Capitulo 2.

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Años después.

Neyl cumple diecisiete dentro de dos días.

Estoy parado en el frente del burdel cumpliendo mi horario de portero.

Ya que al morir mi madre tuve que cumplir un horario para poder comer, aunque Mckenzie trato de hablar con la madre de Sharoon ella me ha obligado a cumplir un horario.

—Tendrías mejor paga si usarás tu bonita carita para ofrecer servicios—Madame Sinmonet habla a mi espalda— No sabes cuánto pagarían por ti. Tal vez si le pidieras a Mckenzie que te consigan clientas.

—Ni lo pienses—Contesto—No nací para esta vida.

—Como quieras, tu te pierdes el dinero.

Entra al local con la altivez que la caracteriza.

Estoy mirando el suelo cuando una camioneta negra para enfrente, un hombre rubio y ojos verdes camina hacia mí.

—Nerio Pockerman— Dice él.

—¿Usted es?, Si viene por mi madre déjeme decirle que no ofrece servicios desde el más allá.

Me mira de arriba a bajo.

—Busco a Noris, Noris Pockerman y su pequeño.

—¿Pequeño? Neyl tiene más testosterona que usted.

Sus ojos se iluminan cuando escucha el nombre de Neyl. Y es cuando me doy cuenta del gran parecido que tienen.

—Osea que si está aquí.

—Depende, ¿Para que lo busca?

—Soy su padre.

Suelto una carcajada y el me mira serio.

¿De verdad?

—Espere un momento—Digo y camino de nuevo adentro.

Mujeres desnudas se pasean con naturalidad, morena, blancas, mestizas, cualquiera estaría loco en este lugar, pero ya se me ha echo un hábito estar en este ambiente, gemidos retumban en los privados y camino despreocupado hasta donde está la chica nueva.

Ella y tía Noris se han hecho muy buenas amigas, viene desde Rusia y tiene unas tetas que ¡Joder!

—Alisha—La morena de cuerpo esbelto me mira, está encima de un cliente, mientras esté le masajea las tetas sin ningún pudor—Cuando puedas ve a buscar a tía Noris y a Neyl, un hombre los busca.

Se para de las piernas del hombre y otra chica automáticamente toma su lugar, este besa su cuello.

Así que me voy dejando la escena atrás.

El hombre espera afuera con impaciencia mientras yo cumplo con mi trabajo.

Lo miro mal aveces.

Tia sale con Neyl, que mira mal al hombre.

—Mattew—Mi tía tapa su boca al verlo.

—Vengo por mi hijo Noris.

Neyl alterna la mirada entre ambos.

—¿Hijo?—Le pregunta a tía Noris.

Joder esto es como una novela.

Cállate no es el momento.

Su madre asiente mientras que el hombre acomoda su traje.

—Busca tus cosas—Le ordena a Neyl—nos iremos.

—¡No!—Tía Noris se exalta—No te lo llevarás.

—¡Si lo haré!—Toma a Neyl por el hombro—Vamonos.

Y yo no sé si intervenir o ir por palomitas.

—¡Suéltame!—Neyl lucha e intervengo.

Tía Noris también se viene encima de él, pero este manda un guantazo a su cara haciendo que caiga en el suelo.

—¡No vuelvas a poner tus manos de ramera sobre mi!—Le grita y le mando un puñetazo al rostro, partiendole la boca.

Neyl me quita y está vez es él quien le da puñetazos a la cara.

—¡No vuelvas a tocar a mi madre pedazo de mierda!

Mckenzie se mete a separarlos y yo sujeto a Neyl.

—¡Vayase!—Grita Mckenzie.

—Cuando está puta no pueda darte lo que necesitas, llámame—El hombre lanza una tarjeta en el aire antes de subirse a su auto.

—Neyl—Tia Noris trata de tocarlo pero él se aleja.

—De todas las porquerías que te has acostado, esa es la peor escoria que he conocido. No quiero volver a verlo.

Camina lejos de nosotros y yo trato de seguirlo.

Pero.

¿Que le voy a decir?

Alisha viene con una bata y se lleva a Noris quien llora en la acera.



Nerio Pockerman. [Libro II].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora