Capítulo 17: Tachones.
Esto definitivamente era incómodo.
Trevor se encontraba caminando entre Hayes y yo, quienes andábamos de brazos cruzados. Sí, nos habíamos vuelto a pelear. Él conmigo por su bipolaridad, y yo con él porque justamente no soportaba lo idiota que se volvía. Los dos mirábamos a lados opuestos con cara de pocos amigos. El pobre Trevor, por su parte, nos miraba de mí a Hayes, aunque al llegar a este apartaba la mirada con rapidez. No es aconsejable cruzarte con los ojos helados de Hayes cuando está cabreado.-Y, está empezando a refrescar, ¿no?-Comentó Trevor en un intento de relajar la tensión.
Los dos hicimos caso omiso y suspiramos. Trev titubeó un poco pero acabó rindiéndose. Miré fugazmente a Hayes, pero él pareció notarlo y por una milésima de segundo tuvimos contacto visual. Volvimos a nuestras posición refunfuñantes.
-¿Esta puerta no se abre, Trevor?-Recalqué el nombre del chico.
Él sabía a lo que estaba jugando, igual que Hayes. Negó por un momento y se acercó para comprobar que la puerta no cedía. Me miró serio, como regañándome por lo que estaba haciendo. Siempre se a dicho que en la guerra y el amor todo vale, aunque no sabía calificar que era lo que estábamos peleando. Supongo que el orgullo, si. En el orgullo y la guerra todo vale. Así suena mejor.
-Debemos mirar arriba, estos pasillos están más que vistos.-Exclamó Hayes a nadie en especial y se dio la vuelta para encaminarse otra vez al vestíbulo.
Trevor y yo le seguimos sin mediar palabra. Todo era bastante incómodo en estos momentos, pero a la vez me daba gracia. Era ese sentimiento de diversión que te provocaba hacer rabiar a tu amigo, o lo que fuera Hayes para mí.
-Benjamin.-Le llamé con una sonrisa cínica.
Él se volvió indispuesto y clavó sus ojos en mí. Parecía sorprendido de que yo le hablara.
-¿Qué?-Intentó ser frío, pero se notaba su tono vacilante.
Las comisuras de los labios se me agrandaron. Agarré el brazo de Trevor y me abracé a este recostando mi cabeza en su hombro. Hayes cerró los labios y se le marcó la barbilla.
-Estás muy guapo.-Solté con voz melosa.
Eso le hizo desfigurarse completamente. Casi pude escuchar el chirrido de sus dientes blanquecinos al sonreír de manera forzada.
Continuamos caminando hasta llegar al vestíbulo, donde nos detuvimos delante de la gran escalera que separa gran parte del salón.-Yo voy delante.-Dijo Hayes adelantándose.
Los escalones crujían ruidosamente a cada paso que dábamos. Daba la impresión de que en cualquier momento la escalera cedería y todos nosotros caeríamos al vacío. En el segundo piso habían menos cuarto, unos cinco en total. Los cuadros con flores en los lienzos estaban esparcidos por todo el empapelado verdoso de las paredes. Me acordé de las películas de miedo de los internados y me estremecí.
-Hey.-Oí a Trevor.-Esto está abierto.
Hayes y yo le miramos. Él estaba parado con una mano en el pomo de una puerta que tenía una ventanita con el cristal derruido. Me acerqué y soplé el pequeño letrero que había sobre el cristal.
-"Sala de profesores".-Leí con lentitud.
Por primera vez nos miramos entre los tres y asentimos. Otra nube de polvo nos saltó a la cara al entrar al cuarto. Escondí mi cabeza en la chaqueta mientras tosía para intentar no ahogarme. Alguno de los dos me dio palmaditas en la espalda para ayudarme, aunque no supe quien era. Me costó entornar la vista al quitarme la chaqueta de la cara por el cambio de claridad.
En este cuarto no había ventanas ni iluminación a parte de la de las linternas de nuestros móviles. La sensación lúgubre me revolvía el estomago y el pensamiento de que alguna vez hubo gente aquí me provocaba dolor de cabeza. Sentía como si estuviéramos ignorando la historia del lugar, que solo nos estuviéramos centrando en encontrar algo interesante de lo que fardar. Estábamos siendo completamente superficiales.

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FanfictionGabriella estaba de vuelta en su país, pero no precisamente en su estado natal ni en su casa. Ahora vivía en un internado en las entrañas de un bosque en Carolina del Norte. Su vida allí nunca se torna monótona, ya que desde un principio convive con...