OHM
Dos minutos después ya estábamos dentro del auto camino al hospital. Me quede viendo desde la ventana del vehículo en el lugar del copiloto, respirando hondamente sin pensar en cosas innecesarias. Tenía que demostrarle a Co que todo estaba bien, y que no perdería el control como él suponía.
— Ohm — habló de repente. Despegue los ojos de la ventana para observarle —Si aquel cuerpo resulta ser el de Nanon... Eso no significa el final de la investigación.
— No entiendo...
— El cuerpo que hemos encontrado posee signos de haber sido maltratado. Muy posiblemente lastimado... Hasta la muerte — pronuncio en voz baja. Trague saliva.
— Asesinado — comprendí en voz baja.
— Exacto — los ojos de Co giraron un segundo hacia los míos para analizar mi expresión, pero luego se volvieron rápidamente a la calle que estábamos recorriendo — El caso no se cierra hasta saber qué fue lo que le paso a la víctima exactamente.
— ¿Por eso no pudieron reconocerlo al instante? — pregunte ignorando lo anterior. Deje que mi visión se posara sobre mi regazo, en donde mis manos descansaban una a lado de la otra, ambas sudadas ù No lo reconocieron porque rostro esta severamente... Lastimado.
— Sí, pero fuera de esto, el cadáver respeta en su mayoría la descripción física que tenemos sobre Nanon.
— Estoy seguro de que es una coincidencia — volví a afirmar, y escuche como Co suspiraba a mi lado.
— Eres tan obstinado — resoplo, pero no hubo atisbo de enojo en su voz. Solo resignación.
Nunca antes había estado en una morgue. Solo había visto algunas en películas que para nada reflejaban la realidad. A la hora de la verdad, todo resultaba mucho más impactante, eso lo tenía bien en claro, pero... Definitivamente yo no estaba preparado para algo así, para algo de esta magnitud. Ni siquiera me había imaginado lo que estaba a punto de presenciar mis ojos ignorantes. Para mi desgracia, aquello lo descubrí, recién cuando logramos pasar a los guardias de seguridad gracias a Co, y entramos al lugar, que se encontraba sumergido en lo más bajo del hospital. Solo entonces me di cuenta de que mis sentimientos no estaban perfectamente bajo control como yo lo suponía, pero ya era tarde para echarse para atrás.
Mientras Co cerraba con llave la puerta de entrada de la morgue por si acaso, yo me limite a permanecer inmóvil y casi pegado y encogido por completo en una pared, observando todo con los ojos temblorosos.
El gran cuarto estaba dividido por una gran pared de vidrio ubicada justo en el centro, la cual dejaba ver por su transparencia lo que estaba por el otro lado. Todo el lugar parecía un baño gigante por los tipos de azulejos pequeños y apagados que lucían en las paredes enteramente limpias al igual que el suelo y el techo. Claro que no había artículos de baño en el interior de la gigantesca habitación; solo había grandes estanterías de acero inoxidable pegadas contra una de las paredes de fondo, la cual se encontraba a su vez del otro lado de aquella pared de vidrio.
Eran muchísimas estanterías. Había otras más pequeñas, muebles metálicos con cajones que supuse, se guardarían elementos para inspeccionar los cuerpos y tal, pero no le preste nada de atención. Mis ojos se habían quedado clavados en aquellas otras estanterías gigantes y largas que seguramente resguardaban camillas en el interior de esas gavetas. Camillas en donde apostaba que se encontraban los cadáveres.
De pronto ya no quise cruzar aquella pared divisoria de vidrio.
Bajé la mirada lentamente cuando Co paso a mi lado, y comenzó a caminar con su tranquilidad habitual hacia un armario blanco y de metal que estaba de nuestro lado, y que yo antes no había visto. Lo abrió con la confianza de alguien que sabe lo que está haciendo y saco de allí una bolsa transparente que en su interior contenía una bata blanca, un tapabocas y guantes que parecían ser de látex. Volteo para verlos con ojos neutros y luego me tendió aquella vestimenta doblada de hospital sin mencionar palabra alguna.
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Sin luz || OhmNanon
FanfictionAmar te marca. Te hace dejar a un lado tu egoísmo y entregar tu corazón a otra persona. Exponerte a tal grado de darle el poder de curarte y dañarte sin contemplaciones. Amar es sacrificio, es creer en lo que nadie cree. Es querer proteger a la otra...