Su jefe era un tirano por el día y un playboy por la noche; y él solo era su asistente hasta que le propone un nuevo contrato.
-¿Cómo su asistente personal?
-No. Como mi prometido.
¿Qué puede suceder cuando ambos se detestan y tienen que actuar ena...
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Más tarde...
—Estoy seguro que te molesta eso del ascenso, Jungkook. ¿Pero qué quieres que haga?
—Búscame otro trabajo. Eso quiero que hagas.
Yoongi soltó la copa con una carcajada seca.
—Bien, ya te lo dije. Con tu currículum, puedo conseguir cualquier trabajo que quieras… menos aquí.
—¿Por qué? Mis campañas hablan por sí solas.
Min carraspeó al mismo tiempo que soltaba una carcajada.
—Claro, lo mismo que tu personalidad.
—Ser directo y exigente funciona a la perfección, Yoongi.
—No me refiero a eso, Jungkook.
—¿Entonces?
Yoongi se acomodó en su asiento y ajustó su corbata antes de continuar.
—Tu reputación y por varios motivos evidentes. Lo sabes. Choi 's Company es una empresa familiar. Se basan en dos principios: la familia y la integridad. Además, saben muy bien a qué clientes elegir.
Jungkook soltó un resoplido.
—Puedo trabajar según sus condiciones.
—No se trata de eso. Choi Dong Wook es un hombre familiar y dirige su empresa de la misma manera. No contrata a cualquier cliente, sino uno con los mismos valores que él. Y bueno… digamos que tu vida personal no sería… aceptable.
—Bueno, terminé con Sana hace meses.
Sana. Su ex que cayó en todos los titulares por alto indicio de consumo de drogas luego de que cayera en la pasarela durante un desfile. Terminaron mal o mejor dicho él terminó con ella, añadiendo otro decadente a su reputación.
—No se trata de Sana. Tienes una mierda como reputación. Te acuestas con cualquiera en la noche y un tirano por el día. Nada de eso le gusta a Choi.
—Entonces, considérame un hombre reformado.
Yoongi no puedo evitar soltar una sonora carcajada. ¿Acaso era una broma? Jungkook podía ser gracioso cuando se lo proponía.
—Es que ni entiendes nada. Mi novio, Taehyung, trabaja allí como su asistente personal y sé cómo funciona. En la vida he visto una empresa así. También sé que uno de sus directivos está a punto de marcharse porque ha decidido estar con su esposa enferma.
—Oh… ya. En ese caso, necesita un sustituto. Consígueme una entrevista.
—¿Has escuchado algo de lo que te he dicho? Choi no te va a contratar.
—Lo voy a convencer.
—¿Estás seguro de presentar tu renuncia a MinJae?
—He cambiado de idea. MinJae odia a Choi. Le molestaría que me vaya con la mano del enemigo. Voy a conseguir que Choi me contrate, y cuando MinJae quiera recuperarme, me tocará a mí decir eso de que las cosas han cambiado.
—Pareces seguro.
—Lo estoy. Ahora solo falta pensar en una idea.
—Bueno si vas a pensar en una idea. Tienes la solución más cerca de lo que crees.
—No entiendo.
—Nada, idiota. De verdad, no sé para qué tienes la cabeza.
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