Luv Deal | Kookmin au ✔

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Jimin acabó con la poca distancia que los separaba. Juntó sus labios con los de Jungkook, siendo correspondido en un beso ansioso y caliente.

Le gustaba como su esposo movía sus labios en sincronía, en como su lengua jugaba con la suya y al separse le mordía, haciéndole gemir bajito.

Jungkook lo tocaba de manera delicada, una mano acariciando su rostro sin dejar de besarle y la otra paseando por su pierna, subiendo hasta el borde su pantalón.

—Jimin, voy a perder el control si sigues besándome de repente —susurró contra sus labios.

Jimin no respondió y lo besó de nuevo, pero está vez se dejó llevar por la necesidad de sentir a Jungkook más allá de un roce de labios.

—Piérdelo, Jungkook... Tócame, hazme tuyo.

Jungkook atrapó sus labios y lo besó provocando un chasquido al separase. Acarció la mejilla de Jimin y delinió sus labios con el dedo.

—¿Estás seguro?

Jimin asintió, subió sus manos paseando por el pecho de Jungkook. Tomando el cuello de su playera para atraerlo más hacia él.

Sus alientos chocaban por la poca cercanía de sus rostros. Ambos se miraban a los ojos, los dos sabían lo que querían. La erección de ambos los delataba.

Jimin se acercó y tomó el labio de Jungkook con sus dientes. Jalando poquito, haciendo que este jadeara y pusiera ambas manos en su cintura apretando y luego bajar hacia su trasero.

—Perdamos el control —fue lo único que respondió Jimin y eso fue suficiente para ponerlo más duro.

Cuando Jimin dejó su labio libre. Jungkook aprovechó para ponerse encima de él, abriendo sus piernas y posicionarse en medio.

Jungkook se acercó a él y sonrió, besando sus labios y descender hacia su cuello. Jimin abrió su boca gimiendo bajito, sintiendo los delgados y húmedos labios de su esposo mordiendo y succionando dejando pequeñas marcas sobre su piel.

La ropa estaba siendo un estorbo para ambos. El primero en quitarse la playera fue Jungkook y luego se lo quitó a su esposo, admirando su cuerpo y acercándose nuevamente a él para besar sus clavículas y bajar hasta el borde su pantalón.

Jungkook miró de reojo a Jimin mientras bajaba la prenda y la tiraba por algún lugar de la habitación. Observó como su Jimin mordía sus labios, levantando la pelvis, queriendo más.

Comenzó a jugar con el elástico del bóxer y comenzó a bajarlo lentamente, deslizando hasta los pies de Jimin. Ahora estaba completamente desnudo y era solo para él.

Besó la punta de los dedos de los pies de Jimin, subiendo hasta sus piernas. Con sus manos masajeando y acariciando.

La piel de su esposo era suave y cálida, le encantaba. Siguió con su camino de besos hasta llegar a su entrepierna. Jungkook levantó el rostro para mirarlo, Jimin estaba con los ojos cerrando y su pecho subía y bajaba mientras sus manos apretaban las sábanas.

Sé acercó a él y besó sus labios. Sabía que Jimin estaba nervioso, por más deseo y placer que ansiaran sabía que era su primera vez.

—Cariño —susurró—. Sea el momento que sea, cuando tú quieras yo voy a parar.

Jimin asintió y unió sus labios. Jungkook acariciaba su cuerpo, sintiendo cada parte de él. Apretando.

sus manos se deslizaban por su abdomen, por sus piernas, por su cuello sin dejar de besarlo. Le gustaba ser tocado por él, despertaba sensaciones que jamás había tenido.

Jungkook se separó de su rostro y llevó dos de sus dedos a su boca. Chupó, humedeciéndolos con su saliva sin entender que era lo que haría

lo besó de nuevo, pero cuando sintió un intruso en su interior, gimió alto. El dedo de Jungkook entraba y salía, y los gemidos de Jimin eran cada vez más. aferrándose a su hombro y escondiendo su rostro en el cuello de su esposo.

Todo era nuevo para él. Sentía dolor y placer al mismo tiempo y, de alguna manera, le fascinaba lo que su cuerpo sentía.