Miro sorprendido a Neyl, pues no sabía que había vuelto.
Y mucho menos que volvía a ser gigoló. Aunque en su poco tiempo que lo fue en el burdel creí que nunca más querría volver hacerlo.
Y ahora está aquí, sentado frente a mí, en mi jodido despacho con una maldita sonrisa mediocre, odio que venda su cuerpo.
¿Por qué carajos lo hace? Es millonario, no tiene necesidad.
—Quita esa estúpida sonrisa Neyl—Hablo mirándolo serio—Y dime cuándo llegaste.
Sacude la pelusa inexistente de su saco vinotinto, sus ojos suben lentamente con un brillo divertido.
¿En qué te haz convertido en estos años Neyl?
—Calmate un poco—Dice relajando—Ya pareces anciano—Hace una mueca—Y es raro ver a Nerio Pockerman tan serio.
—No estoy para estupideces. Por qué estabas ofreciéndote.
—Por que quise—
—¿Desde cuando lo haces?
Él da un suspiro.
—Hace un par de años ya—Contesta.
Rasco mi cabeza con desesperación.
—¿Como paso?
—Una noche estaba hablando con Alisha...
—Espera—Lo corto—¿Estabas hablando con Alisha?
Asiente aburrido.
—¿Puedo continuar?—Habla de mala gana, y ahí está... Ese es él Neyl Pockerman que conozco. No esté clase de masa, divertida y relajada—Hablamos de mamá.
Cierro la boca tensandome, él no había hablado de tía Noris desde que murió. Y que lo haga significa que lo está asimilando...
—Y decidí que hacer lo que ella hacia, me haría sentir que estoy un poco más cerca de ella—Cierra los ojos fuertes y traga—Y no me interesa si te agrada o no el echo de que ofrezca servicios...
Nos miramos un instante, yo no sé que decir y al parecer el tampoco espera que yo diga algo.
Se levanta.
—Solo necesito que le digas a tus gorilas que me dejen ofrecerlos, y estate tranquilo no haré nada con mis clientas acá.
Abre la puerta y se va.
Dejándome sumido en un silencio abismal, mi mente masoquista retrocede a recuerdos dónde nuestras madres, aún nos podían revolver el cabello con sus manos. Un nudo de forma en mi garganta.
La puerta se abre y una Patri fingiendo ser tímida aparece.
Seco la lágrima que salió por error, no me gusta que nadie me vea llorar. Y que ella lo haya echo me pone furioso.—¿Por qué carajos no tocas la puerta?
Hablo de mala gana, sin medir mis palabras, al oír lo que había salido de mi boca me arrepiento de inmediato.
Sus mejillas se tiñen de rojo y su expresión sorprendida hace que me sienta mal.—Eh.. Uhm—Trata de buscar las palabras correctas—Solo quería ver cómo estabas.
Y como un balde de agua, esas palabras hacen que lágrimas rueden por mis mejillas.
Odio llorar.
Pero no sé qué carajos me sucede, ella cierra la puerta y se acerca rápidamente a mi, me abraza y pasa su mano por mi cabello.
¿Cómo estás?
¡¿COMO ESTAS?!
Pues estoy en la mismísima mierda, extraño a mamá, de alguna forma Neyl hizo que tuviera envidia. Ya que él si se puede sentir más cerca de Noris. Y se que nadie podrá sacar esa idea de su cabeza. Él siempre será un Gigoló.
Tomo las manos de Patri y ella da un respingo, me alejo para mirarla. Es hermosa, su cabello rubio cae por sus hombros y su mirada inocente —que es lo único inocente que tiene esta chica— escanea mi cara, me da una sonrisa dulce antes de que su pulgar limpiará mis lágrimas.
Y es cuando me di cuenta.
Mi corazón estaba acelerado, y mi piel erizada, mi cerebro me aclamaba con urgencia que quitará el espacio que nos dividía, mis deseos cosquillaban por querer tocar esa pálida y suave piel que me está volviendo loco.
Mis ojos la recorren y su figura, Dios su figura. Juro que pagaría lo que fuera por recorrerla a besos.
—Nerio—Habla sacándome del trance—Siempre que me necesites, ahí estaré—Baja y besa mi mejilla—Como amiga—Sus manos van a mi cuello—Como amante—Besa la comesura de mi labio—Pero siempre estaré.
Sus piernas se abren y camina una pasos hasta quedar encima de mis piernas, se sienta a horcajadas sobre mi.
—Yo voy a besar el camino de tus lágrimas—Habla bajito.
Cierro los ojos cuando sus labios empezaron a tocar la piel de mi rostro. Mis manos fueron a sus caderas y la presione contra mi.
—Eres hermosa.
Hable.
Sus besos se detienen y abro los ojos. Me mira sonrojada.
Estoy por decir algo pero sus manos tiran de mi nuca pegando sus labios a los míos. Recorro su labio inferior con mi lengua, antes de abrirme paso en su boca.
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Nerio Pockerman. [Libro II].
Teen FictionSeductor. Amo. ¿Misterioso? Mmm me suena a: -Bienvenido señor Pockerman.