureum - Jihyo & Tú.

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— ¿No hay nadie cuidándote? — Preguntó recién abrí la puerta, negando. —Mi manager dijo que vendrías, así que no me esforcé en buscar a nadie más— Me moví a un lado, dejándola pasar. —Solo necesito ayuda para cocinar a lo mucho— Cerré, ayudándome de mi pierna más que un solo brazo.

—Es más grande de lo que pensé… — Dió una vuelta, observando todo. —Pensé que el espacio me ayudaría a colgar lo de los discos, pero eran tantos que quedaba saturado— Señalé, mirando ella a los dos de diamante colgados. —Los demás los tengo en cajas, luego buscaré una forma de tenerlos bonitos sin ocupar tanto espacio— Expresé.

Luego volteó, viendo la colección de vinos que tenía. —Me regalaron tantos que ya no podía meterlos en el refrigerador— Reí nerviosamente. —Para mí son más trofeos esos porque me los dieron ustedes que todos esos discos— Reí más tranquilamente.

Pese a todo lo que había pasado entre nosotros cuando estuvimos solos, todo parecía mas tranquilo, la inquietud e incomodidad desapareció a los minutos.

— ¿Eso qué es? — Preguntó al ver el nuevo proyector pegado a la pared en una mesa. — ¿Recuerdas que soy el loco de los proyectores? — Pregunté, haciéndola pensar un poco, asintiendo a medias. —Ese es uno— Señalé, encendiendolo desde mi celular. Viendo ella como algo tan simple para mí era complicado para ella.

— ¿Quieres ver algo? — Le pregunté por cortesía, una vez más, dejándola pensativa. — ¿Vista ya está serie? — Empezó a buscar en su celular. Segundos después mostrándome una que tenía muchas ganas de ver.

Negué, a la vez recordando que había hablado de ella con Chaeyoung. —No había tenido tiempo, entre mi otra compañía y mi álbum— Empecé a buscarla.

En algún momento de mi tardada búsqueda, noté como Jihyo empezó a jugar con mi cabello. —El negro de tus raíces es lindo— Indicó, notando muy bien la diferencia entre el marrón casi negro y mis raíces negras naturales.

—Extraño un poco cuando era todo negro natural la verdad— Terminó por arreglar la parte delantera de mi cabello y sentarse de lado, viéndome mientras buscaba aquello, tardandome más a propósito, haciendo creer que era malo usando mi celular con una mano.

—Creo que me lo teñiré de algún color loco está vez— Respondí, sin voltear a verla. —Quizá azúl o rosa— Propuse. —Quizá rosa, estás muy blanco por no salir casi, te quedaría bien— Opinó ella. —Podrían hacer fotos montajes de ambos, tú ya lo tuviste rosa— Finalmente la volteé a ver, sonriendo yo y viendo cómo perdió su compostura levemente en ese momento.

Finalmente puse el anime, con los correspondientes subtítulos al coreano y yo entendiendolo sin más en japonés.