Dulce
Mis ojos brillan con más intensidad a medida que veo la ecografía de mis mocositos. Son dos los amores de mi vida, dos corazones más que laten junto al mío.
Voy a protegerlos, juro que no fallaré como mis padres lo hicieron conmigo, no voy a repetir el mal ejemplo que ví desde niña.
Estaba triste, casi destrozada cuando Brock dejó la habitación como alma que lleva el diablo, por poco comienzo a llorar como una estúpida. Gracias a Dios que Demian y Calum no lo permitieron, para no dejarme caer en un sentimiento tan tonto, me contaban diferentes anécdotas de cuando eran pequeños.
No paré de reír, de verdad que ser traviesos era su punto fuerte, pobre de sus padres y el dolor de cabeza que les daban casi todos los días.
Van a pagar cada pecado con sus hijos, sí, no me queda de otra que afirmar que mis bebés tienen tres padres, su determinación a estar junto a nosotros les hizo ganar ese papel.
Seguimos en el hospital esperando a que me den el alto, Demian fue para arreglarlo y Calum está junto a mí hablando con sus hijos, es el más empalagoso de los tres.
Demian es el más racional en cuanto al actuar, pareciera que cada paso que da siempre es meticuloso, ordenado y bien pensado.
Da miedo que sea el calculador.
Brock es el más serio, impulsivo y explosivo. No piensa antes de actuar, simplemente revienta para luego ver las estupideces que hizo, es como pensar tarde.
Son diferentes en casi todo, menos en uno importante para mí: los tres son dominantes experimentados. En el caso de Demian me confundí, cuando lo ví en ese río de cuentos de hada no parecía ser alguien duro a la hora de follar, sin contar con que duró poco.
- ¿En qué piensas?- oh sí, Calum es muy entrometido.
- En ustedes - se sorprende por mi sinceridad - ¿Cómo es que son tan diferentes?
Brock no es tan abierto como él, por algo vive en una cabaña a las afueras de la sociedad.
- ¿De qué hablas? Nadie en el mundo es igual a su hermano, tú tienes uno ¿Eres como él?- niego, nunca lo traicionaría como él lo hizo.
Duele, es una espina en mi pecho que no me permite respirar cuando lo recuerdo.
- Bien, nuestra historia familiar es algo complicada, como todo en la vida - la puerta nos interrumpe al instante que Calum estaba por iniciar con el relato.
Maldito y sexi Demian, mi chismosa interior se enfada contigo.
- Listo, ya tengo lo necesario para ir a casa- asiento, me levanto con ayuda de Calum - Traje una silla de ruedas por orden del doctor- anticipa antes de que objete.
Y si, tengo que sentarme ahí para ir al auto.
- ¿Brock sigue en el baño?- pregunto, después de que llegó y vió a sus hijos salió del cuarto rumbo al baño.
- No, aquí estoy - llega para ayudarme a sentar, no sin antes dejar otro beso en mi vientre.
Eso es cosa de los siete días de la semana, siempre los saluda o se despide de esa forma.
- ¿No era mejor masturbarte en casa?- Calum se queja de dolor por el golpe que Brock le da en el hombro - ¡Oye! Era un broma, no para dislocar mi hombro ¡Eres un bruto!
Las enfermeras que pasaban delante de nosotros miran a Brock con picardía ante el atrevido comentario de Calum, bajan la mirada y ríen de la "vergüenza" mientras caminan más rápido.
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Puta sinvergüenza (+18) (Borrador)
Short StoryAdvertencia 🔞⚠️ Esta novela contiene lenguaje vulgar, escenas de violencia, abuso sexual, y daño psicológico. Leer bajo su propia responsabilidad. ---------------- Tenerlo todo en la vida puede llegar a ser tan monótono y aburrido que algunas pers...