III

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<¡De ninguna manera! ¡Debiste decirme ayer en la noche!>

Sunghoon suspiró golpeando su frente contra la mesa. 

–Si ayer hubiera sabido que me quedaría sin comer yo mismo hubiera preparado algo, ¿no crees?– se quejó al teléfono, había llamado a Wonyoung con la esperanza de que ella le llevase algo para almorzar. Escuchó el quejido de la menor a través del teléfono. 

<De todas formas, ¿por qué no tienes para comer? En la mañana me dijiste que me llevarías por un postre en la noche>

Y había tenido la intención de llevarla, pero cierto gatito iba a quedarse sin comer todo un día, así que prefirió alimentar a un adolescente en desarrollo que a sí mismo y a los caprichos de su mejor amiga. 

–Yo… te llevaré el fin de semana, ¿está bien? Pero ¿en serio no puedes traerme algo? Lo que sea, ¡compartamos tu almuerzo! Tu mamá siempre pone mucha comida– Wonyoung suspiró al otro lado de la línea. 

<No tengo almuerzo, Hoon, Mamá salió a prisas hoy… Yujin me invitó a almorzar>

Perdió su última esperanza, se frotó el rostro y ambos soltaron un suspiro al mismo tiempo. 

–Bien… Hoy no comeré, te veo en la tarde–

<¡Veré si puedo convencer a Yujin de llevarte algo! Pero hasta la tarde, sobrevive un poco>

Y colgó. Se dejó caer sobre la mesa pensando en qué ni muerta Yujin compraría algo para él, ni siquiera si la bonita Wonyo se lo pedía. Miró la hora en su teléfono y tomó su mochila para revisar los apuntes para su siguiente clase. 

–¡Hyung!– ni siquiera levantó la mirada, solo espero a que Jake llegara y se sentara  junto a él, lo cual el menor hizo empujándolo un poco. 

–¿Qué haces aquí? Tú odias estudiar en las bancas– Sunghoon soltó un sonido para indicarle que escuchaba, pero no contestó, se dispuso a terminar de leer sus notas antes de ver cómo Jake sacaba un paquete de galletas. Tomó una sin permiso, a lo que su menor sólo rio. 

–¿Aún tienes hambre?– Sunghoon elevó una ceja. 

–¿A qué te refieres? Ni siquiera almorcé– Jake le miró confundido. 

–Cuando fui a comprar las galletas a la cafetería había una orden para ti… incluso pensé que ibas a invitarnos algo– Sunghoon lo pensó un minuto hasta que recordó al adolescente en desarrollo al que le había dado 13,000 wons y permiso para pedir "lo que quisiera"; palideció al pensar en el aumento en su cuenta de la cafetería. 

"Es un niño, debe comer, debe estar sano, ¿cierto?" 

–¿Qué tanto fue?– Jake hizo un puchero recordando. 

–La señora tuvo que hacer la cuenta con calculadora, así que no tengo idea– 

"Ah, los adolescentes deben comer mucho"

Actualice porque quiero y porque puedo, ¡me gusta mucho este fanfic! ¡Es muy lindo escribirlo y quiero publicar todo lo que tengo! Pero me contendre lo mejor que pueda para publicar cada dos días... o cada día, no importa.

Quienes lean esto, gracias, los amo, espero que les guste leerlo tanto como a mi me gusta escribirlo, hasta luego. Bye!

Kitten [Sungki/Hoonki]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora