AYLEN
Primera noche. Y ya estoy más que aburrida. En mi casa por lo menos tengo con lo que entretenerme, pero aquí no. Solo he venido con lo básico y ahora creo que no es suficiente.
– Oye – le toco el hombro a Adam.
– Mmm – gruñe adormilado.
– No tengo sueño. Y me aburro.
Nunca me puedo dormir antes de las doce. Y son casi las once. Necesito algo para distraerme y que me de sueño. Pero lo veo poco factible.
– Date calabonazos contra la pared. A mi que me cuentas.
Le pongo cara de asco y cierra los ojos de nuevo. Él no tiene problema en dormir, por lo que veo.
Debería descansar, mañana tengo universidad. Pero entre que no estoy en mi hábitat y que de verdad tengo los ojos como platos...
Una idea viene a mi cabeza y me levanto de la cama. Es eso o nada.
Salgo de la habitación y toco a la puerta de Kenneth. Cuando abre, se me olvida a lo que había venido.
Solo tiene un bóxer puesto. Y puedo observar perfectamente todo su cuerpo. Le doy un buen repaso antes de levantar mi vista a la suya.
Enarca una ceja esperando a que hable.
– ¿N-no tienes frío? - me aclaro la garganta.
– No – responde simple.
– Ah.
Vuelvo a darle un repaso y quiero derretirme.
Tiene todo el cuerpo musculoso, sin ninguna excepción. Me dan ganas de pasar los dedos por los abdominales marcados. O la lengua, ya que estamos.'Concéntrate, Aylen, tienes novio'.
Cierro los ojos con fuerza y sacudo la cabeza.
No, no puedo pensar esas cosas.– ¿Tienes netflix? - pregunto al fin.
– Eh... - frunce el ceño.
Alomejor aquí no existe eso. Todo puede ser. Parece extrañado. Ido.
– ¿Sabes lo que es?
– Si. Si tengo.
Dios, menos mal.
– Hay una tele en nuestra habitación. Y no puedo dormir – explico.
Se da la vuelta y me tengo que llevar la mano a la boca para no babear. Vaya espalda, señor. Debería ser un delito ver ese cuerpo y no disfrutarlo.
Vuelve hacia mi y me da un papelito pequeño.
– El usuario y la contraseña.
– Vale – asiento – Gracias.
Me doy la vuelta obligadamente y me encamino hacia la habitación. Seguro que sueño con ese cuerpo de muerte.
– Aylen.
– ¿Sí? - me doy la vuelta rápidamente.
Sigue apoyado en el marco de la puerta.
'No tiembles, no tiembles'.– Acercate – pide.
Me muerdo la lengua e intento no mostrarme nerviosa. Quiero parecer atrevida delante de él. Y de sus amigos. Que no crean que me da miedo estar aquí.
Entra en su habitación de nuevo y busca algo en unos cajones. Mientras, observo su cama grande desecha. ¿Lo habré despertado? Las sábanas son blancas y la cama en general parece más cómoda que la nuestra. No sé por qué.
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KHAIDAL [+18] [TERMINADA]
RomanceElla es una chica aparentemente normal. Viviendo con su compañero de piso, estudiando en la Universidad, disfrutando con su novio... Pero la vida le cambia de un día para otro cuando encuentra un mundo paralelo al suyo. Uno, que, supuestamente, tam...