Epilogo

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*algunos muchos años más tarde*

Aquel día estaba soleado, la temperatura de otoño en el east blue era agradable, la pareja se encontraba en su casa en la cima de la colina más alta de la isla.

El mejor espadachín del mundo se encontraba en su herrería forjando una nueva katana y su amada esposa a su lado leyendo un libro, los años habían pasado y desde que Luffy se había convertido en el rey de los piratas y todos habían podido cumplir sus sueños, lo cual implicó rehacer el mundo como se conocía hasta ese momento.

Pero los tiempos de paz habían llegado y aunque los piratas seguían existiendo, solo eran una muestra de libertad y en caso de que alguno se descarriaba siempre había algún miembro de la ex tripulación del rey de los piratas dispuesto a enseñarles modales.

— Abuelo, abuelo. — ambos se miraron y sonrieron ante la llegada del pequeño.

— La tía Nami envió un nuevo contrincante.

— Esa maldita bruja se hizo millonaria a costa mía. — refuto el peliverde poniéndose de pie y tomando sus katanas.

— No niegues que te encanta seguir demostrando que eres el mejor espadachín del mundo. — la morena le sonrió con calidez.

— El abuelo es el mejor. — exclamo el pequeño.

— Bien, pequeñajo, vamos a ver quién se atreve a retar a tu abuelo. — Zoro tomo la mano del niño y bajo la colina junto a él.

— Acabalo, mi amor. — lo alentó Robin.

— Lo siento papá, se emociona cada vez que alguien viene a retarte. — la mujer de pelo verde y ojos azules se encontraba al pie de la colina, a su lado había un hombre rubio con las cejas enroscadas. El espadachín lo miro mal. Sin embargo le sonrió a su hija.

— No te preocupes, no me vera perder jamás. — siguió caminando hasta el dojo en el cual daba clases a los niños del pueblo, con su nieto a su lado.

En la puerta se encontraba un hombre entre los veintimuchos y treintaypocos, portaba dos katanas, una a cada lado de su cintura, las desenvaino en cuanto vio aparecer al mejor espadachín del mundo junto a su nieto.

El duelo duro solo un par de minutos.

— Abuelo ¿Por qué tía Nami sigue enviando debiluchos?

— Porque esa maldita bruja solo quiere ganar dinero a mi costa, ni siquiera me dan una buena pelea, que al menos valga la pena dejar a tu abuela sola en casa.

— No te preocupes por eso, esta vez vine a ver, aunque debo admitir que si me decepciono un poco, creí que Nami tendría mejor criterio, le enviare una carta diciéndole que endurezca las pruebas y suba los estándares.

— Eso sería perfecto, gracias.

— Mamá que alegría verte por aquí. — la mujer peliverde se acercó hasta Robin, quien la recibió con una abrazo.

— Lo siento hija, he estado algo ocupada con el nuevo libro.

— Oh no te preocupes, Goji, preparo una cena estupenda, ¿ya que bajaron al pueblo por que no cenan con nosotros? — Robin miro a Zoro y este le devolvió el gesto algo resignado. Amaba a su hija y nieto, pero odiaba el hecho de que su única hija se haya casado con un hijo de Sanji.

— Mamá ¿está bien que tía Nami siga enviándole retadores a papá?

— Lo hace por todos nosotros, tu padre es un hombre que vive y muere por la espada, por eso se hizo herrero y prefiero que vengan aquí a creer que se pueden enfrentar a él a que ande por ahí buscando una buena pelea, tu tía Nami es feliz, tu padre es feliz y yo soy feliz.

— Aun no entiendo cómo le envía contrincantes, nadie sabe que ustedes viven en esta isla.— acoto Goji,

— Nami les cobra una suma cuantiosa por una vibrecard de Zoro, Chopper se las quita cuando llegan al puerto y luego de que Zoro los vence les da una infusión que les hace olvidar como llegaron aquí, la verdad, prefiero no meterme en esa parte.

— Abuelo, abuelo, cuéntanos de nuevo la historia. — Zoro miro a su nieto de reojo, la cena había terminado y él estaba recostado sobre el tronco de un árbol en el jardín delantero de la casa de Roronoa Chisuna, su única hija.

Shoken, su nieto y sus amigos, los mismos niños que entrenaban en el dojo se encontraban allí. Todos mirándolo esperanzados.

— ¿otra vez?

— Vamos por favor

— De acuerdo, siéntense...

— *Riqueza, fama, poder. El mundo lo había ganado todo por un hombre: el Rey de los Piratas...

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y con el epilogo damos por terminada está historia... estoy trabajando en outtake de como fue la propuesta y el matrimonio... espero haya sido de su agrado y nos seguiremos leyendo...

muchas gracias a todos por acompañarme en este camino y espero que esta historia haya sido de su agrado...

nos leemos!!

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