Capítulo 10

1.8K 74 19
                                    


Después de que el barco aterrizara nuevamente en el mar y ya lejos de la marina y la ciudad del agua, la banda pirata capitaneada por Mugiwara Luffy, iniciaba una nueva aventura, cada uno ya había adoptado un lugar favorito, y en eso se encontraba el espadachín, estrenando su nuevo gimnasio y teniendo una vista exclusiva del mar y de sus nakamas, detuvo un momento su entrenamiento y se acerco a la ventana que tenia vista hacía el pequeño jardín que Franky había adaptado a petición de la arqueóloga, y precisamente estaban ellos dos en ese lugar y la morena le sonreía amablemente al constructor, y el sentimiento que se asentó en su pecho no le gusto, todos en ese barco eran nakamas, no tenia por que sentir esas ganas de cortar la cabeza de Franky, cuando este en realidad le caía de maravilla, aunque era un pervertido peor que el cocinero no tenia absolutamente nada en contra de él, por eso se sintió tan frustrado cuando se dio cuenta que sus traicioneros pies lo llevaron hasta donde se encontraban.

– Kenshi-san ya terminaste tus ejercicios? – la sonrisa que le dedico a él era completamente diferente a la que le había dado a Franky hace un momento, o al menos eso quiso creer.

– ¿Ah? Si, ya terminé. – se salió por la tangente.

– ¿Te perdiste otra vez? – volvió a decirle sonriendo a lo que él solo refunfuño balbuceando algo de que no era él quien se perdía.

– Tsk, claro que no, tengo algo que hablar contigo. – le dijo a la morena mirándola directo a los ojos.

– Mensaje suuuuuper recibido, iré a prepararte lo que me pediste Nico Robin. – Franky se despidió de ambos y desapareció por el Sunny go.

– ¿Y bien kenshi-san que querías hablar conmigo? – le pregunto después de unos minutos de silencio.

– ¿Eh? ¿Yo? Ah sí... maldición. – susurro lo ultimo ya que en realidad no tenia nada que decirle a la mujer frente a él. La arqueóloga se acerco peligrosamente a él y susurro en su oído.

– ¿te pusiste celoso kenshi-san? – dio pequeño mordisco en el lóbulo del peliverde que causo un escalofrió que recorrió el cuerpo del hombre.

– No se de que hablas. – respondió cuando se recupero y sin decir más dio media vuelta y regreso a su entrenamiento.

Llevaban ya una semana en el mar, Zoro se había decidido a mantenerse alejado de Robin, estaba molesto consigo mismo por el hecho de haberse puesto celoso de su nakama, después se había enterado que Robin le pidió a Franky si podía construirle un par de macetas más, ya que había comprado muchas semillas a lo largo del viaje, esperando la oportunidad de cultivarlas.

– Zoro, ven a pescar con nosotros. – Luffy, Chopper y Usopp se hallaban en el costado del barco a su lado tenían una gran tinaja en la que lanzaban pulpos.

– ¿Qué harán con eso? – pregunto curioso, tenia el cabello más largo y unos mechones caían por sus ojos.

– Los llevaremos al acuario para comerlos después, Sanji dijo que la cena de hoy ya estaba lista. – Chopper estaba feliz, el peliverde solo sonrió y siguió su camino hasta la cocina.

– ¿Se te perdió algo marimo? – fue el recibimiento de Sanji.

– Solo vengo por una botella de sake ero Cook. – saco la preciada botella y salió de la cocina sin decir palabra, paso su mano quitando los mechones que caían por su rostro. – "necesito córtame el pelo" -se decía a si mismo dirigiéndose hasta el mástil, en donde se sentó recostando su espalda.

– Te puedo ayudar con eso. – se sobresalto al escuchar la voz de Robin a su lado, giro su cabeza para encontrarse directamente con la mujer. – lo siento, no pretendía asustarte. – le dijo.

SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora