👠Veintitrés 👠

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Dulce

Una semana desde que mi amigo tiene dos esclavos personales para atenderlo a toda hora. No importa cuándo sea o qué hagan, nada es suficiente para ganarse el perdón de mi mejor amigo luego de la paliza a la que fue sometido por dos impulsivos.

Irónicamente estaba segura de que Demian era el más paciente de los tres, fallé estupendamente ya que Calum ganó ese lugar ahora.

Debo decir que me encanta el sometimiento que veo por parte de Javier, es satisfactorio verlos pagar por las consecuencias de sus actos. Esperemos que con esto piensen con el cerebro que seguramente tienen.

Ahora estamos de nuevo en mi departamento, Javier quiere que Demian le cocine algo delicioso en lo que Brock masajea sus pies. Por poco y lo golpean de nuevo al verlo recostado en la cama esperando por sus servicios.

Oh Dios, que mal sonó eso.

Pues bien, mi relación con ellos - nada formal todavía porque no recibí las rosas que merezco - es menos tensa que antes, hablamos constantemente de nosotros y así logramos conocernos más.

Brock es el que menos habla, sabe escuchar - cuando le conviene- por lo que esa apertura conseguida no ha sido fácil, su pasado es lo que menos menciona.

Es más fácil enseñarle matemática un burro que obtener una confesión de un hombre que pretende ser mi pretendiente y que no cumple con el requisito fundamental del conocerse ¿Se entiende la ambigüedad en eso? Pretende, incluso, formar una familia sin decirme cosas de vital importancia sobre su pasado.

Ese y otros tantos motivos provocan que camine cuidadosamente en cuanto a él, no puedo tratar de igual forma a Brock como lo hago con Demian y Calum.
En cierta medida creo que la dureza es el camino para obtener lo que necesito, no es por insistencia sin sentido, se debe a que es el padre de mi hijo y por lo tanto tengo que saber si hay algún peligro en su pasado que pueda perjudicarnos.

Su ex es parte primordial de la ecuación, me quedó claro en el arranque de ira, desesperación y humillación que le provocó saber que iban a divorciarse. Esa mujer tiene algo mal en la cabeza, chantajear a un hombre para tenerlo uno en su poder es enfermo.

Lamentablemente la loca sigue suelta, el miedo constante de que quiera acercarse y dañar a mi hijo no me deja dormir en paz. No me haría problema tirar de su cabello hasta dejarla calva sí trata como mínimo de acercarse a 200 metros de la cabaña, sin embargo llevo en mi vientre mi mayor tesoro.

Protegerme a mí es mantenerlo a salvo a ellos.

Brock insiste en que si seguimos en la cabaña no debemos temer por ataques de ex's psicópatas. Dando ver como sus hermanos aseguran tener todo bajo control, para asegurarse contrataron a 15 hombres que custodian los alrededores del bosque.

Con mis amigos no teníamos idea de que ese bosque era privado y pertenecía a la familia Lexen, técnicamente hablando Javier está ahí de forma ilegal.

Una jugada que será aprovechada por ellos para acabar con su servidumbre.

- ¿Qué? ¿Cómo que mi cabaña está situada en propiedad privada? ¡Es un puto bosque! La naturaleza no le pertenece a nadie ¿Se golpearon entre ustedes mismos? Es que nada más explica algo tan ilógico como lo que acaban de decir - y si, no tardaron en usarlo a su favor para pasar de mi castigo.

- Aquí tienes los papeles de propiedad, como ves, el territorio está a nombre de mi hermano mayor. Así que querido Javier, tú eliges, o destruimos la cabaña o acabamos con este juego ridículo qué Dulce nos obligó a cumplir- Demian y esa puta sonrisa de superioridad me hace enfadar, ese era mi castigo.

Puta sinvergüenza (+18) (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora