Capítulo 20

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En el momento en que recobro la conciencia, sintió las vendas en su cuerpo, Chopper ya se había encargado de sus heridas, pensó. Aun mantenía los ojos cerrados, por alguna razón no los pudo abrir de inmediato, su mente estaba despierta, pero su cuerpo aun no respondía.

Estaba recostado sobre algo cómodo y mullido, parecía ser una cama, probablemente la enfermería del Sunny o quizá lo habían llevado de regreso al bar de Shakky.

Comenzó a sentirse ansioso por abrir los ojos, esperaba encontrarse con aquella mirada azul, profunda como el océano que lo hacían perderse en ella. Estaba casi seguro de la expresión preocupada en el rostro de la mujer, nuevamente la había hecho preocupar. Debía entrenar aún más duro para que aquella situación no se repitiese.

Al fin sintió que tenia control sobre su cuerpo y abrió los ojos lentamente, no reconoció el lugar donde estaba y no podía moverse con completa libertad, en su inspección visual encontró un rostro familiar, que le costo un par de segundos reconocer, pero al momento en que el recuerdo de aquel cabello rosa entro en su memoria no pudo evitar gritar, no podía ser cierto... no podía haber regresado a Thriller Bark.

Aunque al menos no estaba tan lejos de Sabaody, se incorporo como pudo y tanteo buscando sus katanas.

– ¿Dónde están? – grito exasperado

– ¿Qué cosa? – grito de regreso la peli rosa

– Mis katanas idiota.

– No me digas idiota eso no es nada lindo

– No me importa si es lindo, quiero mis katanas de una maldita vez.

– Están escondidas, no te entregare un arma con la que me puedes atacar.

– Entrégame mis katanas y dime donde mierda estoy.

– No te entregare nada... y yo te iba a preguntar lo mismo ¿¡donde esta Moria-sama!? ¿Qué le hicieron? ¿Cómo escaparon de Thriller Bark?

– Luffy derroto a Moria. – fue todo lo que le respondió antes de levantarse de la cama y salir de la habitación.

Luego de correr en círculos por el castillo buscando sus katanas y de que Perona le bajara la moral atravesándolo con sus fantasmas para luego llenarlo de vendas y molestarlo, al fin había logrado salir a la isla, todo el lugar era muy lugubre y parecía abandonado.

La chica fantasma lo había seguido y habían llegado hasta unas ruinas rodeadas de un espeso bosque, parecían las ruinas de una vieja ciudad que definitivamente había tenido mejores días.

No sabia realmente cuanto tiempo había transcurrido desde que despertó en aquella isla, pero debía darse prisa, sus nakamas lo estaban esperando, el maldito cocinero se reirá de él por llegar de ultimo y haría alguna estúpida broma acerca de su mala orientación, pero es que el idiota no entendía que las paredes se movían de lugar, Usopp y Chopper se reirían de aquella broma, Nami probablemente le daría un buen golpe en la cabeza por hacerlos esperar, Franky ya tendría el Sunny listo para partir, Brook solo diría que estaba esperando su regreso para poder reencontrase con Laboon, Luffy estaría impaciente por llegar hasta el nuevo mundo y Robin... maldición, le había hecho una promesa a Robin, si se tardaba más podría pensar que se arrepintió y no era así, estaba decidido a estar con ella, a convertirla en su fortaleza.

Se sorprendió cuando aquellos babuinos aparecieron portando armas y dispuestos a pelear, tomo sus katanas y se preparo para pelear, su cuerpo aun no se encontraba en las mejores condiciones, sus músculos estaban resentidos y sus heridas se habían vuelto a abrir, pero lo intento.

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