27. Diferentes Caminos

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Mamá y yo pasamos la noche con papá, anoche cuando casi eran las doce le pudimos quitar la bolsa ya que se ahogaba.

Esos significaba que ya podía respirar por su cuenta.

Al despertar nos miró con una gran sonrisa, aunque sigue bastante débil.

Mamá y papá se abrazan que ni siquiera se dan cuenta que tomé la cámara, hasta que tome una fotografía.

Glenn: ¿Qué estas haciendo? —reí mientras tomó la fotografía.

Cristel: Ahora ya tengo dos —se las mostré.

Maggie: Quiero ver —se las mostré.

Donde estoy con papá y ahora está.

Maggie: Deberíamos tomarnos una tu y yo —asentí entusiasmada.

Glenn: Dame —le entregue la cámara.

Me acerque a mamá y nos abrazamos, nosotras sonreímos cuando papá tomó la fotografía.

Glenn: Está me la quedó yo —rodé los ojos divertida, él volvió a acostarse.

Tomé la cámara y la dejé en la pequeña mesa, mamá se sentó al borde de la cama y tomó su mano.

Glenn: Me vendrían bien unas vacaciones —reímos un poco —. Escaparnos. Por el fin de semana, dejamos a Cris al cuidado de Daryl.

Maggie: Si.

Cristel: Hey —rieron.

Maggie: Nunca iríamos a ningún lugar sin ti —me abrazo.

Cristel: Papá si —bromee.

Glenn: Eso no es cierto —dijo riendo, tomó nuestras manos y miró a mamá —. ¿Sabés? Se acerca nuestro aniversario.

Maggie: ¿En serio? —preguntó divertida.

Glenn: Alguno de estos días —reímos.

Maggie: ¿Alguna vez estuvieron en las Cascada de Amicalola? —nos preguntó —. La más alta de Georgia.

Ambos negamos al mismo tiempo.

Maggie:  Mi papá me llevó cuando era pequeña —nos dijo —. Estar allá arriba, desde el borde, mirando hacia abajo, me sentía como si volará.

Glenn: Bueno, iré a preparar las maletas —sonreí.

Mamá me atrajo hacia ellos para abrazarnos los tres, nos separamos.

Maggie: Te traeré un poco de agua —le dijo.

Glenn: No, puedo hacerlo.

Maggie: Lo sé. Pero quiero hacerlo —nos levantamos.

Cristel: Yo iré a preparar mi maleta —lo hice reír  —. Debo ayudar, se supone que ya debería estar ahí.

Glenn: Suerte —lo abrace y salí de la celda.

Me fui antes que mamá, seguro Carl me hará hacer su parte por llegar tarde.

Corrí lo más rápido que pude hasta salir al patio, vi a Carl cerca de la puerta con los brazos cruzados caminando de un lado a otro.

Rode los ojos divertida, seguí caminando hacia él.

Se detuvo cuando volteo a verme, su semblante cambió a muy serio.

Carl: Llegas tarde —bufé.

Cristel: Ni tanto, estaba con mi papá —le dije.

Carl: Bien, pero te tocará hacer todas las tareas —lo mire molesta —. Es tú castigo.

𝙻𝚊 𝙷𝚒𝚓𝚊 𝙳𝚎 𝙽𝚎𝚐𝚊𝚗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora