Capitulo 35.

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Actualidad.

En mi mente hay algo que tengo para hoy pero no recuerdo que.

Me afeite la barba, fui de compras, llené mi alacena.

¿Que hay para hoy?

Estoy sentado en mi escritorio mirando mi calendario.

24 de Noviembre.

¿Cumpleaños de Neyl?

No eso ya pasó.

¿El de Amanda?

Duro todo el año recordandome que día, es muy difícil de olvidar.

Entonces que hay hoy, joder ¿Que?

Salgo del despacho a la primera sala de Aritzona.

—Buenos tardes—Le digo a la recepcionista.

—Señor Nerio.

—Que hermosa tarde ¿Cierto?

—Claro señor.

—Como usted.

Veo como se ruboriza, haciendo que una sonrisa arrogante se pose en mis labios.

—Okey don seductor—La voz de Sharoon hace que ruede los ojos—¿No tienes que ir a una fiesta?

—¿Fiesta de?—Le guiño el ojo a la chica que suelta una risita nerviosa.

—Tio Nerio, este fin de semana es mi cumpleaños y quisiera que asistieras a mi fiesta—Imita a mi sobrinita acordándome.

—Oh el cumpleaños de Natalie.

—Si idiota, te puesto que no tienes regalo.

—Si tengo regalo—Digo como si fuera lo más obvio.

—¿En serio?—Se cruza de brazos y arquea una ceja.

—Obvio.

—Muestramelo—Dice decidida.

—¿Aqui y ahora?—Sonrio de medio lado con picardia.

—Nerio—Dice con molestia.

—Okey okey, no tengo.

Ella empieza a caminar a la salida.

—Te quedarás ahí como un tarado o iremos a conseguir el jodido regalo—Dice caminando.

Camino acomodando mi traje detrás de ella.

Al salir, buscamos mi auto.

—Okey ¿Que le gusta a la niña?

—Llorar.

—A todos—Rueda sus ojos—Por eso no tengo hijos.

—Okey creo que los ponys.

—No le vas a regalar un caballo—Dice.

—¿Por qué no?

—Por que no Nerio.

—Okey—Resoplo—¿Un cadena de diamantes?

—Es una niña Nerio, eso no le va a importar.

—¿Un parque de diversiones? Joder por qué tiene que ser tan difícil conseguir un jodido regalo.

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Camino a la casa de los Pockerman Luos, esos apellidos ni combinan pero Neyl no eligió a otra con uno más bonito.

Tocó el timbre y Sofía abre la puerta riendo y con una charola de bocadillos.

—Menos mal viniste, no deja de preguntar por tí.

Doy un paso dentro y puedo ver el interior de la casa de dos pisos, hay fotos de la niña, su sonrisa radiante, y cabello dorado en todas partes.

Amanda viene con cara de sufrimiento.

—¡Son demasiados niños!—Me empuja al patio
—Y ella no deja de decir “Donde está tío Nerio” “Por que no llega” ya estoy harta.

Entro al patio y puedo escuchar la buya, mamás de la clase de Nat aquí y allá, niños corriendo.

Siento el pisotón que me da uno y respiro profundo para no salir corriendo de este lugar.

—¡Tío!—La pequeña corre a mis brazos y la alzo.

—¿Cómo estás princesa?

—¿Super y tú princeso?

Suelto una carcajada.

—¿Preparada para el mejor regalo de tu vida?

Ella aplaude y la entrego la bolsa.

—¡Es una!... ¿Muñeca?—La mira raro.

—Si—Espero el agradeciendo.

—Oh.

¿No le gusto?

Neyl viene a mi con dos vasos de cerveza. Así que la bajo y sale corriendo con su muñeca.

—Ya quiero que acabe la fiesta—Saluda son una sonrisa falsa a un invitado.

—Asi es la paternidad.

Amanda nos da bocados y bebidas.

Los niños corren, gritan, saltan y yo quiero agarrarlos a todos y colgarlos, para que se queden quietos.

Amanda llama a su madre, quien la ayuda con las cosas y Sofía entretiene a los niños con juegos.

—Ahora, el que me traiga una media, le doy está barra de chocolate.

Los niños salen corriendo a casi desnudar a sus madres para obtener la media.

Río a carcajadas cuando un montón de niños de aglomeran por darle la prenda a Sofía, quien se va de bruces cayendo de culo.

Paul la ayuda a levantarse mientras no aguanta la risa, Neyl no está por ninguna parte con Amanda.

Me siento y una mujer se me acerca.

—Hola.

Es castaña con curvas de infarto, sus ojos marrones adornados de grandes pestañas son hermosos y me da un sonrisa radiante.

—Hola—Contesto sonriéndole también.

—Soy Lieth—Me estira su mano.

—Nerio—La estrecho, y vuelvo a mi vaso, miro a mi alrededor—¿Cual de todos es tu pequeño?

Ella ríe.

—Oh no, no tengo hijos—Toma asiento a mi lado—Soy de la clase de Yoga de Am.

—Mmm interesante—La miro de reojo—¿Lieth no?

La miro y ella asiente.

—Espero te gusten experimentar.

—¿Ah?

Río levantadome y caminando a la casa.

El timbre suena de nuevo.

Karen y Alfred entran, con un hombre enano, este lleva un mini traje.

—Con ustedes—Grita el hombrecito—El mejor regalo de la historia.

Darion entra en un pony mientras hay otro atrás de él.

—AAAAAH—Nat grita—¡Un pony, un pony!

Alfred me guiña el ojo antes de seguir caminado.

Saco mi celular.

—Sharoon trae el collar de diamantes.



Nerio Pockerman. [Libro II].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora