El sufrimiento de las reinas

5 meses

Han pasado ya dos meses, lo que quiere decir que tengo 5 meses de embarazo.

Cada día soy más consciente del hecho y debo de decir que más feliz. Ahora todo mi mundo se concentra en esto, en mi hijo o hija. Falta un mes para saberlo y me pone ansiosa cada vez que lo pienso, aunque estoy segura que será una niña.

Magda y Margaret han estado todo el tiempo conmigo apoyándome y haciéndome sentir mejor ya que estos dos últimos meses han sido complicados.

Los rumores de Louis y Clarisa son cada vez más. Llenos de fotografías y reporteros que están tras ellos. La gente ha comenzado a tener pena por mi y verme como una mártir lo cual lo detesto, no quiero que la gente me vea con ojos de tristeza ni crean que soy la persona que más sufre en el mundo, es verdad que a nadie le gustaría estar en mi posición, estar embarazada y que todos los días te digan que tu esposo te esta engañando y que miles de personas lo saben.

No he hecho nada para solucionar la situación, he decidió que estos meses serán para mi y mi bebé, lo que haga Louis no tiene que ver conmigo aunque los demás crean que si, ya no duele ni importa.

El rey tampoco me ha pedido nada ya que creo que entiende mi posición y ha tratado de mantener lo más ocupado posible a Louis ya que vio que no es una opción obligarlo a estar conmigo.

Los días que Louis esta en casa son de indiferencia total, no pregunta por el bebé ni nada, parece que ni si quiera se acuerda. Solo un día vi que poso su mirada en mi vientre pues ahora es claramente notorio hasta con la ropa, pero no dijo nada, al menos no me ha tratado mal, es puro silencio.

Hoy voy a la cita médica de control.

Casi no salgo de casa aunque ya es costumbre para mi estar ahí, por mi embarazo también prefiero no estar expuesta pues cada día que hay rumores hay gente fuera del castillo esperándome o si no por la calle gente se acerca a preguntarme por el embarazo y más cosas que me ponen incómoda.

A veces las consultas son en casa y otras deben ser en el consultorio ya que necesita de ciertos aparatos.

Llegamos con sigilo esperando evadir a todos, Magda me acompaña y entramos. Me acuesto en la camilla y alzo mi blusa y mi pantalón lo bajo para dejar libre todo mi vientre, el doctor empieza a examinar y me informa que todo esta en perfecto estado, su peso, latidos, tamaño, desarrollo, y una sonrisa sale de inmediato.

Logramos entrar en el auto sin ser vistas. En el camino acaricio mi vientre apreciando la rodondes de este, y Magda me mira feliz.

-Sigues creyendo que será una niña?

-Si- digo con una gran sonrisa.

-Será una hermosa reina.

Lo único que me conflictua aún es el hecho que este bebé será rey o reina, siento que es mucha presión para un niño, nacer con ese título tan prometedor, además no se si pueda educar bien aún futuro líder y eso me da mucho miedo.

Estamos en un semáforo mientras veo por la ventana unos niños corriendo y sus padres detrás, pero dejo de ver la escena por un carro que se para a nuestro lado.

La ventanilla del auto se baja y una mano se estira para botar algo y veo dos rostros, el primero que miro es el de Louis y a un lado veo a una mujer de cabello negro y solo logro ver una sonrisa de lado.

Bajo mi ventanilla y me quedo viendo a su dirección, cuando esta por subir la ventana regresa a ver a mi dirección y nota mi presencia, abre sus ojos como platos y sube rápidamente la ventana y yo hago lo mismo.

Nadie más se ha dado cuenta, solo nosotros.

Llego a casa y Magda se despide pues se va de regreso al palacio.

Me quedo en la sala leyendo el libro que no he soltado todas estas semanas. Estoy totalmente adentrada en el mundo de mi libro que no noto la presencia de Louis frente a mi hasta que me quita el libro de mis manos.

-Por qué?- digo abriendo mis ojos extrañada.

-Qué hacías afuera?

-Fui a consulta- se queda frío, veo como sus ojos se abren y se queda sin saber que decir, imagino que acaba de caer en cuenta que hace dos meses ni siquiera a preguntado como esta el bebé.

-Esta bien? Pasó algo?- dice tratando de fingir que en su rostro no hay una leve preocupación.

Me sorprendo por su reacción, es la primera vez que lo veo en serio preocupado.

-Si, solo es el chequeo del mes.

-No sabia que era cada mes- dice sirviéndose una copa.

No respondo nada y cojo mi libro que lo dejo en el asiento de a lado y sigo leyendo.

-Ya sabes qué es?

-El próximo mes lo sabre.

-Está yendo bien?

-Si, todo esta bien- trato de no sonar cortante o fría pero no se como hablar con él.

-Ya se te nota, ahora si- no entiendo bien lo que reflejan su rostro. Toma otro sorbo del vaso -Vas a engordar más?- pregunta burlándose y sale del lugar.

Agacho mi cabeza y siento como mis ojos se empiezan a mojar.

No debería sentirme mal por ese comentario, me repito varias veces, es una tontería lo que acaba de decir pero aun así me dolió... deben ser las hormonas.

El mes ha pasado y mi vientre a crecido aún más, faltan solo 3 meses más y conoceré a este pequeño ser.

Estamos en el comedor los dos y me levanto para irme pues ya terminamos de comer pero Louis esta leyendo el periódico, salgo de la mesa y camino unos pasos pero me detengo en seco y mis manos corren acariciar mi vientre.

-Qué te pasa?- pregunta algo asustado Louis.

Me quedo estática esperando a sentir otra patada en mi interior pero parece haberse calmado con mis caricias, es la primera vez que lo hace.

Hace unas semanas empezó a moverse y fue una sensación muy extraña, llena de sentimientos, y como las hormonas están a flor de piel, como los antojos, me puse a llorar mientras acariciaba mi vientre. Magda y Margaret pudieron sentir hace unos días como se movia y ellas también casi lloran conmigo, Louis no ha sabido nada de esto.

Siento que se aproxima otra patada y volteo y ahí esta Louis algo enojado porque no le respondí, cojo su mano sin permiso y la coloco encima de mi vientre donde creo que pateara, se mueve y un segundo después patea haciendo que la piel se mueva, Louis abre los ojos como platos y se queda con la mano ahí hasta que deja el bebé de moverse.

Cuando reacciona quita su mano rápidamente y veo que se enoja.

-Lo siento- digo bajando mi mirada.

Supongo que debió enojarse porque agarre su mano de esa manera.

-Por qué no me dijiste que ya hacía eso?

-Es la primera vez que lo hace.

Y caigo en cuenta que Louis ni siquiera a tocado mi vientre, solo esa vez que tuvimos relaciones días después que se entero que estaba embarazada pero ahí casi ni tenia panza.

Sin decir nada pasa por mi lado golpeando mi hombro con su cuerpo.

Suspiro pesadamente.