➡️Cap.48🔙

302 65 84
                                    

Enteramente poblados los pasillos de la facultad, sin ningún lugar donde poder resguardarme del desmadre que significa haberme declarado homosexual frente a todo el puto mundo universitario.

Y mientras el teñido tatuado que recibió de mí gloria solo miró hacia otro lado, quedándose a las risas con esa maldita gringa prendida de su brazo, yo quedé completamente expuesto y destrozado.

¿Es qué acaso no puede salirme una, si todo estaba más que encaminado? ¡Qué carajos!

Risas y burlas se suceden mientras varios me señalan, situación que me deja un sabor amargo pero que a la misma vez provoca que no tenga más ganas de correr. Solo me sale quedar tirado en el medio del pasillo, a la espera de que se abra la tierra y me transporte hacia algún otro lado... Lugar donde pueda ser "yo" sin tener que resguardarme de los acusadores dedos de los otros.

"¡Maldito Jungkook! Solo debías decirme que no te pasaba lo mismo y ahí todo acababa", pienso dentro mío. ¡No era necesario usar mi cuerpo como lo has hecho! Para luego desechar lo que no sirve como un trapo viejo...

Maldita vida y malditos idiotas que no saben una mierda...

Pero a medida que suceden los minutos, la burlona risa aumenta y mis fuerzas para mandarlos a todos a la mismísima mierda, cae como picada.

No quiero llorar delante de ellos, no se merecen ninguna de mis putas lágrimas... Pero todo me supera y encontrarme tan solitario, sin que nadie se preocupe de mi estado, termina siendo una mierda...

"¿B-bebé?" Resuena como un maldito recuerdo de cuando fui feliz con ello y no puedo contener ni un segundo más mis desastrosos lamentos.

Su tacto, su agraciado tacto me ha dejado de lado y de repente todo me supera. Y solo puede ahogarme en un copioso llanto.

Te extraño tanto pero tanto, que me hace daño tu desaire de tal manera, que no puedo creer el haberme equivocado tanto.

Te amo... te amo tanto que lamentablemente, me lastima. ¿Por qué permito que tú me hagas daño?

"¿Amor?" Una fuerte sacudida y todo se me viene abajo... ¿Será que estoy muriendo por amar sin ningún maldito reparo?

Abro mis ojos repentinamente al sentirme frío y empapado, mi cuerpo completamente agitado al lado de un JungKook que me observa como si hubiera visto al mismísimo diablo.

—¿Pero qué carajos? —suelto a medida que me toco, dándome cuenta que el frío no es ni más ni menos que agua sobre todo mi condenado rostro.

—Te juro bebé, que te sacudí varias veces cuando te sentí quejarte a mi lado. Pero cuando comenzaste a llorar y sufrir a lo desgraciado, me diste un susto de muerte. Lo siento, pero dicen que no se puede exaltar a alguien que está teniendo pesadillas.

—¿Y tirarme agua era lo menos dramático?

—Era eso o una cachetada, ahora dime amor ¿qué mierda soñabas? ¿Estás bien?

Dice mientras me toca y quedo tildado ante su nombramiento, importando una mierda el condenado mal sueño o el tener mis partes heladas por el hilo de agua que corrió hasta mis pelotas... Solo quiero que me llame una y otra vez así... así de una buena vez me la creo. Qué soy "eso", realmente para él.

—Repítelo de nuevo —anuncio en un casi suplicio, juntando mis manos y con mis ojos brillando en una intensa mirada.

Entonces, me mira como confundido, dudando si estoy bien o quizás delirando.

—¿Lo de la pesadilla? —cuestiona torciendo su cara en un precioso gesto que me enamora. Y sin poder contenerme más, me arrastro sobre su cuerpo envolviéndolo entre mis brazos.

—Ya fue, yo sé que no te llega el agua al tanque así que solo abrázame bien fuerte, ¿quieres?

—¡Ah bueno! Yo preocupado y tú, diciéndome eso ¿acaso no tendrás fiebre?

Dice colocando su mano sobre mi frente y solo atino a abrazarlo más fuerte soltando en un largo suspiro:

—Solo a tí, te necesito...

Dejándolo escapar porque quema en mis entrañas después de haberlo llorado tanto... Maldito sueño del infierno. Pareciera que mi condenada cabeza rebusca que vuelva a terapia para no sentirme tan poco, incapaz de amar y que me amen como tanto quiero.

—¿Bebé? ¿En serio estás bien?

Acuna mis cabellos mientras me regala sentidas caricias sobre mi espalda. Su genuina preocupación disipa -en gran parte- la angustia que quedó contenida en mi pecho al tenerlo tan vívido riendo de mí, en el fatídico sueño.

—Ahora sí, solo fue una puta pesadilla y una mala jugada de mi condenado cerebro —vomito las palabras como desahogando una a una mis penas en la fortaleza de su agraciado torso.

—Tal vez, ¿malos recuerdos? —pregunta acomodando mis cabellos sobre la parte posterior de mi oreja —. Dime lo que sea amor... por favor, déjame ayudarte...

—Ahí está, de nuevo, cuatro letras de un todo para mí —le anuncio.

—¿Pero en qué idioma me estás hablando bebé? Si es una especie de acertijo, te digo que soy malísimo —dice elevando mi rostro con sus dos manos y quedando a escasos centímetros nuestros labios del otro.

Entonces, me besa... Me besa tan pero tan suave, que siento flotar mi cabeza entre nube de algodones mientras mi cuerpo se acopla a su calor y nuestras respiraciones comienzan una misma sintonía... Sintonía donde cada nota se combina con el compás del otro y dónde armar la más hermosa melodía parece ser cosa de locos...

¡Enamorado como un loco me declaro! Y que alguien se haga cargo, porque de cuerdo tengo poco.

—Bebé —suelta entre dulces besos —me gustas tanto, pero tanto, que no soporto verte sufrir... Solo... Solo dime si hay algo malo sucediendo entre nosotros, porque te juro que yo no lo siento o no me doy cuenta por estar tan...

Me acerco yo -esta vez- a su cálida boca. Y absorbiendo de su exquisito sabor de "se siente como en casa" le confieso: —No haces nada malo, solo fueron malos recuerdos que armó mi cabeza con el ahora, haciéndome sentir usado y abandonado... Es que a veces no me lo creo, estar viviendo ésto que estoy viviendo. Lo siento, por ser tan tarado.

—No te atrevas a decir eso, nunca digas eso. Has pasado demasiado y en gran parte es por mi culpa. Y sé que no sirve de nada lo que te diga porque nada hará que se borren esos malos recuerdos, pero escúchame bien bebé, ahora eres mi tesoro más preciado; mi joya en bruto recién descubierta y el hombre del que estoy perdidamente enamorado.

Lo miro con ambos ojos bien abiertos, tratando de contener todo lo que en este momento siento reventar desde mis adentros.

—Si Jimin, me tienes obnubilado y esto que siento por ti, nunca lo sentí antes por nadie. Así que sí, estoy enamorado y te amo... Capaz en este momento, mi sentimiento no es tannn grande como todo lo que tú guardas por dentro, pero estoy seguro que con el pasar del tiempo, estaremos empatados.

































Haw maldita seaaaa!! Por qué es tan hermoso este par?🥺

Que sueño de mier...😑

Ojala todos pudiéramos sentirnos, aunque sea una puta vez en la vida, así de enamorados y ser correspondidos de esta manera.😍

Gracias por pasarte, comentar, votar y por la paciencia en las actualizaciones, no me busquen porque los mando a la mie😑😬🤣

Los amito mucho♥️

"Si Pudiera ser ella"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora