10. Muchos Secretos

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A Carl por fin lo dejaron salir de la cama, ahora nos encontramos con Lori alimentando a las crías de las gallinas.

Arrojamos semillas para que ellos puedan comerlas.

Carl: No te preocupes tanto —miramos a Lori.

Lori: Es mi deber.

Carl: No lo es —le dijo —. Eres ama de casa.

Lori: ¿Eso piensas? —nos arrojó semillas, nosotros reímos —. ¿Ves mi casa por aquí?

Miramos a unas crías que están solas, parece que su mamá no está con ellos o cerca.

Carl: No tienen mamá

Lori: Debe andar por ahí —nos dijo.

Cristel: Quizás se la comieron —Lori nos miró sorprendida.

Carl: Todo es comida de alguien más —asentí.

Seguímos alimentando a las gallinas.

Lori: Debo de ayudar con las cosas, vayan a jugar pero no tan lejos —nos dijo.

Carl: Si, mamá —tomó mi mano, empezamos a caminar al campamento —. ¿Ya hablaste con Glenn sobre aprender a usar un arma?

Cristel: Dijo que aún lo sigue pensando —le dije.

Carl: Debemos encontrar la forma de aprender —frunci el ceño —. Quizás Shane acepte enseñarnos.

Cristel: ¿Crees que acepte? —asentio —. Pero… no sé, creo que debemos esperar.

Carl: Bien, como quieras —suspiró frustrado —. Pero de alguna forma debemos aprender.

Cristel: Si, lo sé —solté su mano —. Iré con mi papá.

Carl: De acuerdo.

Camine hacia la casa rodante, lo vi hablando con Maggie.

Cristel: Papá —ellos voltearon a verme —. ¿Los interrumpo?

Maggie: No, descuida —se acercó y acarició mi mejilla —. ¿Cómo estas, Cris? ¿Dormiste bien?

Cristel: Si, gracias por preguntar —sonreí un poco.

Ella se fue y mire a papá, lo mire confundida al vuelto tan preocupado y distraído.

Cristel: ¿Papá? —me acerque a él —. ¿Qué sucede?

Glenn: Nada, no te preocupes —me alzó la canasta con fruta que tiene —. Toma uno, anda.

Cristel: Si —tome una manzana —. Oye, sobre aprender a usar un arma…

Glenn: Cristel…

Cristel: Por favor —le pedí —. Si no lo necesitará no te lo pediría, permite que aprenda a usarla.

Glenn: De acuerdo —frunci el ceño —. Hoy harán prácticas, puedes ir con ellos. Pero por favor ten mucho cuidado.

Cristel: Si… papá —él se fue.

Que extraño, se estuvo negando ayer y ahora me dijo que si y se mira muy distraído y preocupado.

Algo le está pasando.

Me acerque a la casa de acampar y entre a la casa para tomar mi arco y carcaj.

Me coloque el guante primero y luego el carcaj en la cintura y ajuste la corra en mi pierna.

Daryl sigue herido, pero me dijo que siga practicando con las instrucciones que me dio.

Me aleje un poco del campamento y me coloque delante de un árbol, a unos metros de distancia de mí.

𝙻𝚊 𝙷𝚒𝚓𝚊 𝙳𝚎 𝙽𝚎𝚐𝚊𝚗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora