El tiempo vuela

210 13 0
                                    

Magda le ha contado al rey y este está furioso.

Voy con ella al palacio y luego llega Louis y se da cuenta de la situación.

-De esta nadie te salva- me dice amenazante.

-Louis, silencio!- le dice con autoridad el rey.

-No ves cómo está? Pero qué te pasa por la cabeza!? Es la madre de tus hijos!- dice viéndolo furioso.

-Crees qué es mío?- rie -Es de su guardaespaldas.

Augusto me regresa a ver sorprendido -Dejennos a solas.

Los dos salen y Augusto cierra las puertas.

-Es verdad lo qué dice mi hermano?

-No! Bueno si, es decir si estuve con él, y me arrepiento mucho de eso, no debí hacerlo, lo siento su majestad- se me escapan unas lágrimas.

-Es de él?

-No, no! Es de Louis, hace tiempo que terminé todo con él, con la última persona que estuve fue con Louis.

-No sabia que ustedes dos...

-Fue una estupidez, no debí dejar que pasará, no estaría así- lloro -No me quiere creer, ya no se que más hacer.

-No te preocupes, ya no te hará daño, te lo prometo, confiaré en ti pero espero que no me defraudes.

Asiento con nerviosismo.

Llama a Louis y salgo.

Nos quedamos con Magda escuchando a través de la puerta.

-Pero cómo mierda se te ocurre hacer eso!? Esta llena de moretones! Qué le has estado haciendo!?

-Te vas a poner de su lado- ríe con sarcasmo.

-Es tu esposa, la madre de tus hijos, te guste o no, si tanto la odias por qué la buscas!?

-La puedo utilizar como yo quiera, tu mismo lo dijiste, es mía.

-Asi como es tuya te harás cargo del bebé, es tu hijo y punto.

-Me vas a obligar hacerme cargo de un niño qué no es mio!?

-Es tuyo pero si quieres negarlo pues míralo de esa forma.

Esucho un golpe.

-La vuelves a tocar y yo mismo me haré cargo de ti, ya mucho hemos aguantado con tus niñerías.

-No podrás saberlo.

-Esa pobre chica ha aguantado tantas cosas por tu culpa desde que se casaron, no se suponía que tenías un hijo con otra mujer y ella no hizo nada más que aceptarlo?

Abren la puerta y nos alejamos.

-Laimer.

-Su majestad- se inclina un guardia que estaba a un lado de la puerta.

-Serás el nuevo guardaespaldas de la princesa Evangeline, vas a estar todo el tiempo con ella y me informaras todo lo que pase, especialmente con mi hermano.

Louis sale furioso y Laimer hace una venia.

Llegamos a casa y estoy muerta del miedo por las represalias de Louis, pero este se va al bar.

Tres meses han pasado. Mi vientre a este punto es bastante evidente y todos en el castillo saben de mi embarazo, las demás personas fuera de mi familia no saben nada y he decidido mantenerlo de esa manera el tiempo que pueda.

Son pocas las veces que he tenido que salir y en ellas siempre utilizo vestidos amplios para evitar que lo sepan.

Lilith esta emocionada por la llegada de su hermano, hace poco nos confirmaron que será un niño, creo que la suerte no esta muy de mi lado pues ahora será más notorio a quien se parece.

Louis, como en el embarazo de Lilith, esta ausente todo el tiempo, pocas son las veces que nos encontramos y creo que su desprecio y odio por mi es cada vez mayor desde que su hermano, el rey, se puso de mi lado.

Margaret llega ayudarme a organizar la fiesta de cumpleaños de Louis. Estoy haciendo esto a petición de mi hija pues nunca celebramos el cumpleaños de su padre ya que nunca esta, pero este año decidió hacerlo ella para poder pasar este día con él, no quise romperle sus ilusiones así que acepte.

-Lo que se hace por los hijos- me dice sonriente Magda.

-Ni lo digas, espero que este no tenga la misma idea- digo sobando mi vientre.

Llega el día y Lilith desde temprano me levanta para decorar todo aunque es el servicio quien lo hace.

Lilith le pidió a su padre llegar antes del trabajo pero vamos una hora esperando y no llega, veo su cara llena de ilusión y me rompe el corazón.

Margaret, Magda y su hijo nos acompañan, aunque ya todos estamos algo aburridos esperando.

-Lo llamaré- me dice mi pequeña que cada día crece más y hace poco cumplió 4 años.

-Lo haré yo- le digo pues se que no va a contestar.

Voy a la cocina y llamo pero como esperaba no contesta.

-Llegará pronto- le digo mintiendo.

Llega Laimer, ya que lo mande a buscar a Louis y para mi suerte regresa con él.

Ve todo el lugar decorado y frunce su frente, al unísono decimos "Feliz cumpleaños", sin mucha emoción, la única fan de Louis aquí es mi hija.

Ella corre a darle un abrazo que apenas corresponde Louis.

-Estás tratando de hacer las pases?- dice riendo con ironía.

-Fue idea de tu hija, me obligo hacer esto.

-Ahora hasta tus hijos te dan órdenes- tuerzo los ojos.

-Papi, te gusta tu fiesta sorpresa?

-Asi es Lilith pero tengo cosas importantes que hacer- acaricia su cabeza y se va.

Camino rápido tras él.

-En serio dejaras así a tu hija? Qué es tan importante? Tus amantes?- digo furiosa.

-Hablamos cuando ese niño que tienes ahí se parezca a mí- dice señalando mi vientre.

-No te desquite con ella.

-No lo hago pero debe ir aprendiendo.

Laimer llega para vigilarnos.

-Ya es tu nuevo amante?- tuerzo mis ojos y suspiro cansada de la situación -No te preocupes, no tienes nada que ir a contarle a mi querido hermano.

Regreso al salón y Lilith me abraza con fuerza y empieza a llorar, la consuelo como puedo aunque para ella esta ha sido su primera desilusión, y no es fácil que lo olvide.

-Papá no me quiere, verdad?- dice con su vocecita.

-No, no digas eso mi pequeña, ya te lo he dicho, hay personas que expresan sus sentimientos de distintas maneras, eso no significa que no sientan, si?

Afirma.

Otros 3 meses pasan y estamos desayunando los tres en silencio, cuando de pronto siento un dolor en mi vientre pero lo disimulo, pocos minutos después un dolor similar aunque más fuerte vuelve a presionar mi vientre y no puedo fingir, Louis me ve enojado.

Otra vez el dolor me ataca y un pequeño grito sale de mi.

-Mami estas bien?- pregunta asustada.

Intento responderle pero siento otro dolor y este es muy intenso y me hace gritar, las lágrimas salen sin mi permiso y aprieto mis dientes del dolor.

Louis se levanta enojado, otra vez el dolor me hace temblar.

-Papi haz algo! Mami no esta bien!- le grita Lilith y veo como Louis entra en razón.

-Qué te pasa?- me dice poniéndose a mi altura.

-El bebé- vuelvo a gritar por un nuevo golpe de dolor.

Se levanta y veo que no sabe que hacer, Laimer llega y corre enseguida al verme así, me carga en sus brazos y me sube a mi habitación mientras lloro y grito, Margaret llama al doctor y Lilith se va con las mujeres de servicio.

El dolor cada vez es más insoportable y me retuerzo del dolor, no entiendo bien que pasa, todavía no es hora.

El sufrimiento de las reinas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora