Aureum - Jihyo & Tú.

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—Entiendo, entonces han tenido muchos problemas porque ella aún no entiende que necesitas espacio personal… — Me paré a pensar en cómo era ella. —Es cierto, es una molestia cuando está cerca, aunque no del mal sentido— Empecé a dar vueltas en la silla.

—Cuando siento que todo está bien solo lo arruino… — Soltó, haciéndome parar y verla. —Eso es una buena frase para la canción— La señalé.

—También lo de antes, lo de que «quiere todo de mi pero no puedo dar tanto» — Señalé otra frase. —Eres buena componiendo— Empecé a escribir en una nota en la computadora.

—Pero si solo te estoy contando mi vida… — Me miró raro. —Tu vida es interesante como canción, la mía no— Respondí.

— ¿Qué podría poner yo en una canción sobre Jihyo? — Solté retoricamente. — ¿Qué casi me mata en plena recuperación aunque prácticamente no estaba sintiendo dolor por lo que me hacía? — Seguí, recordando que eso probablemente no lo sabía ella.

—Dime que no sabías sobre eso— La miré fijamente. —No le cuentes tantas cosas a tu hermana— Sentenció. —No creo que la persona que vaya a revelar mis secretos sucios seas tú al menos— Suspiré.

—Sígueme contando tu vida, hay que hacer la canción— Cambié de tema.

—Siempre le advertí de lo difícil que es amar a alguien como yo— Divagó un poco. —Es algo que yo también le he dicho— Respondí instintivamente. Ambos nos miramos luego de eso. —Mi hermana si que es estúpida… — Dije yo.

—Ella realmente es estúpida… — Suspiró ella al mismo tiempo. Volviéndonos a mirar.

—Definitivamente conocemos bien a la misma persona— Me volví a dar vuelta y escribí la frase de lo amar y ser difícil.

—Lo que me dijiste sobre que solo yo puedo salvarnos es una buena línea también— Pensó ella, aunque luego de procesarlo no tenía tanto sentido. —Ni la magia podría arreglarlo si no soy yo— Aclaré, a lo que ella me señaló. — ¿Lo de la magia o lo de arreglarlo yo? — Pregunté.

— ¡La magia! — Señaló contenta con esa frase. —Es una buena— Asentí, poniéndola.

— ¿Cómo empezó su relación? — Pregunté directamente luego de un rato de ella solo ir hablando.

—Es un poco la misma vieja historia— Respondió, haciendo que escribiera eso. —Ella se fué volviendo famosa por ti y el escándalo estúpido aquella vez y de casualidad nos vimos en una fiesta— dejó caer su cabeza en donde estaba apoyada.

—Ella no quiso ver los problemas que yo tenía y yo endulcé tanto el principio que hice sentir todo como un cielo pero nunca he sido una santa— Iba diciendo con toda la sinceridad posible y yo solo podía ir escribiendo a niveles nunca alcanzados antes de la mecanografía de mi ser.

—Creo que simplemente no pensamos que íbamos a llegar a una relación y solo nos dejamos llevar por todas esas sensaciones y yo quise evitarle todo el dolor de esto— Siguió.

—Es curioso como está pasando todo esto ahora, usualmente soy más egoísta, me entrego por completo hasta que sale mal, luego ya no lo quiero y me voy— Parecía estar en piloto automático sobre sus cosas.

—Creo que he estado madurando, sabía de todo eso y tenía que mejorarlo, no lo intentaba hasta que llegó ella— Suspiró.

—Algo que ella me dijo un par de veces cuando ni la una ni la otra quería terminar de dejarse llevar era algo sobre «No se juega con fuego en la oscuridad» — Aquello me recordó a justo el momento en el que de pequeños en navidad incendiamos un sitio abandonado por no ver y llevar un encendedor como linterna.

Si bien me dió risa el que usara el regaño de nuestra madre como una frase profunda en una relación, tenía todo el sentido.

—Yo solamente le dije que protegiera bien su corazón si iba a seguir con todo aquello— Finalmente se enderezó.

Y yo tenía la letra perfecta para la canción perfecta.