Revelaciones 3/3

85 5 0
                                    


- ¿Qué es el "eclipse"?.- pregunto Tonks con interés.

- Eso lo explicare yo.- respondió Cygnus con voz sombría, miro a sus padres del futuro quienes asintieron en apoyo.- Pero antes tienen que saber la leyenda sobre nuestra familia, abuela.- Eleonor lo miró.- Tu sabes mejor que nadie esa historia, no por nada la hemos escuchado desde pequeños por ti.- y le sonrió con ternura y cariño, él amaba a su abuela como a nadie, al igual que a su abuela Cissy. Eleonor le regreso la misma sonrisa con tanto cariño y asintió.

- Claro cariño, yo la contaré.

- ¿Qué tiene que ver una leyenda de tu familia con eso del "eclipse"?.- pregunto Charlie pues él era el mejor amigo y protector de su hija, así que obviamente le interesaba todo acerca de él y su familia.

- Tiene todo que ver.- respondió AdharaF con voz helada.- Mamá empieza con la historia.- Eleonor que estaba de pie junto con su esposo, asintió hacia su hija.

- Esta historia muchos la conocen como "Hijos de la Luna".- todos en el gran comedor jadearon de sorpresa, pues esa era una historia que a todo niño mago o bruja se le contaba antes de dormir, así que muchos conocían esa historia.

- Es imposible.- dijo Molly Weasley, estaba pálida y su labio temblaba.

- La historia cuenta que hace muchas generaciones, un descendiente de una familia mágica muy poderosa y antigua, se casó con una bruja muy hermosa, contaban que sus ojos eran de un azul electrizante, decían que la hermosura de la mujer era tan hechizante para cualquier ser sobre la tierra, que la mirara. La mujer poseía magia muy poderosa, ya que provenía de una familia antigua también. Ellos eran muy felices, se amaban, pero su felicidad era opacada al saber que la mujer no podía concebir. Ellos hicieron de todo, probaron con todo tipo de magia, posiciones, conjuros antiguos y nada. Una noche la mujer estaba tan desesperada por tener un bebe, que arrodillada conjuro a la luna que le diera la oportunidad de ser madre. La luna escucho sus suplicas y se apiado de la pobre mujer desesperada que le imploraba, así que le concedió la dicha de tener descendientes. Pero no serían simples hijos, no. Sus hijos y descendientes serían los brujos más poderosos que el mundo haya visto, porque eran un regalo de la luna; serian inteligentes y astutos, serian fuertes y valientes, y su belleza sería tan espectacular como la luna misma; seria inhumana. Serían tan hermosos que el mundo los veneraría. Pero la luna quería algo a cambio y se lo hizo saber a la mujer; ella quería que se le presentara a cada niño o niña que nacieran de su linaje ante la luna y que en todas las noches de luna llena, se reunieran todos para admirarla, como la madre de la magia que les dio vida; que la vieran como, la luna de plata brillante en la oscuridad del cielo que le concedió a esa pobre mujer no solo ser madre, sino que sus hijos heredaran magia pura y antigua, dones ancestrales que nadie conoce, y que estuvieron esperando por muchos años a ser entregados a alguien que fuera digno. La mujer acepto lo que pedía la luna. Nueve meses después, una noche de luna llena, nació un niño, su piel era tan pálida y brillante; pero lo que más les sorprendió fue ver el color de los ojos del pequeño platinado, sus ojos eran violeta y tenía una marca en forma de media luna en el hombro derecho. Lo que hacía que el niño fuera único y perfecto, los dos padres entendieron que esa era uno de los regalos de la luna. En honor a la noche bañada de estrellas quienes acompañaban a la luna en la oscuridad, decidieron que el niño tuviera un nombre de constelación o estrellas ya que ellas serian el eterno camino que guiaría al niño que nació como regalo de la luna. Al niño lo presentaron ante la luna con el nombre de la constelación del fénix; Phoenix.

Habia tanto silencio en el GC, todos estaban en shock tratando de procesar todo lo contado, nadie se movía ni siquiera sabían si estaban respirando o no.

Viaje a 1997¿Planeado o accidente? (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora