Capítulo 34

898 42 14
                                    

Al ver que Fujitora y los marines se alejaban de donde se encontraban, Zoro corrió en dirección a Robin, quien sonrió al verlo.

- Mujer, no te dije que me esperaras en el palacio

- Lo siento mi amor, pero tenía que ayudar, yo también soy una Mugiwara ¿no?

- Claro que sí, pero estas herida

- No es nada, la princesa Mansherry curo mis heridas

- Lo siento Zoroland, no la pude proteger de diamante, pero gracias a Robinland lo pude derrotar. - se disculpó Kyros

- No tienes que disculparte, Robin es capaz de enfrentar sus propias batallas, es una guerrera. - en ese momento, el poder de la princesa tontatta dejo de hacer efecto y sus heridas volvieron a sangrar, comenzó a desvanecerse lentamente y el espadachín la tomo entre sus brazos.

- Franky, debemos ir por Luffy y escapar, antes de que la marina cambie de idea. -ordeno el espadachín y el ciborg obedeció de inmediato.

- Pueden refugiarse en mi cabaña, yo era un criminal, pero no tienen nada que temer, les estoy agradecidos, por ayudarnos en esta batalla y cuidar de mi Rebecca.

- Muy bien, iremos contigo, pero primero debemos buscar a mi capitán.

- Estaba en el centro. - hablo Leo

- De acuerdo iremos por ahí.

- También debemos avisarle a Usopp. - acoto Robin sonando débil.

- Tú descansa mujer, nos encargaremos de todo.

- Ya encontramos a Luffyland, por aquí. - hablo Wicca, la pequeña tontatta que había guiado a Zoro esa misma tarde.

Con Robin entre sus brazos, fue Franky el encargado de llevar a Luffy y todos los mugiwaras se dirigieron hasta la cabaña de Kyros, aunque se detuvieron a medio camino para mirar sin poder creer lo que veían en las enormes pantallas, que transmitían como el almirante Fujitora, le pedía perdón de rodillas al rey Rikku.

Antes de eso, Kyros agradeció a los tontattas como fieles soldados por su apoyo en esta guerra.

Hack del ejército revolucionario había llevado a Usopp junto a sus compañeros, así que Franky, llevaba tanto al capitán como al tirador, mientras el espadachín seguía cargando a su novia, cuidando de no tocar sus heridas, llegaron hasta la cabaña de Kyros sin mayores incidentes, el rey Rikku, les había ofrecido alojamiento en el palacio, pero determinaron que era mejor que ellos se mantuvieran ocultos, por lo que solo los demás guerreros del coliseo lo hicieron.

Al llegar a la cabaña, Franky recostó a Luffy en la cama.

- Hey soldado tienes un botiquín. - le pidió Zoro una vez que estuvieron seguros dentro de la casa.

- Aquí tienes Zoroland. - el ex capitán del rey Rikku le entrego un bolso con vendajes, antisépticos y todo lo necesario para curar heridas.

Zoro quito la capa de Cavendish de la espalda de Robin, para encontrarla cubierta de sangre y pequeños cortes simultáneos.

- Lanzo una lluvia de shuriken, utilice mi espalda para cubrir a Rebecca. - explico la arqueóloga a todos los que se encontraban allí.

- Debes aprender a usar haki. - le susurro Zoro al oído. Y ella asintió aunque estaba sentada de espaldas a él. Zoro comenzó a limpiar con un algodón mojado en alcohol

- Lo siento. Sé que arde, pero debo desinfectarte primero.

- Lo sé, tranquilo. - Law los miraba con el ceño fruncido desde una silla que había dejado cerca de la ventana, Usopp dormía despatarrado en el suelo, y Luffy también descansaba con una expresión pacifica en su rostro y una sonrisa. Aun sobre la cama.

SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora